Conmovidos por hallazgo, los efectivos policiales realizaron una colecta espontánea para adquirir pañales, talco y artículos esenciales. «Como policía boliviana estamos trayendo los pequeños regalitos para ese angelito», expresó Valderrama con emoción, tras verificar que el bebé recibía atención médica especializada y se encontraba en estado de salud estable.
En el letal y frío altiplano paceño, un grupo de comunarios de la comunidad Contorno Bajo en Viacha hizo un hallazgo desgarrador al encontrar una bolsa de mercado abandonada que contenía lo que parecía ser el cuerpo sin vida de un recién nacido. Alertados por los vecinos, policías acudieron al lugar preparados para lo peor y se toparon con un milagro inesperado.
«Hemos verificado que el niño no se encontraba fallecido, sino que se presentaba signos de vida. Inmediatamente ha sido auxiliado, ha sido cubierto por las mantas que contábamos en ese momento en el vehículo e inmediatamente conducido acá al hospital de Viacha», informó el comandante policial de Viacha, Ariel Valderrama y agregó que la rapidez de la reacción fue crucial para salvar al menor que presentaba signos de hipotermia tras horas expuesto a las frías temperaturas.
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El coronel enfatizó el peligro inminente que enfrentaba el bebé no solo con el frío sino con mandas de canes salvajes que merodean por la zona y no notaron la presencia del bebé. Valderrama reconoció que sin la oportuna alerta de los comunarios el desenlace hubiera sido trágico, pues el recién nacido habría sobrevivido al frío o a los animales callejeros.
Conmovidos por hallazgo, los efectivos policiales realizaron una colecta espontánea para adquirir pañales, talco y artículos esenciales. «Como policía boliviana estamos trayendo los pequeños regalitos para ese angelito», expresó Valderrama con emoción, tras verificar que el bebé recibía atención médica especializada y se encontraba en estado de salud estable.
El caso, que conmocionó a la población de Viacha, revela una cruda realidad social donde la desesperación por atravesar diferentes situaciones sociales lleva al abandono de inocentes. Mientras la Defensoría de la Niñez de este municipio inició los procedimientos de protección del menor, este episodio queda como testimonio de crueldad, pero también de solidaridad que nace en los momentos más oscuros.