La analogía con «México Chico», una zona del Norte de Potosí donde, según el diputado, la intervención militar permitió descubrir y erradicar extensos sembradíos de marihuana, es el eje central de su argumento. Para Torrez, el Chapare atraviesa una dinámica similar de violencia y desafío a la autoridad estatal, por lo que la solución debe ser con el despliegue conjunto de militares y agentes de inteligencia.
El diputado del PDC, Juan José Torrez, ha hecho un llamado urgente al Gobierno para que ordene el ingreso de las Fuerzas Armadas al Chapare bajo el argumento que la Policía, «rebasada» y carente del armamento suficiente, ha perdido el control de un territorio que compara con la conflictiva zona del Norte de Potosí.
«Yo creo que es importante, ustedes saben bien, cuando ya la Policía estaba rebasada, ya no puede controlar, necesita la ayuda de los militares. Eso pasó también en el Norte de Potosí, la Policía no podía tener el control, han sido rebasados porque ellos utilizaban armamento, utilizaban dinamitas, utilizaban otros artefactos más modernos que la Policía, por lo tanto con la intervención de los militares se ha podido incluso ingresar a esta tierra de nadie, México Chico», enfatizó el legislador en declaraciones a los medios.
Torrez no solo apunta al narcotráfico, sino que acusa directamente a algunos movimientos indígenas de operar como un escudo para proteger la ilegalidad. «Creo que algunos movimientos originarios están tapando actos de corrupción», declaró e insistió en que la presencia del Estado es un imperativo de soberanía.
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
La analogía con «México Chico», una zona del Norte de Potosí donde, según el diputado, la intervención militar permitió descubrir y erradicar extensos sembradíos de marihuana, es el eje central de su argumento. Para Torrez, el Chapare atraviesa una dinámica similar de violencia y desafío a la autoridad estatal, por lo que la solución debe ser con el despliegue conjunto de militares y agentes de inteligencia.
Al reconocer la sensibilidad de una operación de esta magnitud, el legislador sugirió que la acción debe ser planificada con discreción y precisión. Advirtió que no debe hacerse «de forma abierta» para no alertar a los grupos irregulares y confió en que la Inteligencia del Estado «sabrá operar» para minimizar el riesgo de víctimas humanas, un escenario que calificó como «lo más fatal».
La exigencia del PDC, cargada de una retórica de soberanía y control territorial, promete avivar el debate sobre la estrategia antidroga y la seguridad en las regiones más convulsionadas del país.