En depósitos aduaneros hay al menos 400 toneladas de mercancía. Un decreto establece que los productos podrán ser transferidos a las entidades públicas y éstos los entregarán a las organizaciones sociales de todo el país.
Página Siete / La Paz
Mercadería depositada en almacenes aduaneros. Foto Aduana.
El Gobierno autorizó la entrega gratuita de al menos 400 toneladas de mercadería abandonada en depósitos aduaneros a entidades públicas. Éstas deberán distribuirlas a diversas organizaciones sociales.
La disposición final tercera del Decreto Supremo 1134 “autoriza al Ministerio de Economía y Finanzas Públicas a emitir una resolución expresa, adjudicando las mercancías abandonadas a entidades públicas, incluyendo al propio ministerio, a título gratuito y exentas del pago de tributos aduaneros de importación” .
La norma añade que esas mercancías podrán ser distribuidas gratis “a organizaciones económico-productivas, organizaciones territoriales, organizaciones privadas sin fines de lucro, organizaciones indígena originario campesinas y personas naturales, priorizando aquellas ubicadas en zonas fronterizas”.
Hasta antes de la emisión de ese decreto supremo, la mercadería declarada en abandono debía ser rematada por la Aduana Nacional; sin embargo, de acuerdo con información de Depósitos Aduaneros Bolivianos (DAB), el procedimiento era burocrático por lo que se quedaba almacenada por años.
Recientemente, el ministro de Economía y Finanzas, Luis Arce, informó que al menos 400 toneladas de productos se encuentran en calidad de abandono, algunos datan de hace 30 años.
Esta mercancía es aquella que está en depósitos por un tiempo superior al autorizado (por Aduana), sin que sus propietarios hayan presentado la declaración respectiva.
En una anterior entrevista, el gerente de DAB, Fernando Villalba, explicó que los productos en calidad de abandono y que están para remate son de diverso tipo. Hay alimentos, electrodomésticos, zapatillas deportivas, entre otros.
Cuestionamiento
El especialista en temas de comercio exterior Julio Alvarado cuestionó el hecho de que esos productos sean entregados gratis, sin que los beneficiarios paguen al menos los tributos a la Aduana Nacional de Bolivia.
“Si les van a regalar por lo menos que paguen las tasas aduaneros. Son esas contradicciones continuas que nos muestra este Gobierno de fomentar la informalidad a todo nivel”.
“ Esas mercancías van a ir a parar a sectores informales”, aseguró Alvarado.
El especialista precisó que esa mercancía pudo haber sido declarada en abandono porque presenta alguna irregularidad.
“Qué tipo de mercadería es y cuánto, eso la Aduana lo deberá decir. Me parece medio rara esa disposición transitoria porque normalmente ninguna empresa seria, o persona jurídica, va a dejar algo abandonado en almacenes aduaneros”, afirmó el experto a Página Siete.
En su criterio, lo que debe llamar la atención de esa normativa es que la liberación del pago de un tributo aduanero sienta un precedente negativo, pues otros sectores pueden alegar el no pago de impuestos por cualquier motivo.
“Seguimos con esa mentalidad de que hay que hacer excepciones a la regla, y tantas excepciones se hacen a la regla que al final lo que debería ser normal se convierte en excepcional”, dijo.
Ponen plazo para dar certificación
Para la destrucción de las mercaderías nocivas a la salud o al medio ambiente, la Aduana Nacional de Bolivia (ANB) deberá recibir la certificación de las entidades correspondientes en un plazo máximo de cinco días, de acuerdo con disposiciones del Gobierno.
El artículo 14 del Decreto 1134 establece: “Para la destrucción de mercancías, en el marco del inciso b) del artículo 63 del Decreto Supremo N° 27310, con anterioridad al acto de destrucción, la Administración Aduanera solicitará la certificación oficial del órgano competente, la cual deberá ser emitida en un plazo no mayor a cinco (5) días hábiles a partir de su requerimiento, bajo responsabilidad”.
El inciso b del Decreto 27310 se refiere a mercancías descritas en el artículo 119 del reglamento a la Ley de Aduanas, que son nocivas a la salud o al medio ambiente.
Entre esas mercaderías, de acuerdo con el reglamento de la Ley General de Aduanas, están: productos alimenticios, farmacéuticos, medicamentos, equipos de refrigeración doméstica, bebidas, entre otros.
La presidenta de la Aduana, Marlene Ardaya, justificó la demora en la destrucción de mercaderías porque ese proceso no sólo depende de su despacho.
“No sólo depende de mí o de la Aduana, en sentido de que, por ejemplo, si se destruyen medicamentos se lo debe hacer con el Ministerio de Salud”, dijo.