El expresidente Evo Morales pidió este domingo a su militancia esperar y no inscribirse al partido político Frente Para la Victoria (FPV), sigla con la que pretende llegar a la silla presidencial.

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El exmandatario señaló que no tienen una alianza con el partido de FPV y solamente es un acuerdo para participar del proceso electoral del 17 de agosto.

“Falta informar que con Frente Para la Victoria no es alianza, es un acuerdo, significa que es una sigla prestada. Algunos compañeros dicen que ahora hay que inscribirse al Frente Para la Victoria, no, vamos a esperar el 29, 30 y 31 de marzo para poder definir cuál va a ser la nueva sigla del instrumento político”, señaló este domingo en su programa de radio Kawsachun Coca.

Además, indicó que el miércoles se reunirá con dirigentes de sectores sociales para definir proyectos en torno a las elecciones presidenciales.

“Vamos a demostrar y profundizar la visión país que tiene el instrumento político. El día miércoles de esta semana tengo una reunión, estoy hablando telefónicamente con algunos compañeros y vamos a planificar y vamos a sorprender al país con proyectos. Por ejemplo, el tema litio, al 2030 (se implementará) 41 plantas y otro que hay que recuperar, es que Bolivia (sea) el centro energético de Sudamérica”, dijo el exmandatario.

El 20 de febrero, el líder cocalero y FPV firmaron un acuerdo, con el fin de que Morales participe de los comicios presidenciales, luego que perdiera la dirigencia del Movimiento Al Socialismo (MAS) en noviembre de 2024.

Tras la firma del acuerdo, desde el 25 de febrero, decenas de simpatizantes de Morales renunciaron al partido del MAS para inscribirse al FPV y así acompañar al expresidente en la carrera electoral.

Incluso, el exmandatario renunció a la militancia del MAS a través de un poder notariado, debido a que sobre él pesa una orden de aprehensión por el delito de trata de personas con agravante.

El líder cocalero se encuentra atrincherado en la región del Lauca Ñ, Trópico de Cochabamba, desde octubre del año pasado y es resguardado por sus simpatizantes ante una posible intervención policial