Los cambas, estropajos del gobierno


Ismael Schabib Montero*

Vicealmirante Ismael Schabib Para la opinión pública nacional no debe ser extraño que cada vez que el gobierno tiene problemas que pueden dañar aún más su deteriorada imagen, recurre a algún truco publicitario para distraer la atención de la población, y uno de sus principales argumentos es atacar a su antojo a la oposición atrincherada en el oriente, a los cambas de la oposición, a los cruceños, benianos y pandinos. Nos hemos convertido en los estropajos del gobierno.

Estropajo, según el Pequeño Larousse significa también “…//Fig. Cosa inútil o despreciable: tratar a uno como a un estropajo//, los cambas, para el gobierno, somos una veta rica para explotar, para provecho publicitario, porque nos ha estigmatizado ante la opinión pública internacional y nacional como separatistas, divisionistas, derechistas, racistas, oligarcas, y como sólo encuentran droga en Santa Cruz, también como narcotraficantes, entonces cuando se estrellan contra los opositores, esa opinión pública internacional podría pensar que sobran motivos, y por lo tanto es una acción patriótica y de justicia, amedrentarlos, apresarlos, llevarlos a los lugares más fríos, tratarlos como a prisioneros de guerra, llevarlos a “sus dominios”.



Habría que preguntarse qué persigue el gobierno ante esta nueva arremetida, si reemplazar al Gobernador del Beni, o si es un lío inventado para distraer la atención sobre problemas como el narcotráfico, donde el Sr. Presidente ha tenido la mala fortuna de declarar públicamente que teme que sus enemigos “yanquis” le pongan droga en el avión presidencial en su visita a la sede de la ONU, a Nueva York, para algunas o muchas personas esto ha sido un indicador que las declaraciones del Gral. Pol. Sanabria ante un tribunal en Miami, han empezado a surtir efecto, ponen nerviosa a algunas personas, porque no han olvidado lo que pasó con el Gral. Noriega en Panamá, o tal vez porque el propio Presidente ha vuelto a manifestar en público la necesidad de quitar la subvención a los carburantes y esto causa un rechazo total inmediatamente, o porque la elección de personas para conformar el poder judicial se les está poniendo difícil porque no han podido ocultar sus perversas intenciones.

Nos llegan señales desde el exterior que nos hace pensar que esta forma de actuar ya les causa sospecha, que el gobierno del MAS está compuesto por gente que aprovecha la propaganda para victimizarse y que la lucha contra la corrupción y el narcotráfico en Bolivia son puro cuento, que este es un país donde la democracia ha perdido terreno y donde la persecución y el amedrentamiento del adversario político es lo que se impone, muy parecido a la finalidad del terrorismo, poner bombas y matar gente para captar a la población por el miedo. Pero este asunto de tratar como estropajos a los cambas y a otros políticos como el Ing. Guillermo Fortún Suarez, ciudadano de edad avanzada, que mientras no se postuló como candidato a Alcalde por la ciudad de La Paz, nadie lo molestó, es una siembra maligna que atenta contra la unidad nacional, y no me cansaré de repetirlo, nunca los bolivianos, entre bolivianos, nos hemos sentido tan diferentes como en este gobierno, no hay que ser mago para percibir que mucha gente cuenta los segundos para amanecer un día con la noticia de que estas personas ya no nos gobiernan y que llegó la “hora feliz” de aplicarles la misma metodología, la misma medicina. Imaginan que a los inquisidores nacidos y radicados en el Occidente se los llevaría a una cárcel del Oriente, no sólo caliente y húmeda sino llena de mosquitos y otros insectos, como hormigas Tucanderas y petos “chuturubí”, dicho de otra manera: venganza, odio. Pero alguna gente se preguntará qué medidas se tomarían contra aquellos orientales que sirven de relleno en este gobierno y son tontos útiles, que se prestan para tratar como a estropajos a su propia gente, vale decir, a sus vecinos, a los de su fraternidad, a sus parientes, a sus colegas, a la gente que vieron nacer y sufrir el abandono del centralismo, con la que se criaron, a sus amigos…en poblaciones del Beni y Pando, donde todas son pequeñas y las mismas personas se ven las caras todos los días.

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El odio está ganando terreno y esto es peor que la corrupción y el narcotráfico, la ciudad de Trinidad, Capital del Beni, actualmente es una muestra tangible. Pobre Trinidad, tan frágil y vulnerable y le cae esto encima.

En el futuro algunas personas tendrán que ser juzgadas y castigadas por traición a la patria, los autores del Artículo 3 de la actual constitución Política de Estado, y los que permiten que cubanos y venezolanos manden en Bolivia, por menoscabar a la bandera nacional parangonándola con otra como si fuéramos un Estado asociado, otros por genocidio por promover la matanza de la ciudad del Alto en “Octubre Negro” del 2003 para derrocar a Sánchez de Lozada, por lo de “Porvenir” en Pando, por lo de la Kalancha en Chuquisaca, por lo del Hotel “Las Américas” en Santa Cruz de la Sierra, por calumnias en el caso de “terrorismo”, por violar los derechos humanos… porque que han tenido la pésima idea de mezclar lo racial y lo religioso con la política, la peor enfermedad de los pueblos, y a algunos militares por meter la política partidista en las FFAA y permitir que los extranjeros derrotados en 1967 ahora los manden, por hacer en el tiempo, de la victoria cierta en Ñancahuazú, una derrota.

Hay que ponerse las pilas para ganar las elecciones del 2014, para poner freno, principalmente al avance del odio, y el Oriente, especialmente Santa Cruz que es la principal trinchera de la oposición, debería dirigir esa cruzada a nivel nacional, salvar a Bolivia de los genocidas-racistas, el premio que recibirá sería ganar merecidamente más terreno político y consolidar su liderazgo a nivel nacional y recibir la eterna gratitud de quienes nos sentimos bolivianos y cobijados por nuestra hermosa tricolor.

Damas y caballeros: Bolivia tiene en nosotros los cambas a su mejor esperanza, tenemos una cita con la historia el 2014. Empecemos a calentar motores, las elecciones judiciales son una oportunidad para probarnos. Coordinemos acciones con los bolivianos del Occidente del país.

Mi voto será nulo.

*Vicealmirante de la República de Bolivia