La situación calamitosa dada en el departamento del Beni, donde las lluvias azotan varias zonas./ APG
Hace apenas seis meses, Bolivia se encontraba sumida por los incendios forestales, cuya magnitud fue bastante peor que la de 2019. Entonces, el presidente Luis Arce declaraba desastre nacional, motivado por el propósito de captar ayuda internacional. Ahora, el escenario vuelve a ser preocupante. Los nueve departamentos del país se encuentran afectados por las lluvias, situación que ha obligado al Jefe de Estado a activar la emergencia nacional.
La decisión se oficializó ayer. Arce, acompañado por algunos de sus ministros, entre ellos, la de la Presidencia, María Nela Prada, apareció en conferencia de prensa para comunicar su determinación dadas las condiciones adversas que generan inundaciones, evacuaciones, riadas y fallecidos.
“En vista de todo lo que está ocurriendo (…), estos desastres naturales nos están exigiendo la declaración de situación de emergencia nacional”, fue parte de lo dicho por el Dignatario, que dirigió su mensaje desde la Casa Grande del Pueblo.
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Las lluvias de la temporada, de las peores sucedidas en los últimos 40 años, han dejado 2.596 viviendas dañadas (818 de ellas deshechas) y 51 muertos, entre otras cifras lamentables.
Con la declaración, recordó Arce, será posible “agilizar la ayuda necesaria para los afectados, efectuar compras por excepción, gestionar recursos de financiamiento externo; y movilizar mayores recursos técnico-logísticos y económicos para beneficiar a las regiones que sufrieron las inclemencias del tiempo. Es el caso del Beni, que en las pasadas horas fue declarado en situación de desastre departamental debido a los azotes que experimentan municipios como San Borja, Rurrenabaque, Reyes, Baures, San Javier y Santa Rosa del Yacuma.
Santa Cruz también contabiliza zonas bajo el agua. Municipios como Pailón, Lagunillas o Cuatro Cañadas fueron declarados en desastre. Es por ello que la Gobernación declaró. este martes, emergencia en el departamento.
Por su parte, Oruro ya le dio el visto bueno a la normativa que declararía el departamento en estado de desastre, mientras que La Paz y Chuquisaca ya han agilizado esas medidas.
Hasta ahora, 92 municipios del país fueron catalogados en situación de desastre, 44 de ellos se encuentran en La Paz y 12 en Cochabamba.
Lo que sigue es una reunión urgente para atender las necesidades prioritarias. Arce convocó a los nueve gobernadores a un encuentro pactado para el 31 de este mes. Ese día se desarrollará la sesión extraordinaria del Consejo Nacional de Autonomías (CNA). En la cita, las autoridades departamentales expondrán sus necesidades. Por lo pronto, se prevé la elaboración de un plan postinundaciones.
Hasta la fecha «se han movilizado más de 4.000 efectivos, se ha desplazado ayuda humanitaria, 204 toneladas de ayuda humanitaria, además de brigadas móviles y se han activado todos los programas de salud», detalló Arce.
Para el Presidente, los problemas no son atribuibles “a nadie”, solo a la naturaleza. “El Gobierno está respondiendo como corresponde”, dijo.