La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) observó que varios vehículos realizan carga reiterada de combustible.
Por Daniel Zenteno
La ANH realiza controles en varias estaciones de servicio del país. Foto: ANH
Fuente: La Razón
En el departamento de Chuquisaca, la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) identificó más de 170 vehículos que realizaron el carguío irregular y repetido de combustible, tanto diésel como gasolina.
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“En este caso, tenemos identificado 177 vehículos de diferentes particularidades, pero en su mayoría son vehículos pequeños. Estarían considerando esta actividad como un modo de operar para hacer el almacenamiento de combustible”, indicó el responsable de la ANH en Chuquisaca, Danny Cazorla, en contacto con Bolivia Tv.
ANH
De acuerdo con el funcionario, se observó que algunos vehículos cargaban combustible hasta cuatro veces en el mismo día, por lo que se llegó a la conclusión que los volúmenes cargados no eran para consumo propio, sino para el acopio o la reventa.
En ese sentido, la ANH logró interceptar a 40 vehículos y se puso a los conductores a disposición del Ministerio Público.
“Mediante operativos con el personal en las estaciones de servicio hemos podido interceptar 40 vehículos aproximadamente. Han sido remitidos al Ministerio Público y éstos van a ser sancionados”, indicó Cazorla.
El director regional de la ANH recordó que, de acuerdo al artículo 226, el almacenaje de hidrocarburos está penado por ley, por lo que las autoridades pueden procesar a los autores de estos delitos.
El jueves, el director general de la ANH, German Jiménez, presentó un nuevo dispositivo que busca evitar la práctica del carguío repetitivo en todo el territorio nacional. Se trata de una pistola que revela todos los datos del vehículo respecto a la carga de carburantes.
De acuerdo con las autoridades, el carguío irregular es una de las causas de desabastecimiento en las estaciones de servicio, debido a que se asignan volúmenes de diésel y gasolina a los surtidores que resultan alterados cuando la población carga más de lo que realmente necesita.
Fuente: La Razón