Leña al fuego

penoco_Si las cosas no han sido del todo buenas en la relación entre Bolivia y Brasil durante los últimos años, la situación podría empeorar. Ni bien se conoció la noticia de la destitución de Dilma Rousseff, llegó otra aún más delicada para el régimen político que conduce nuestro país: el nombramiento de José Serra en la cancillería, un cargo sumamente importante, pues en el país vecino las relaciones exteriores son asunto de primer nivel. José Serra es un veterano dirigente que fue candidato a presidente.

Es un reconocido “antibolivariano” y cuando se produjo el conflicto por el Tipnis no tuvo reparos en calificar como la “autopista de la cocaína” a la carretera que se pretendía ejecutar por el medio del parque Isiboro Sécure. Serra fue muy duro con la política permisiva que practicaron los regímenes de Lula y Rousseff respecto del narcotráfico y en relación a la invasión de droga proveniente de Bolivia, el actual ministro acusó a las autoridades nacionales de actuar con complicidad. Las relaciones entre ambos países se complicaron a raíz del asilo político que le brindó el gobierno brasileño al senador Róger Pinto, aunque las cosas ya venían tensas desde la nacionalización que dejó mal parada a Petrobras. El Gobierno boliviano ha sido uno de los más severos al reaccionar frente a lo que ha calificado como un “golpe” contra Dilma. Eso tal vez sea como echarle leña el fuego.

Fuente: www.eldia.com.bo