«Él ha sido un expolicía, por lo tanto tiene conocimiento de lo que significan los procedimientos y si tiene conocimiento de algún hecho ilícito pues debe denunciarlo y debe actuar en consecuencia. Lo otro es solamente show y lo único que nos hace es dar pena y vergüenza a los bolivianos», enfatizó el rector Vargas.
El rector de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (UAGRM), Reinerio Vargas, criticó hoy (24) duramente el desempeño del vicepresidente, Edmand Lara, y señaló que su comportamiento político es más propio de una «campaña electoral» que del ejercicio de su alta función de Estado. Vargas exigió a Lara que abandone lo que calificó como un mero «espectáculo» en redes sociales y asuma acciones concretas en su anunciada lucha contra la corrupción o , de lo contrario, provocará «pena y vergüenza» para los bolivianos.
«Él ha sido un expolicía, por lo tanto tiene conocimiento de lo que significan los procedimientos y si tiene conocimiento de algún hecho ilícito pues debe denunciarlo y debe actuar en consecuencia. Lo otro es solamente show y lo único que nos hace es dar pena y vergüenza a los bolivianos», enfatizó el rector Vargas.
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Vargas profundizó en su crítica el rol constitucional del vicepresidente y le exigió un cambio de actitud. «Él actualmente es vicepresidente de la República, debería actuar en concordancia (y) debe ejercer su cargo como dice la Constitución, debe dejar de hacer política», sostuvo.
Esta observación apunta al núcleo de la conflictiva relación de Lara con el Gobierno de Rodrigo Paz y sugiere que su actitud de confrontación mediática socava la estabilidad y la seriedad del Ejecutivo.
El rector fue más allá al señalar una contradicción fundamental en el discurso de Lara. «No es cuestión de decir que se va a luchar contra la corrupción cuando uno a veces está mirando para otro lado en esos casos, debe actuar en consecuencia», afirmó y añadió: «Yo aplaudo si él demuestra, pero deja de hacer solamente escarnio mediante las redes sociales y no demuestra absolutamente nada» porque Lara utiliza las plataformas digitales para el «escarnio público» en lugar de emplear los canales institucionales para una lucha efectiva.
En su diagnóstico final, Vargas atribuyó estos problemas a una inadecuada transición de candidato a autoridad. «Muy complicada la situación del vicepresidente porque creo yo que él está actuando de una manera todavía como si estuviera en campaña política y ya no se ha sentado a saber la magnitud de su cargo», concluyó.