El nuevo presidente estadounidense cumplió su promesa de pasar página a la era de Joe Biden y en su primer día en el cargo desmanteló su legado con una avalancha de órdenes ejecutivas sobre inmigración, economía y reforma del Gobierno federal.
[Foto ABI.] / La viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón.
Fuente: Unitel
Tras la investidura de Donald Trump, la viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, indicó que el Gobierno de Bolivia tiene la premisa de mantener relaciones bilaterales con todos los países, pero con “respeto mutuo y sobre todo la no injerencia”.
El nuevo presidente estadounidense cumplió este lunes su promesa de pasar página a la era de Joe Biden y en su primer día en el cargo desmanteló el legado del demócrata con una avalancha de órdenes ejecutivas sobre inmigración, economía y reforma del Gobierno federal, reportó EFE.
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Alcón se refirió al nuevo Gobierno de Estados Unidos y dijo: “Bolivia quiere tener y mantener relaciones bilaterales con todos los países, pero respetando los principios de no injerencia, el principio del respeto mutuo, al que nosotros agregaríamos la solidaridad y la cooperación”.
Trump juró este lunes a su segundo mandato como presidente de Estados Unidos.
El republicano, que ya gobernó su país entre 2017 y 2021, comenzó su gestión con una avalancha de anuncios, entre ellos la declaratoria de emergencia nacional en la frontera con México que apunta a frenar la llegada de migrantes.
Asimismo, anunció que “recuperará” el Canal de Panamá y sumará a los carteles del narcotráfico en la lista de organizaciones terroristas, además de otras medidas.
Consultada sobre el impacto de estas medidas, Alcón insistió en la rueda de prensa que Bolivia tiene la premisa de establecer vínculos con las demás naciones con base en el respeto mutuo y sin injerencia.
“Como Estado vamos a respetar nuestra posición. Nosotros tenemos algo muy claro, las relaciones bilaterales tienen que darse en el marco de esos dos principios: respeto mutuo y sobre todo la no injerencia”, afirmó.
Bolivia y Estados Unidos mantienen relaciones bilaterales a nivel de encargados de negocios desde 2008, cuando el Gobierno de Evo Morales expulsó al entonces embajador Philip Goldberg por supuestamente ejecutar acciones de injerencia.