Siglo 21 Nº 1063

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El auge de la droga

Datos ejecutivos



Versionero político

La alianza con Chile

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Temores de fraude

Cambios ante la crisis

Metas e hipocresías del G20


El auge de la droga

La más grande fábrica de cocaína de Bolivia fue descubierta por la policía en la Chiquitanía cruceña la semana pasada, lo que es un triunfo claro para el gobierno y su nuevo estilo de combatir el narcotráfico, sin ayuda de la DEA.

En 1986, cuando se descubrió la que por entonces fue la mayor fábrica de cocaína, en Huanchaca, la DEA demoró algunos días antes de revelar su hallazgo, días que fueron fatales para el científico Noel Kempff, muerto a los pocos días por los delincuentes.

El gobierno de Morales no tuvo tiempo para hacer una gran bulla con el descubrimiento de ahora, debido a que el ministro de Gobierno estaba ausente del país, pero ya se compensará.

Por el momento, el descubrimiento permite confirmar que en Bolivia se está viviendo el auge de la producción de droga. El primer indicio es que ha crecido la superficie cultivada, el segundo es que el tráfico de drogas ha crecido, como que han aumentado los decomisos, y el tercero es el descubrimiento de fábricas de droga en todo el territorio.

El gobierno ha dicho que si hay más decomisos de droga y descubrimientos de fábricas es porque ha aumentado la eficiencia de los esquemas de control, pero los análisis de la DEA dicen que esos éxitos son solamente la prueba de que la actividad ilegal ha aumentado. Habría una relación proporcional invariable entre hallazgos y volumen del crimen.

Este descubrimiento se produce en la semana en que la secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, admitió en México que los consumidores de su país tienen un “apetito insaciable por las drogas ilícitas”.

La actuación de la señora Clinton da la razón a quienes justifican el incremento de la droga, e incluso de la materia prima, con la existencia de una demanda creciente.

De todos modos, las autoridades norteamericanas mantienen el pedido a Bolivia de que reduzca la producción de coca.

Datos ejecutivos

Ingre: La perforación de un pozo en el campo Ingre quedó frustrada por la trabazón del trépano a 5.100 metros y del segundo intento a 3.000 metros.

Palmar: Las empresas GTL y Jindal iniciaron la perforación de un pozo en el campo petrolero El Palmar, que costará US$ 7MM.

Oleaginosas: El gobierno anunció la eliminación de las trabas que están frenando las exportaciones de oleaginosas.

Gas: Las exportaciones de gas a Argentina están en 4,5MM m3/d y a Brasil en 19MM m3/d.

Uruguay: Se abren las posibilidades para exportar gas a Paraguay y Uruguay.

Brasil: El promedio mínimo mensual de las compras de gas por parte de Brasil es de 19MM m3/d y el promedio mínimo anual de 24MM m3/d, recordó Petrobrás.

Crisis: El ministro de Economía, Luís Arce, dice que la crisis internacional impactará en Bolivia en el segundo semestre, aunque la minería ya está muy afectada.

Diesel: Las importaciones de diesel oil no tendrán restricciones de abril a agosto.

GLP: El caos dejado por la corrupción en YPFB provoca, entre otras cosas, que no exista el servicio de control de buen funcionamiento de las garrafas de GLP.

Ropa: Este martes el gobierno tomará una decisión final sobre el futuro de las importaciones de ropa usada, un sector donde dominan 25 familias.

BoA: Los aviones de Boliviana de Aviación son acondicionados por la empresa chilena ENAER.

Sirese: La Cámara de Exportadores (CADEX) ha hecho notar que el gobierno no puede anular la ley del Sirese con un Decreto Supremo y exige la permanencia de las superintendencias.

Chile: El año pasado el déficit boliviano en la balanza comercial con Chile fue el más alto de la historia: exportaciones por US$ 77MM e importaciones por US$ 349MM, con una diferencia negativa de US$ 273MM.

Drogas: Según cifras difundidas por CNN, los norteamericanos destinan a la compra de drogas ilícitas hasta US$ 38.000MM.

Versionero político

• Los prefectos opositores quieren crear un instrumento para asegurar que la oposición al MAS se presente unida en diciembre.

• La candidatura que más simpatías genera es la de Víctor Hugo Cárdenas, que iría junto con alguien de la “media luna”.

• El gobierno se frenó en su intención de detener a Mario Cossío, pero no ha levantado las manos.

• Los prefectos se proponen seguir denunciando en el exterior lo que consideran los atropellos del gobierno.

• Han llegado observadores internacionales, invitados por los prefectos, para observar el cerco al parlamento, esta semana.

• La Unión Europea insistirá en la necesidad de que sea revisado el padrón electoral.

• Las críticas de la ONU a las torpezas del estado de sitio en Pando fueron recibidas con molestia por los ministros encargados, pero el presidente les ordenó evitar hacer comentarios.

• Hay en el gobierno una sensación creciente de que han surgido dos tendencias: la de los que quieren una buena gestión y de los que sólo buscan objetivos políticos lejanos, o sus propios intereses.

• El presidente exige a sus colaboradores resultados positivos de gestión pública desde ahora hasta noviembre.

• Quiere inaugurar por lo menos tres obras en cada departamento como parte de su campaña para la reelección.

La alianza con Chile

Bolivia demoró 130 años para cambiar sus simpatías en las disputas de sus vecinos que lo separan del Pacífico. En 1879 Bolivia estuvo aliada con Perú después de la invasión chilena de su territorio costero, pero ahora actúa en alianza con Chile.

Hace 130 años, los peruanos quedaron decepcionados de sus aliados bolivianos, pero esta vez Chile está logrando de su nuevo aliado gestos de solidaridad y de entrega que ya hubieran querido los peruanos durante la guerra.

Lealtad con Chile: La semana pasada se produjeron los más llamativos gestos de la seriedad con que Bolivia quiere responder a su alianza con Chile. El presidente Evo Morales comenzó la semana, el 23 de marzo, “Día del Mar”, acusando al Perú de perjudicar la eventual solución del reclamo boliviano de una salida al mar con la demanda que presentó contra Chile en La Haya por las aguas continentales.

La acusación de Morales contra Perú no fue idea suya. Dos semanas antes, la Cancillería chilena había dicho que la demanda peruana en La Haya iba a perjudicar una eventual solución del problema marítimo boliviano. El 23 de marzo, el presidente boliviano repitió esas palabras, aunque se dio tiempo para añadir un nuevo cargo contra los empresarios cruceños: ellos también perjudican la causa marítima.

Alusión a Chávez: Fue cuando el presidente del Perú, Alán García, respondió diciendo que en su criterio, Bolivia ha renunciado a su demanda marítima: "A mí me parece que hace rato Bolivia renunció a la salida al mar. Tengo esa impresión porque no se ha vuelto a tratar eso firme y claramente con Chile. Parece que perdieron la esperanza o que alguien influyó para que no tenga esas conversaciones con Chile".

El presidente Morales respondió diciendo que García está gordo. No aludió al fondo del tema ni al detalle de que “alguien influyó” en la política, una alusión muy clara a Hugo Chávez.

Fidel no debe meterse: La lealtad del gobierno boliviano con la nueva alianza se mostró en febrero con una prueba de fuego, cuando debió mandar a callar al propio Fidel Castro, que había escrito a favor de la causa marítima boliviana y contra la oligarquía chilena. El gobierno boliviano no defendió a la oligarquía chilena pero aclaró al “hermano mayor de la revolución" que el tema marítimo es estrictamente bilateral.

El argumento chileno sustenta que si La Haya diera la razón a Perú, la franja de territorio que Chile cedería a Bolivia estaría junto al mar pero no tendría derecho a usarlo, porque su soberanía sería peruana.

Apuesta por Chile: Lo que ha hecho el gobierno boliviano es tomar partido en esta disputa entre Chile y Perú. Ex cancilleres bolivianos, como Agustín Saavedra, han recomendado mirar con pragmatismo y hacer todo lo posible porque Bolivia salga beneficiada con este diferendo, al ofrecerse como una tercera vía de solución al diferendo chileno-peruano.

Por el momento, el presidente Morales está muy entusiasmado con su apoyo a Chile.

Temores de fraude

El presidente Morales cometió la semana pasada un error de coordinación, cuando dio la razón a quienes acusan a su gobierno de estar preparando un fraude para las elecciones del 6 de diciembre próximo: dijo que su meta para esas elecciones es alcanzar el 70% de los votos, justo el mismo día en que una denuncia pública había dicho que el fraude iba a garantizar al MAS el 64,3% de los votos.

La denuncia es resultado de un estudio hecho por la experta Ximena Costas y dice que con el sistema electoral que propone el gobierno el voto urbano, donde se concentra la población mestiza, sólo tendrá 35,7% de los puestos en la cámara baja del parlamento a pesar de representar 65,5% de la población. Mientras tanto, los habitantes de zonas rurales tendrán 64,3% de participación en esa cámara legislativa a pesar de representar solamente 34,5% de la población nacional.

No hacen falta los votos: Se trata de una decisión política que margina el voto urbano o lo devalúa por lo menos al quitarle una representación proporcional, con lo que se rompe aquello de que cada voto es igual y vale tanto como otro. Este sería, dice la oposición, un fraude masivo, que termina tergiversando los resultados globales. Con esta fórmula casi no hace falta que nadie vote, pues de las regiones donde es imposible el control electoral llegarán los resultados. Cuando el presidente Morales habla de porcentajes, está adelantando el escrutinio que piensa autorizar, dicen los opositores.

Y estarían otras formas de fraude, como las que denunció el periodismo la semana pasada, cuando reveló que en los tres años del gobierno del MAS se han distribuido más de seis millones de cédulas de identidad. También se ha multiplicado las denuncias sobre la participación de 100% de los votantes en muchas mesas del altiplano, donde no hay control de la oposición ni de los observadores internacionales, pero los resultados son todos favorables al gobierno. Todas estas denuncias se respaldan en los datos proporcionados por el experto Luís Pedraza (Siglo 21, N. 1057).

Por lo tanto, el discurso en que el presidente Morales dijo que se propone alcanzar en diciembre hasta 70% de los votos del país, y controlar el senado, podría acrecentar los temores de quienes denuncian el fraude.

Para frenar al gobierno: La oposición ya ha entendido cómo tiene que actuar incluso ante esta situación: acudiendo a la opinión pública internacional. En las últimas semanas, el prefecto de Tarija dejó de ser acosado sólo gracias a que él mismo y sus colegas prefectos opositores viajaron al exterior para denunciar ente cualquier foro disponible las irregularidades que se están dando en Bolivia. El propio Contralor General de la República ha decidido llevar su reclamo ante organismos internacionales, en vista de que el gobierno ha decidido violar todas las leyes y su propia Constitución. Lo mismo se propone hacer el presidente de la Corte Suprema de Justicia.

El gobierno ha frenado sus impulsos, pero no se sabe por cuánto tiempo.

Cambios ante la crisis

Organizaciones empresariales del país han comenzado a emitir recomendaciones sobre el manejo de la economía, como si abrigaran alguna esperanza de que el gobierno cambie su actitud y decida ahora comenzar a aplicar medidas que busquen la recuperación de la economía.

La Cámara de Comercio, Industria, Servicios y Turismo de Santa Cruz (Cainco) pidió al gobierno que reduzca los gastos, medite mejor en las inversiones en empresas públicas y haga lo necesario para impulsar las actividades económicas.

Hasta ahora ese tipo de consejos sólo surgían de cenáculos y foros vinculados con fundaciones o partidos políticos, pero esta es la primera vez que una organización empresarial habla directamente de la crisis y sugiere actitudes precisas para encararla.

Se acaban las trabas: La aparente ingenuidad del documento y de las recomendaciones ha tenido una increíble respuesta, muy pocas horas después. La nueva viceministra de Comercio Interno y de Exportaciones, Homayra Condarco, dijo en Santa Cruz que el gobierno de Morales está decidido a eliminar, o cambiar por lo menos, la disposición por la cual están prohibidas o sometidas a cupos las exportaciones de soya y sus derivados. Lo que dijo la señora Condarco es increíble, porque equivale a admitir que la prohibición fue un error:

“Estamos haciendo una evaluación de ese procedimiento que existía (el DS 29524, vigente desde el 18 de abril del año pasado). Sabemos que no ha habido una buena exportación de soya. En esta semana estamos elaborando un informe para poder dar un procedimiento más ágil, acortando los plazos y también los trámites, porque ahora lo que necesitamos es exportar. No necesitamos poner trabas en el camino”.

Hasta ahora se había entendido que la prohibición era una medida política, dictada por el gobierno para perjudicar al sector oleaginoso cruceño, y mantenida con firmeza por la ex ministra Susana Rivero. Y ahora viene una viceministra que se propone impulsar las exportaciones y da a entender que la prohibición fue un error.

Es un cambio o un error: Por el momento estaba ocurriendo que las exportaciones de gas estaban frenadas por la falta de mercados, las mineras por los precios bajos, las industriales por errores de la política exterior y las agrícolas por la prohibición de exportar. El absurdo de la prohibición está punto de ser corregido, a juzgar por lo que dijo la viceministro Condarco. La duda ahora es saber si este es un cambio de actitud o si la señora Condarco no estaba autorizada para decir lo que dijo, de lo que resultaría que fuera desautorizada en las próximas horas.

Reconocen la crisis: Algo está cambiando en el gobierno. El ministro de Economía, Luís Arce, admitió la semana, por primera vez, que Bolivia no se librará de la crisis internacional, aunque dijo que esos efectos llegarían en el segundo semestre. No está enterado de los desastres que ha causado ya la crisis en la minería y ha decidido negar que el TGN haya tenido problemas para pagar la Renta Dignidad. Pero está cambiando también él.

Metas e hipocresías del G20

El jueves de la próxima semana se reúnen en Londres los líderes del G20 (Arabia Saudita, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Corea del Sur, Francia, Alemania, India, Indonesia, Italia, Japón, México, Rusia, Sud África, Turquía, el Reino Unido y EEUU, más la UE), con el ambicioso propósito de dar el primer paso hacia la recuperación de la economía mundial.

Los países miembros representan el 90% del PIB mundial, el 80% del comercio internacional y dos tercios de la población mundial, por lo que hay muchas esperanzas sobre los resultados de la reunión del 2 de abril.

Regulación: Una de las principales prioridades para la reunión es la elaboración de un nuevo sistema de regulación de las finanzas internacionales cuya ausencia o incompetencia es ampliamente aceptada como una de las principales causantes de la crisis. En este tema las opiniones están divididas ya que hay quienes presionan por mayor regulación y también los que advierten que no se debe cortar las alas a las finanzas internacionales con regulación tan estricta que podría perjudicar la recuperación.

Crédito: Otro de los consensos aparentes es el de lograr mayor dinero para financiar la recuperación. No parece casualidad que el FMI, que junto al BM tienen representación en el G20, proponga un aumento en sus fondos para prestar a países en desarrollo que no pueden acceder a los mercados de capital bajo las condiciones actuales. La UE, que espera que estos fondos ayuden a salir de la crisis a los países en desarrollo dentro de su agrupación, ha propuesto duplicar los US$ 250.000 millones con los que cuenta el FMI para otorgar créditos salvavidas mientras que EEUU ha sugerido llegar a los 12 ceros en el esfuerzo.

Rescates: La política de rescates a las instituciones financieras y la inyección de dinero iniciados por el Reino Unido y EEUU, han sido ampliamente criticadas, aunque aceptadas por casi todo el G20 como una necesidad. Políticamente este punto podría ser el más doloroso, ya que premiar con enormes cantidades de dinero a las instituciones que llevaron a la destrucción de la riqueza y de las fuentes de empleo de los pobladores no es una política que goce de mucho apoyo en la población de a pie.

Proteccionismo: Evitar el proteccionismo parece un doble discurso cuando los gobiernos de los países más desarrollados entregan dinero al sector privado (en muchos casos responsables por el desastre), a dos manos y en muchos casos, sin lograr siquiera algo de control en actividades futuras a través de nacionalizaciones o participación accionaría.

El proteccionismo que el G20 tendrá en la mira en su reunión del jueves es el comercial aunque ya hay confirmación de que al menos 17 de los 19 países miembros ya han implementado algún tipo de proteccionismo desde el inicio de la crisis, aunque con el cuidado de no contravenir lo estipulado por la OMC. Y es que el consumo y por lo tanto el comercio, del que el mismo BM teme una contracción de 9% para este año es considerado como la única salida real ala crisis económica desatada por la crisis financiera.