Fuente: https://actualidad.rt.com
Un adolescente se convirtió este jueves en la primera persona en ser acusada de disturbios tras la ola de violentas protestas que surgió en el Reino Unido en las últimas semanas, informó la Fiscalía del país.
«El Servicio de Fiscalía de la Corona ha presentado hoy un cargo de disturbios en relación con un chico de 15 años, a raíz de los desmanes que tuvieron lugar en [la ciudad de] Sunderland el 2 de agosto», reza el comunicado del organismo.
Las autoridades indicaron que «este es el primer cargo de este tipo que autoriza el Servicio de Fiscalía de la Corona a raíz de los recientes disturbios». Según la legislación británica, el adolescente puede enfrentar hasta 10 años de prisión.
A continuación, la Fiscalía informó que el joven comparecerá esta jornada en el Tribunal de Menores de la ciudad de South Tyneside. «Este imputado es una de las personas que esperamos que sean acusadas de disturbios», añadió.
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«Los responsables deben rendir cuentas»
«Espero que esto envíe un mensaje muy contundente de que, sin importar la edad que tenga, si participó en los recientes y atroces acontecimientos en Sunderland, enfrentará cargos realmente graves«, comentó por su parte Alastair Simpson, subdirector de Policía de la región de Northumbria.
El funcionario agregó que a medida que se sigan acumulando pruebas, «si se hace evidente que un individuo puede haber estado involucrado en más delitos, será llevado nuevamente ante los tribunales y acusado del delito más grave posible«.
«Nuestras comunidades y mis oficiales, personal y voluntarios, sufrieron terriblemente esa noche y los responsables deben rendir cuentas plenamente», advirtió.
- Violentas protestas estallaron en pueblos y ciudades de todo el país después de que a finales de julio tres niñas fueran asesinadas en un ataque con arma blanca en el noroeste de Inglaterra.
- Informes no confirmados aseguraban que el atacante era un inmigrante y un islamista radical, sin embargo, la Policía aclaró que el sospechoso nació en el Reino Unido y no está tratando el hecho como un incidente terrorista.