La convocatoria se hizo a través de la Federación Nacional de Trabajadores de Seguridad Social (Fensegural). Por ahí pasa el tramo 2 de la carretera de la ABC y divide en dos esta zona de recarga de los acuíferos
La Casualidad. Con ese nombre se ofreció una urbanización de 17.520 terrenos a los aproximadamente 10 mil servidores públicos de la Caja Nacional de Salud (CNS) de todo el país.
Fuente: El Deber
Santa Cruz.- La propuesta está siendo socializada desde la Federación Nacional de Trabajadores de Seguridad Social (Fensegural), a través de las regionales departamentales del Sindicato Único de Trabajadores de Seguridad Social de la Caja Nacional de Salud (Casegural).
“A todos nuestros afiliados y trabajadores de la CNS se los convoca al taller informativo de terrenos ubicados por la zona del Urubó, (y sobre) el convenio que se está realizando con los propietarios de los terrenos y Fensegural”, decía la convocatoria de Casegural, para el 23 de agosto, en el auditorio del Hospital 400 camas.
Asimismo, aclaraba que el plazo para anotarse en la lista vencía el 30 de agosto, y que el monto a pagar era de 900 dólares para terrenos de 250 m2, y de mil dólares para los de 300 m2.
Adjunto a los mensajes se enviaron detalles de las tres fases del proyecto de urbanización, y los documentos de propiedad, a nombre de la familia Santos Soruco, que sigue figurando como dueña de un predio privado de 792 hectáreas, también llamado La Casualidad.
A la venta en 2021
En redes sociales quedan los registros de la puesta a la venta de esta mediana propiedad, ubicada entre las comunidades San Miguel y San Pedro, del municipio de Porongo, a un precio de 3,5 millones de dólares.
Las primeras publicaciones encontradas datan de junio de 2021, y se acaban en agosto de 2022. En Ultracasas hasta hace un par de días, el predio aparecía como no disponible.
Sin embargo, según Henry Santos, encargado de la propiedad, no fue vendida. “Está a la venta, pero no ha podido venderse”, aseguró a EL DEBER.
Lo que no refleja ninguno de los anuncios, ni el de Fensegural ni el de la oferta del predio, es que La Casualidad se encuentra ubicada dentro de la Unidad de Conservación del Patrimonio Natural (UCPN) Güendá Urubó, una categoría de área protegida departamental que impide el desarrollo de ciertas actividades posteriores a la creación del área, consolidada por la Gobernación cruceña el 10 de marzo de 2021, a través de la Ley 208, debido a que en el lugar se encuentran las recargas acuíferas de la región metropolitana.
Como un fantasma
Al ser la Alcaldía de Porongo la primera instancia donde se solicita la aprobación de las urbanizaciones, EL DEBER hizo la consulta ante el equipo técnico del Concejo y del Ejecutivo de ese municipio.
El arquitecto Marco Rodríguez, del Legislativo, y Óscar Villalta, de Planificación Territorial, confirmaron que en su base de datos no figura una urbanización con ese nombre entre las constituidas previamente a la creación de Güendá Urubó, con excepción de Tierra Santa, del Grupo Sion.
La misma información fue confirmada por Jorge Alonzo Guirapoigua, secretario de Planificación Territorial, que además informó que en la tarde de ayer se hizo una inspección, de la que se darían detalles más adelante.
Desde la Gobernación cruceña, el secretario de Medio Ambiente, Pablo Sauto, también revisó las licencias ambientales, y aseguró que estas se otorgaron hasta 2018 dentro de la UCPN, que no existe una sola licencia o solicitud a nombre de La Casualidad como urbanización.
Polémico tramo 2
Según la información proporcionada por la Agencia Boliviana de Carreteras (ABC) a la Gobernación durante el conflicto por los tramos 2 y 3, el tramo 2, el más polémico, ya que parte por la mitad la UCPN, pasaría por el ingreso a la fase 1 del proyecto de urbanización La Casualidad.
En su calidad de ciudadano y exconcejal municipal de Santa Cruz de la Sierra, y como miembro activo de un equipo dedicado al análisis de temas de interés social, Leonardo Roca dijo sentir profunda preocupación por la situación.
Recordó que el tramo 2 de la carretera Porongo-Buena Vista ha estado bajo serios conflictos, que está claro que este tramo pone en peligro los acuíferos vitales que suministran agua a toda la población de la región metropolitana
cruceña.
Asimismo, denunció la urbanización ofertada al personal de salud de la CNS. “Revela un oscuro proyecto urbanístico en el centro del conflicto, dentro de la UCPN Güendá Urubó, protegida por la Ley Departamental 208/2021”,
aludió.
Según Roca, este proyecto propone el asentamiento masivo en 17.520 lotes, sobre una superficie de 792 hectáreas, en tres fases.
Dijo que preocupa especialmente el método de comercialización, bajo la simulación de donación de terrenos, cuando en realidad se exige a cada uno de los beneficiarios “de la donación”, la suma de mil dólares al inicio para
trámites administrativos, “y serían otros mil a la entrega del derecho propietario, por lo que se estima el negocio final de alrededor de
35 millones de dólares”, apuntó.
Para el exconcejal, existe evidencia de planos elaborados de las tres fases del proyecto urbanístico, con los cuales se está realizando
la comercialización simulada bajo la figura de donación.
“Se han revelado conexiones con la Fensegural de la Caja Nacional de Salud, que ya habría negociado, bajo esta llamativa figura, alrededor de dos mil terrenos solo en La Paz, siendo que su plan de comercialización es de alcance
nacional para todos los trabajadores de este sistema público”, atacó.
Para Rony Feeney, excandidato a alcalde por Porongo y miembro del mismo grupo de análisis de temas de interés social que Roca, al mandar plano y alodial a través de Casegural, se trató de dar una imagen de legalidad.
Según Feeney, no se trata de estafa (a los trabajadores), sino de un plan de colonización, dijo que se está haciendo algo parecido al Plan 3.000 allá, ya que aunque el proyecto no está aprobado, se empieza a captar clientes.
“La lógica es la misma de Novillo, ‘si en el área rural de Porongo, él hizo aprobar miles de hectáreas, por qué nosotros no’”, describió.
Para Feeney, lo que están haciendo es consolidar un asentamiento, y luego van a poner sus divisiones.
“Una vez estén ahí, van a obligar al municipio a consolidar eso en cinco años. Así se hacen las urbanizaciones fuera de norma, ahí entra el proceso de colonización. Antes he visto esto en el municipio de Santa Cruz, en el Plan 3.000 y en Los Lotes”, ejemplificó.