La feliz expresión del secretario general de la OEA, Luis Almagro, quien bien definió al mandamás venezolano Nicolás Maduro como un “dictadorzuelo”, podría terminar aplicándose también en Bolivia, vista la nueva ola persecutoria desatada por Evo Morales, ahora enfocada en abogados y periodistas.Si en un principio pudo hablarse de democracia nominal, democracia deformada o régimen híbrido, parece claro que el gobierno ya está cruzando el límite hacia una nítida autocracia, como bien señala el politólogo Marcelo Varnoux, entendiendo por tal a un sistema “donde uno se coloca sobre las leyes y la sociedad para perpetuar su poder y privilegios”. Definición parecida a la dada por Nicolás Maquiavelo para distinguir al principado de la república.Aunque los cancerberos del régimen que asoman públicamente sean el destemplado Ministro de la Presidencia, la aspirante a censora de prensa Marianela Paco o el apologista de la “huasca” Álvaro García Linera, no sería posible el reciente giro represivo sin la anuencia del jefazo Evo Morales.Como vamos, no sólo habrá que pedir la activación de la Carta Democrática Interamericana para Venezuela sino también para Bolivia. El nuevo estilo instalado en la Secretaría General de la OEA y la nueva ecuación geopolítica de Sudamérica parecen auspiciarlo…[email protected]