Luego de haber presentado el plan de contingencias a los municipios de La Paz y Achocalla dentro del plazo establecido, la Inmobiliaria Kantutani espera la luz verde de ambas alcaldías para comenzar de inmediato las tareas de mitigación de riesgos.

A través de un comunicado, la empresa afirmó que habilitó un centro de operaciones con maquinaria y personal especializado.

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“Kantutani manifiesta que la ejecución del plan requiere el acceso inmediato al área afectada y autorizaciones necesarias. Para proceder con las acciones de manera inmediata”, dice la nota.

La empresa reiteró que se solicitó una auditoría técnica independiente. Para que se determine de manera objetiva las responsabilidades públicas y/o privadas en el caso de la mazamorra ocurrida en Bajo Llojeta el pasado 23 de noviembre.

“La inmobiliaria confía en que las autoridades locales tramiten la autorización a la brevedad posible. Para iniciar las labores de estabilización necesarias, dadas las intensas lluvias”, concluye la nota.

El martes, el alcalde de La Paz, Iván Arias, dio un plazo de 24 horas a la empresa para que entregue su plan de contingencia en la construcción que realiza con el fin de reducir el riesgo de desastres.

“Que presente un plan de contingencia en 24 horas porque es una zona activa. Dios nos está ayudando, no está lloviendo. En caso de que caiga una lluvia, hay peligro. Si no nos presenta (el plan) al alcalde de Achocalla (Manuel Condori) y al alcalde de La Paz, vamos a intervenir la zona”, exhortó el alcalde paceño en conferencia de prensa.

 

RIESGOS

Según ambos gobiernos municipales (de La Paz y de Achocalla), advirtieron a la empresa de los riesgos que se corrían al hacer movimientos de tierra no autorizados.

Aseguró que el personal de administración de la empresa mintió con relación a las causas de la mazamorra.

“La empresa ha mentido. La empresa no ha hecho caso a las advertencias técnicas de la Alcaldía de Achocalla. Ni a las advertencias técnicas de la Alcaldía de La Paz. Ahí tenemos los problemas”, puntualizó Arias.

Afirmó que ambas alcaldías cruzaron información y que se tiene la constancia de que la empresa no pidió autorización para ejecutar trabajos en el sector.

Por su parte, la administración de Kantutani solicitó la realización de una auditoría técnica e independiente. Con el fin de determinar las responsabilidades que correspondan, públicas y privadas, en el caso de la mazamorra del sábado en la zona de Bajo Llojeta y que provocó la muerte de una menor, heridos y daños en viviendas.