La “relocalización” del ex candidato masista a la alcaldía cruceña, Reymi Ferreira, como nuevo ministro de defensa, se produce un día después de que declarase que una alianza del oficialismo con Percy Fernández “sería la muerte”.Por lo tanto, su nombramiento sería una medida con la cual el gobierno quita de en medio al ex postulante para facilitar el acuerdo Percy-MAS, o con mayor precisión Angélica Sosa-MAS.Por supuesto, la designación de candidatos oficialistas derrotados en funciones ejecutivas es un conocido “premio consuelo” practicado por el régimen evista, tanto como enviar de embajadores a ex ministros cuestionados (el caso más reciente es el de Nardi Suxo, quien desde la cartera de Lucha contra la Corrupción no detectó las millonarias irregularidades del Fondo Indígena, y que ahora representará a Bolivia ante los organismos de derechos humanos de la ONU).Los antecedentes de Ferreira como rector y como encargado de la Cumbre G-77 no permiten augurar que pueda transparentar el ministerio que asume, donde al parecer se estaría ocultando la quiebra de la empresa de construcción de las Fuerzas Armadas.Su ideología socialista y su puño en alto tampoco son credenciales para una reinstitucionalización de las FFAA, politizadas por el régimen con consignas “antiimperialistas”…[email protected]