Quintana insulta y amenaza, llama a ANF, Erbol, Página 7 y El Deber “cártel de la mentira”

https://youtu.be/DYiT4k24044El ministro de la Presidencia acusó a opositores de ser «lacayos» de Chile y EEUU. Se limitó a negar relación alguna con Gabriela Zapata y optó por no comentar sobre Evo.

Quintana llama a ANF, Erbol, Página 7 y El Deber “cártel de la mentira”

Descalifica a la oposición y advierte “campaña maliciosa”.El ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana durante su interpelación. Foto: ABI.Erbol / La PazEl ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, acusó este jueves a políticos de la oposición de perseguir afanes desestabilizadores contra el Gobierno, a través de la Embajada de Estados Unidos y calificó a cuatro medios de comunicación de formar parte de un “cártel de la mentira”.La autoridad de Estado, en el acto de interpelación en la Asamblea Legislativa Plurinacional, relacionó las denuncias de supuestos vínculos de autoridades gubernamentales en el caso caso CAMC-Zapata con una “coartada más ruin para atacar al proceso de cambio”.Durante más de cuatro horas, el titular de la Presidencia cargó tintas contra el comunicador cruceño Carlos Valverde, calificándolo de mentiroso y vinculado con intereses externos.“Quienes deben hacer una autocrítica profunda son los propios medios de comunicación, una reflexión profunda sobre el valor de la verdad y escrúpulo”, manifestó.“Cártel de la mentira”Quintana, en la primera parte de su intervención en la ALP, descalificó el trabajo periodístico de la Agencia de Noticias Fides (ANF), los periódicos El Deber y Página Siete y Erbol.“Exigimos autocrítica, responsabilidad y disculpas. Pedimos una explicación razonable y sincera de estos medios de comunicación que han perdido su credibilidad”, agregó.El Ministro de la Presidencia recalcó que el Gobierno no tolera la corrupción ni la difamación, por lo que no tolerará lo que considera una campaña “maliciosa” contra el proceso de cambio.“No podemos ser parte del cartel de los medios de comunicación, no puede seguir sorprendiendo la buena fe del pueblo boliviano, Página Siete; no puede seguir sorprendiendo la buena fe del pueblo boliviano, la Agencia de Noticias Fides; no podemos seguir escuchando la réplica política en los medios de comunicación de Erbol o de El Deber o de otros medios de comunicación que lo único que quieren hoy día. Convierten su rencor político, su bronca, su desacuerdo con este proceso de cambio a través de una campaña difamatoria contra el presidente Evo, contra el proceso de cambio”, afirmó.También hizo referencia a los periodistas Amalia Pando y Andrés Gómez y dijo que éstos están vinculados con un plan de desestabilización en contra del Gobierno.InterpelaciónEn el acto interpelatorio, Quintana calificó de “maliciosas” las preguntas de legisladores, porque se basan en una presunción de un tráfico de influencias, delito que nunca fue comprobado.“Pero más allá de este caso, este caso ha sido la coartada mas ruin para atacar al proceso de cambio, para atacar al Gobierno nacional, para atacar al presidente Evo Morales, la coartada, el casoZapata, ha sido, eso es, para que el pueblo boliviano lo sepa, esta coartada ha tratado nuevamente de instalar un clima de desestabilización en el país”, aseveró.El ministro interpelado puso énfasis a un presunto vínculo directo de líderes opositores con el “imperio” en el abordaje del tema.También apuntó los efectos colaterales del escándalo en el plano de la reivindicación marítima.Al finalizar, Quintana salió del edificio legislativo aplaudido por los miembros del oficialismo, quienes le dieron su voto de confianza.

Interpelación a Quintana depara gritos y denuncias

El ministro de la Presidencia acusó a opositores de ser «lacayos» de Chile y EEUU. Se limitó a negar relación alguna con Gabriela Zapata y optó por no comentar sobre Evo.

Jesús Alanoca – EL DEBER

Este jueves, a las 17:00, comenzó la novena sesión ordinaria de la Asamblea Legislativa Plurinacional, a la que el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, fue citado para explicar su relación con el caso CAMC, empresa china que se benefició con varios contratos del Estado.El ministro empezó a hablar poco después de las 17:00 y hasta las 20:20 continuaba. En una de sus alocuciones denunció un supuesto quinto intento de desestabilizar el proceso de cambio y comparó la actual situación del país con el «Plan Cóndor».»Son unos pongos, unos serviles, son unos lacayos que responden al imperio«, dijo con tono exaltado la autoridad, a tiempo de acusar a la oposición de defender los intereses de Chile y Estados Unidos y de tenerle «terror» a Evo Morales.Conoce más: Valverde ve que Evo miente y Paco acalla mediosNegó cualquier relación con la exnovia del presidente, Gabriela Zapata, se limitó a solicitar «respeto» a la vida personal del mandatario cuando se le consultó si conocía de la relación amorosa o del hijo que tuvieron.El ambiente en el Legislativo se empezó a tensionar a medida que el ministro subía el tono a sus declaraciones al punto que los opositores con carteles en mano empezaron a gritarle a coro: «¡Cínico!».Los medios de comunicación tampoco quedaron fueron de las acusaciones de Quintana. «Esta mentira (caso Zapata) es producto de algunos medios de comunicación a los que hay que llamar los del cartel de la mentira», dijo al tiempo de nombrar a dos diarios (Página Siete y EL DEBER) y a dos agencias de noticias (ANF y Erbol).Lea también: Paco espera que Valverde ‘responda’ por sus dichosLa autoridad dijo no haber viajado a China para sostener alguna reunión con gente de la empresa CAMC y concentró sus esfuerzos, durante su interpelación, a «desmontar» lo que llamó una «relación incestuosa» entre algunos medios de comunicación y la oposición.»Está clandestino, no porque se siente amedrentado por la Fiscalía sino porque se siente huérfano del apoyo político», sentenció sobre Carlos Valverde, que a su criterio se oculta tras admitir que no existió el hijo entre Evo y Zapata.Aseveró que «era absolutamente obvio que la oposición se alínea a esta trama mentirosa» y adelantó que la diputada Norma Piérola, solicitante de la interpelación, tendrá que dar cuentas ante la justicia por sostener que la existencia del niño probaba el tráfico de influencias.