El sector se ha declarado en emergencia ya que aseguran que los mataderos y ganaderos les envían el producto con un elevado costo y con mala calidad.
Frialeros de Cobija, Pando, inician un paro indefinido en protesta por el aumento del precio de la carne de res que les llega de parte de los mataderos y ganaderos de la región, el cual afirman es muy elevado.
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De acuerdo al sector, el precio del kilo gancho actualmente se encuentra en 30 bolivianos pero llegará a los 33, lo que ellos consideran es un costo injustificado considerando que la carne que les traen no es de buena calidad.
“Hemos tomado la determinación en esta reunión de sacar un voto resolutivo en rechazo a la situación, nos sentimos en emergencia. Queremos llamar a la población y a los sectores sociales su apoyo total en esta situación que se está viviendo en estos momentos”, indicó uno de sus representantes.
Los frialeros aseguran que desde este miércoles no venderán carne de res a la población hasta que sus demandas sean atendidas.
Entre los puntos que emitieron se encuentran: el rechazo al incremento del kilo gancho de 33 bolivianos y la pésima calidad de la carne que se entrega a los friales, además de exigir la presencia de las autoridades nacionales como el viceministro de Defensa al Consumidor, Jorge Silva, y el director nacional de Senasag.
Asimismo, declararon persona no grata al director departamental del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag), Celso Lora, por no prevalecer el bienestar de la población cobijeña.
El sector aseguró que su medida es indefinida y que no volverán a los mercados hasta que las autoridades regularicen la situación.