Con el objetivo de diversificar la matriz energética, el Gobierno promueve el uso de vehículos eléctricos en el marco de la transición hacia energías limpias.
Fuente: https://www.mhe.gob.bo
El país cuenta con más de 10 electrolineras en las ciudades de La Paz, Oruro, Cochabamba y Santa Cruz que atienden el creciente consumo del parque automotor.
Las electrolineras son estaciones de carga para vehículos eléctricos. Funcionan de manera similar a una estación de servicio tradicional, pero en lugar de suministrar combustibles como gasolina o diésel, proporcionan energía eléctrica para recargar las baterías de automóviles eléctricos.
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Estas estaciones de carga para vehículos eléctricos son resultado de un conjunto de políticas e incentivos impulsados para fomentar la adquisición y uso de automóviles sostenibles. Con el objetivo de diversificar la matriz energética, en abril de este año, el Gobierno promulgó el Decreto Supremo 5142, que establece medidas para promover el uso de vehículos eléctricos en el marco de la transición hacia energías limpias.
El Ministerio de Hidrocarburos y Energías impulsa la electromovilidad con normativas fundamentales, como el Decreto Supremo 4539, de julio de 2021, que otorga incentivos tributarios y financieros para la fabricación, ensamblaje, e importación de vehículos eléctricos, híbridos, y maquinaria agrícola ecológica.
Adicionalmente, el Decreto Supremo 4477 promueve la generación distribuida de energía, facilitando a los propietarios de automóviles eléctricos la instalación de cargadores en sus domicilios y la posibilidad de generar su propia electricidad. En apoyo a estas medidas, el sistema financiero ha lanzado «créditos verdes» con condiciones favorables para la adquisición de vehículos ecológicos.
La Empresa Nacional de Electricidad (ENDE) instaló 11 electrolineras en el eje troncal del país, las cuales ofrecieron servicios de recarga gratuita hasta 2023. Paralelamente, la Autoridad de Electricidad y Tecnología Nuclear (AETN) implementó regulaciones que establecen los estándares técnicos y de seguridad para estas estaciones, además de definir tarifas y precios máximos de comercialización.
El avance de la movilidad eléctrica en Bolivia refleja una tendencia global hacia la adopción de tecnologías más sostenibles. La infraestructura de las electrolineras no solo moderniza el transporte, sino que también contribuye a reducir la dependencia de combustibles fósiles, marcando un paso importante hacia un futuro más limpio y eficiente.