El gobierno de Arce buscó recibir un aval ante la sociedad en un momento de fuertes interpelaciones a las decisiones del presidente por su presunta incapacidad para enfrentar la crisis económica, explica
Video: Mauricio Fuentelsaz
Fuente: eju.tv
“El diálogo nacional convocado por el gobierno del Presidente Luis Arce y realizado este martes 18 de marzo, así como otros anteriores, sólo sirvieron de propaganda política: que el gobierno es democrático, que se da la mano con los opositores, pero los resultados no tienen nada de provecho para el país, viendo los doce puntos (de la declaración del diálogo nacional), no veo nada que nos saque de la crisis económica”, afirmó el analista político Mauricio Fuentelsaz al evaluar la mencionada reunión política del Ejecutivo con algunas autoridades de poderes del Estado, alcaldes y jefes políticos que participaron de la misma.
El analista recordó que las convocatorias del gobierno siempre terminan en un diálogo de sordos, porque el Ejecutivo se muestra muy orgulloso sobre lo que hace y se niega a cambiar su modelo económico.
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“Las soluciones a la crisis económia ya las anticiparon Jorge Quiroga, Jaime Dunn, Samuel Doria Medina, Carlos Mesa y muchos analistas económicos, financieros y políticos, pero el gobierno nunca hizo caso a lo que se le recomendó”, dijo.
Pese a la cantidad de información y sugerencias que se le da al gobierno, éste se mantiene tozudo y caprichoso en mantener su modelo económico que sólo funciona cuando hay dinero que lo respalde, “ahora vemos que no es bueno, que no puede resolver la crisis, ni siquiera salir del paso”, añadió Fuentelsaz.
Sobre los doce puntos de la declaración del diálogo nacional, el analista considera que acordar que el gobierno “garantice” los comicios generales de este año, no es un tema que debió abordarse en esa reunión, porque está implícito que esa labor es una obligación y responsabilidad del Ejecutivo.
Sobre el pedido para que la Asamblea Legislativa apruebe créditos para enfrentar la crisis económica, Fuentelsaz, afirmó que esa es una cantaleta gubernamental que además pone en evidencia su incapacidad de concertación, “no puede convencer sobre el destino de los créditos”, dijo.
Otra evidencia de la falta de vocación democrática de diálogo y consenso, es la negociación sobre el incremento salarial, cuyos resultados se presentan cada 1 de Mayo, día del Trabajo, el analista anticipó que el Ejecutivo siempre ha decido esto sólo con la Central Obrera Boliviana (COB) sin tomar para nada en cuenta el pensamiento de los empresarios privados.