Cinco razones que debieran preocupar

Carlos Federico Valverde BravoCVRazón 1.Las posibilidades de un inmediato desenlace de la demanda en la Corte de Justicia de La Haya. Bolivia confía en que ese escenario desestime el recurso de incompetencia presentado por Chile. De no darse esta situación, creo que hasta ahí llegan las posibilidades del país en el más alto tribunal internacional. Preocupa que de esta sensación de que ‘podemos ganar’ se pase a ‘perdimos’. Nada desanima más a los ciudadanos de un país que una derrota de este tipo. Lo que temo es ‘el día después’; porque el Gobierno no nos está preparando para una hipotética pérdida. De darse, seguramente el Gobierno tomará acciones políticas que amainen el descontento. ¿Cuáles serán?Razón 2.Déficit comercial a la vista. El gerente general del Instituto de Comercio Exterior, Gary Antonio Rodríguez, firma un artículo titulado: ¿Déficit comercial inminente? donde expresa su preocupación sobre la situación desventajosa del país frente al comercio vecinal. “Ni el más pesimista esperaba un resultado tan malo, ni el más optimista aguardaba que no fuera así. Todos se equivocaron sobre lo que acontecería con el comercio exterior del país a tan corto plazo. Lo visto hasta febrero –según datos del INE– superó los agudos cálculos de los especialistas, así como la negación de quienes no aceptan que Bolivia es altamente vulnerable por su modelo económico tan dependiente del mercado externo”.Y es que nadie imaginaba semejantes cifras: el valor de las exportaciones volvió a caer, mientras que las importaciones moderaron su caída, desde un 15% en enero al 10% en febrero, algo que hace avizorar un déficit en la balanza comercial. Para preocuparse más: el saldo positivo de febrero bajó en hasta $us 19 millones, disminuyendo 371 millones comparado con igual lapso de 2014, dada la abrupta caída de las exportaciones, más que de las importaciones.Razón 3.La falta de acción del Gobierno frente a la devaluación de monedas de países vecinos. Gary Rodríguez afirmó a Página Siete: “la devaluación generalizada de las monedas en países como Brasil, Argentina, Colombia, Perú y Chile, entre otros, debe llamar la atención de las autoridades, ya que, si deriva en una guerra de divisas a corto plazo, tendrá un fuerte impacto sobre el comercio exterior boliviano”.El presidente de la Cámara de Exportadores de Santa Cruz, Wilfredo Rojo, coincidió con Rodríguez y confirmó que la devaluación en los países vecinos resta competitividad a los productos bolivianos. «En la medida que ellos (los países) deprecien y nosotros no lo hagamos, la industria nacional y los exportadores serán los más afectados”; Rojo cuestionó que al Gobierno solo le interese que no se disparen los precios, para no perder la capacidad adquisitiva que hay en el mercado interno.Razón 4.El encuentro entre Barack Obama y Raúl Castro marcó un hito en las relaciones entre EEUU y Cuba y, a su vez, establece una evidente llamada de atención a los países al Sur de Estados Unidos que persisten en mantener las difíciles relaciones con la potencia de EEUU. El cambio de Cuba debiera moderar el agresivo discurso del presidente Evo Morales, quien parece no entender que el rol del ‘niño díscolo’ ya no es el adecuado en un país como el nuestro, que necesita mejorar sus relaciones con el país más poderoso del mundo en materia económica. No se trata de amistades o simpatías personales, sino de lo que le es útil y lo que le hace daño al país.Razón 5. Un mal escenario de precios internacionales complica la economía del país. Preocupa la baja del precio de nuestros productos no tradicionales, como la soya, donde tenemos el mayor número de productores agrícolas del país (14.000, según Anapo). Ellos necesitan políticas claras de parte del Gobierno/Estado. En 2014, la producción marcó un nuevo récord de 2,9 millones de toneladas métricas de soya, de las cuales 1,6 millones fueron producidas por los pequeños agricultores.En cuanto a su participación en la exportación, el año pasado la venta de grano de soya y de derivados (torta y aceites) significó casi $us 1.100 millones de ingresos para el país; sin embargo, tenemos una merma de unos $us 2.000 millones de productos tradicionales (hidrocarburos/minería); la situación no se ve buena, pero se puede lograr que no sea tan mala. Para ello, hay que hacer ajustes. El tema es saber si a don Evo se le va a ocurrir que en algún momento puede ser “un poco impopular” y más estadista (o un poco estadista). Es cierto que esto depende de él, son preocupaciones ciertas que debieran llamar su atención.El Deber – Santa Cruz