De militarizar el Trópico cochabambino a implementar medidas económicas que hagan poco deseable el cultivo de coca, algunos candidatos comparten sus planes.
Por Jorge Manuel Soruco Ruiz
Fuente: Visión 360
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Evo Morales prometió que quien gane las elecciones generales del 17 de agosto encontrará en el Trópico de Cochabamba una “piedra en el zapato”. En respuesta, los candidatos habilitados anunciaron que, de resultar electos, buscarán el diálogo o llevarán al expresidente a juicio.
De hecho, aunque no se lo menciona explícitamente en los programas de gobierno, la mayoría de los candidatos a la silla presidencial se refirieron a Morales y a sus seguidores en diversas ocasiones, desde el inicio del Calendario Electoral, el pasado 3 de abril.
Pero las respuestas fueron tornándose más firmes conforme las amenazas del ex líder masista, y de sus seguidores, fueron subiendo de tono, principalmente contra los magistrados del Tribunal Supremo Electoral (TSE) y el proceso electoral, debido a la inhabilitación de Morales.
Hace más de una semana, Morales, acompañado de los dirigentes de las seis federaciones del Trópico de Cochabamba, envió una advertencia a los candidatos presidenciales y afirmó que si los “derechistas”, es decir todo candidato que no sea él, triunfa, se enfrentará a su movimiento. “A ver si esa derecha, si gana, aguanta al pueblo”, amenazó.
Eso disparó varias respuestas de los otros contendientes electorales. Uno de ellos fue Jorge Tuto Quiroga, quien en varias ocasiones desafió al ex líder masista a dejar su refugio en en el Trópico de Cochabamba y enfrentarse a él en debates en directo.
“El cobarde sabe que su proyecto terminó y amenaza. Evo, conmigo rendirás cuentas ante la justicia. Tu futuro es una hamaca caliente en Cuba, si escapas antes que cambiemos Gobierno, o una celda fría en La Haya o Chonchocoro”, posteó en su cuenta de X el expresidente y ahora candidato.
De esta manera, Quiroga reafirmó sus intenciones de hacer que Morales se enfrente al sistema judicial boliviano. Sobre el expresidente y líder cocalero pesa una orden de aprehensión por el delito de trata de personas. Evita la medida permaneciendo en su sede en el Trópico cochabambino, resguardado por sus seguidores.
“Cobarde. Está escondido en el Chapare y manda a otros a marchar mientras él no se atreve a salir”, agregó Quiroga, quien cuestionó los anuncios de nuevas movilizaciones promovidas por los cocaleros del Chapare y responsabilizó al expresidente de buscar una “conmoción general”, para beneficiar su deseo desmedido de poder.
Pero Quiroga no es el único candidato que propone la detención y juicio contra el expresidente Morales y sus seguidores.
La región del Trópico de Cochabamba está compuesta por seis municipios: Chimoré, Entre Ríos, Puerto Villarroel, Shinahota, Colomi y Villa Tunari. Los dos últimos forman parte de la provincia Chapare.
Es una zona productora de frutas, con alto potencial turístico, pero su principal fuente de ingresos es la coca. Esto la convierte en una región complicada, debido al narcotráfico.
Según la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn), la mayoría de las tres mil fábricas de droga destruidas entre 2022 y 2024, estaban en el Trópico de Cochabamba, con una mayor cantidad distribuida entre las provincias Chapare, Ayopaya, Tiraque y Carrasco.
Asimismo, es un punto clave para la conexión nacional, del eje, ya que por ahí se viaja a Santa Cruz desde Cochabamba. Cada vez que el “evismo” cierra el paso, se interrumpe el comercio interno y, por tanto, se producen desabastecimiento y fuertes pérdidas económicas para el país.
Desde el “evismo”, sus principales líderes, como el diputado Héctor Arce, afirman que el Trópico de Cochabamba fue estigmatizado por la actual gestión gubernamental y por otros gobiernos anteriores al del ex presidente Morales.
Mano dura
El candidato a la Presidencia por Autonomía Para Bolivia – Súmate (APB-Súmate), Manfred Reyes Villa, fue más agresivo en su propuesta. Para el exmilitar, la solución no se limita solo a Evo Morales, sino también parte por retomar el control del Trópico de Cochabamba, al que describió como una “republiqueta” fuera de control.
“El Gobierno no puede dejar una sola región sin Estado, sin instituciones. En este caso hay Fuerzas Armadas allá sin Fuerzas Armadas”, afirmó el candidato en una entrevista con el programa No Mentirás. “Pondría orden haciendo cumplir la ley y la Constitución Política del Estado. Militarizaría el Chapare inmediatamente; aquí vamos a cumplir todos la ley, tener dos divisiones allá y que se cumpla la ley, que la mayoría, el pueblo, pueda trabajar”, añadió.
En ese sentido, Reyes Villa consideró que con las acciones decisivas se evitarán muertes de bolivianos, en referencia a las cinco personas que perdieron la vida en los bloqueos organizados por el “evismo” a principios de mes.
También reconoció que, si no se logra controlar esa región del país, el siguiente Gobierno, cualquiera que sea el ganador, no podrá aguantar por mucho tiempo. “Vamos a poner orden en el país, no puede ser que nos esté amenazando, porque ha dicho, el próximo Gobierno no va a durar ni tres meses, vamos a ver”, advirtió.
En respuesta a las más recientes amenazas de Morales, Reyes Villa, que también tiene sus bases en Cochabamba, concretamente en la ciudad capital, respondió que “Evo es un criminal”.
“Deja de amenazar a Bolivia con tu comportamiento subversivo y delincuencial. Eres un criminal, si yo fuera presidente estarías en la cárcel; a diferencia de otros que te ayudaron a escapar o fueron tus cómplices, yo sí estoy del lado de Bolivia, no te tengo miedo y estoy convencido de que nuestro pueblo quiere orden y transformación”, dijo.
Más ambigua es la posición del Partido Demócrata Cristiano (PDC). Según comunicaron fuentes de este frente político, aún no cuenta con un plan o propuesta oficial sobre este tema. Pero, en declaraciones a los medios de prensa, el aspirante a la silla presidencial, Rodrigo Paz, aseguró que si gana las elecciones presidenciales, en el Chapare se recuperará la soberanía gubernamental.
“El próximo Gobierno, que vamos a ser nosotros, aplicará las leyes de lucha contra el narcotráfico. Poco o nada tendrá que hacer este señor en el país. Es más, el Chapare se convertirá en un gran centro de turismo, si es que se aplican bien las normas contra el narcotráfico del país. Evo Morales termina en la cárcel y el Chapare va a recuperar un espacio para la soberanía nacional”, prometió.
Quien mantiene mutismo es Andrónico Rodríguez, antiguo aliado cercano a Morales y, durante mucho tiempo, considerado su delfín. Más allá de asegurar que “el Chapare no le pertenece a una persona o sector”, el Presidente del Senado no prometió nada a futuro y mantuvo una posición de apertura hacia su antiguo líder.
Sin embargo, esta actitud solo le ganó la animadversión de sus antiguos aliados, quienes lo acusan de “traidor” e instrumento de la “derecha”. Algunos dirigentes evistas, incluso, le prohibieron hacer campaña en el Trópico de Cochabamba.
También están quienes abogan por el diálogo o la utilización de otros mecanismos.
Miel para moscas
Uno de estos es Eduardo Del Castillo, candidato del Movimiento Al Socialismo (MAS). En entrevista con Visión 360, el político indicó que “no hay que tenerle miedo al diálogo” con los sectores.
“La mayoría de la gente de la región son personas que se dedican a la producción de coca, palmito, piña. Por tanto, hay que dialogar con los sectores.
Ese sector tan radical como dicen algunos, dialogaron en la época de (Jeanine) Añez, con (Arturo) Murillo, se sentaron en la mesa. No hay que tenerle miedo al diálogo sincero y abierto”, aseguró Del Castillo.
Por su parte, Samuel Doria Medina, líder de la alianza Unidad, también propone diálogo y una estrategia económica para tratar con el sector evista.
“Si uno habla con los productores de coca, (ellos) no quieren que sus hijos sean productores de coca, quieren que sus hijos vayan a la universidad, quieren que sus hijos sean profesionales y de hecho viven en la zona sur de Cochabamba. Entonces, creo que hay que tratar ese tema de manera integral”, manifestó el también empresario.
Mientras que Pavel Aracena, de Acción Democrática Nacionalista (ADN), planteó recurrir al referéndum para “que el puebla decida qué hacer con el Chapare”.
Desde Morena, la candidata presidencial y actual alcaldesa de la ciudad de El Alto, Eva Copa, no se refirió todavía a qué haría con el Trópico de Cochabamba en caso de ser electa. Pero, antes de lanzar su candidatura a la silla presidencial, en enero de este 2025, criticó a Morales y a sus seguidores por intentar convertir la región del Chapare en “una pequeña Sinaloa”.
“¿Qué quieren, volver (al Chapare) una pequeña Sinaloa? ¿Qué quieren, que los cárteles del narcotráfico sigan andando por ahí? ¡No, tampoco! Yo creo que el Gobierno tiene que poner presencia estatal en este lugar”, aseguró Copa.
Además, la Alcaldesa de El Alto exigió al Gobierno y a la Policía a retomar el control del Trópico cochabambino, ya que corre el riesgo de convertirse en “tierra de nadie”.
Seis federaciones del Trópico pasaron de ser defensores a las huestes de Evo Morales
La Coordinadora de las Seis Federaciones del Trópico llegó, este 2025, a sus 34 años de vida desprestigiada y vista ya no como punta de lanza para la defensa de los derechos, sino como la hueste al servicio de Evo Morales.
Como su nombre lo dice, la coordinadora está compuesta por seis federaciones, algunas más antiguas que otras. Están conformadas por sindicatos y centrales emplazados en diferentes municipios de tres provincias de Cochabamba: Carrasco, Chapare y Tiraque.
En la provincia Carrasco se concentran tres de las seis federaciones: la Federación Especial de Chimoré, la Federación Especial de Colonizadores de Carrasco Tropical y la Federación Agraria Mamoré Bulo Bulo.
Estas tres federaciones aglutinan a 583 sindicatos, de los 965 que nutren a la Coordinadora de las Seis Federaciones.
El peso de esta región, apoyado por la gran cantidad de afiliados, se ve traducido en un poder político de gran impacto. Dos legisladores -de los 21 que tiene el MAS en la Cámara de Senadores- son dirigentes de estas federaciones. Uno es presidente de dicha instancia desde que inició su gestión.
En esta terna se encuentra tanto la federación más antigua como la más nueva. La primera es la de Chimoré, fundada en 1964. Actualmente su máximo dirigente es Leonardo Loza, uno de los hombres de confianza de Evo Morales y ficha importante del ala “evista” del MAS – IPSP.
La segunda es la de Mamoré – Bulo Bulo, el ente sindical del que emergió Andrónico Rodríguez.
Otra de las provincias en las que hay más de una federación es Chapare. Ahí se encuentran la Federación Especial Yungas Chapare y la Federación de Trabajadores Campesinos del Trópico de Cochabamba, ambas en el municipio de Villa Tunari.
Entre las dos se concentran 32 centrales y 353 sindicatos.
Todas ellas obedecen ciegamente a Evo Morales. De hecho, las principales amenazas contra las elecciones salieron de las diferentes centrales sindicales.
AMENAZAS
GESTIÓN. Hace dos semanas, Morales aseguró que “a ver si esa derecha, si gana, aguanta al pueblo”.
ELECCIONES. “Por lógica, no puede haber una elección sin el candidato ganador, porque ningún otro (candidato) va a poder ganar a Evo Morales”, sentenció Reynaldo Ezequiel, dirigente del “evismo” en Santa Cruz.
POLICÍAS. “Sabemos los nombres de los policías que han desbloqueado (…), con todo esto cuidado que nos lleve a otra movilización, estoy siendo claro con el Gobierno”, dijo el “evista” Vicente Choque.
DERECHA. “Nos quiere derrotar para adueñarse de los recursos naturales. El movimiento indígena, el movimiento popular va a defender sus recursos naturales; en vano desde Estados Unidos están planificando”, dijo Morales.