Gobierno boliviano gasta $us 2.408,9 millones en ocho contrataciones directas

Si el monto fuera parte de la inversión pública 2012, representaría 70%.

Caso. Por el último supuesto hecho de corrupción en YPFB, hay dos detenidos. Un experto sugiere encargar las contrataciones a una agencia para evitar discrecionalidad.

Se gastan $us 2.408,9 millones en ocho contrataciones directas

image Página Siete / La Paz



El Gobierno firmó en los últimos años acuerdos de contratación directa con diversas empresas por un monto de 2.408,9 millones de dólares para realizar distintas obras. La suma total de contrataciones, aunque válida para varias gestiones, representa el 70% del total de la inversión pública de 2012 que tiene programado 3.461 millones de dólares. El monto resulta de innumerables obras que el Gobierno ejecuta actualmente o que está a punto de iniciar.

La más costosa de todas ellas alcanza a 1.100 millones de dólares y tiene que ver con la construcción de la planta de urea (fertilizante que se obtiene procesando gas natural) en el Chapare (Cochabamba); la información sobre el monto de inversión la entregó el vicepresidente Álvaro García Linera.

Todas las compras que realiza la estatal YPFB, considerada “empresa estratégica”, las realiza sin procesos de licitación.

La segunda obra millonaria en ejecución es la construcción de la planta separadora de líquidos en Gran Chaco (Tarija) con un monto de 644 millones de dólares.

El tercer trabajo más caro es la construcción de un teleférico entre La Paz y El Alto, que el Gobierno decidió entregar a la empresa austriaca Deppelmayr, a un costo de 234 millones de dólares. El oficialismo hizo aprobar, en tiempo récord, la ley que autoriza su construcción. Otra empresa constructora de teleférico, la francesa POMA, había presentado un pedido para ser tomada en cuenta como otra candidata, pero su solicitud no fue considerada.

La cuarta en costo es la construcción del camino Potosí-Tarija, con un monto de 226 millones de dólares. La obra fue entregada originalmente a la brasileña Queiroz Galvao pero, al incumplir esta el trabajo, se le entregó el contrato, de manera directa, a la también brasileña OAS. Sucesivas ampliaciones de plazo se han dado para la conclusión de la obra. El plazo previo venció en junio de este año, pero ABC entregó una última ampliación a OAS hasta julio de 2013.

YPFB tiene el quinto proyecto más costoso, la instalación de la planta separadora de líquidos en Río Grande, con un costo de 160 millones de dólares. La obra está en espera desde hace dos años. Primero se descubrió un grave hecho de corrupción, que incluyó la muerte del empresario Jorge O’connor y el encarcelamiento del ex presidente de YPFB Santos Ramírez y otros varios funcionarios. Y, segundo, hace una semana el gerente de Plantas de Separación de Yacimientos, Gerson Rojas, y otros funcionarios fueron encarcelados por presunto enriquecimiento ilícito.

La sexta obra tiene que ver con la compra de 16 barcazas y dos empujadores, a través de la Empresa Naviera Boliviana por un monto de 28,9 millones de dólares. La contratación de la empresa General Marine Business (china) fue directa y pagó por adelantado; las maquinarias no llegaron al país desde noviembre de 2011.

La séptima y octava contratación directa que realizó el Gobierno es con la Empresa Constructora del Ejército que se adjudicó dos construcciones: la carretera Unduavi-Chulumani (La Paz), por nueve millones de dólares, y el aeropuerto Tito Yupanqui, en Copacabana, por siete millones de dólares.

Punto de vista

Raúl Alborta, Diputado del MAS

La mejor forma (para las contrataciones) es llevar adelante un proceso transparente, claro. Sobre todo, como Movimiento Al Socialismo (MAS) esperamos que la gente con quienes estamos trabajando (dentro del Gobierno y demás reparticiones del Estado) obre de manera justa, franca y honesta.Sin embargo, ante cualquier situación que se pueda presentar como anómala existe la ley anticorrupción Marcelo Quiroga Santa Cruz, que se les aplicaría rápidamente y sancionaría a los responsables.

En todo caso, como Movimiento Al Socialismo esperamos que los ejecutivos obren de la forma más sana posible, evitando cualquier sesgo que pueda darse (por favorecer a alguien), ésa es nuestra esperanza.

Por esta razón, hay que buscar los mecanismos o procedimientos que sean los más rápidos posibles y transparentes para resolver esta situación. En todo caso, nosotros no quisiéramos volver al pasado, cuando las licitaciones se hacían a oscuras, que todo estaba manipulado para beneficiar a algún grupo o alguna persona.

Ese tipo de elementos debemos eliminar totalmente y en las que personalmente no estoy de acuerdo. Deseamos que las licitaciones directas o de cualquier forma en que se realicen sean las más transparentes y en beneficios de todos los bolivianos.

Además, pido que nadie ni los ejecutivos o las personas encargadas saquen una ventaja económica de este tipo de contrataciones.