Evo en los mundiales: De verlo con niños en Palacio a las butacas de los grandes estadios

La oposición lamenta que el presidente Evo Morales use recursos del Estado boliviano para “darse gustos”. El MAS lo justifica.Evo en los mundiales: De verlo con niños en Palacio a las butacas de los grandes estadiosEvo en Rusia junto a la mascota del mundial. Foto: RRSS.Evo Morales es amante del fútbol desde  antes de su ascenso a la Presidencia. Cuando era dirigente cocalero,  los mundiales y otros cotejos los siguió por su radio, que funcionaba con  pilas. Pero eso cambió en 2010, pues desde entonces no  perdió  la oportunidad de asistir  a los partidos inaugurales de la Copa del mundo.Su asistencia, ahora, a Rusia provocó una ola de críticas de la oposición y colectivos ciudadanos, porque consideran que el Primer Mandatario “despilfarra” recursos del Estado.Mundial 2002“Todo era por radio. ‘¡Qué lindo está el deporte mundial!’, decía Evo”, relata Román Loayza, sobre cómo Morales siguió los partidos del Mundial Corea del Sur-Japón, que se disputaron  entre el 31 de mayo y  30 de junio de 2002.Loayza, quien otrora fue hombre de confianza del Presidente, cuenta que se perdieron algunos partidos de ese Mundial, debido a que se trasladaban de un lugar a otro porque estaban en plena campaña  de cara a los comicios generales de junio de 2002.El 5 de marzo de ese año, el movimiento indígena y campesino designó a Morales como su candidato presidencial, para las elecciones del 30 de junio de 2002, luego de que su popularidad “subió como espuma”. Tres meses antes (en enero), Evo, acusado de instigador por los violentos enfrentamientos en Cochabamba, perdió su escaño con el voto mayoritario de las fuerzas políticas tradicionales.“Era una radio de pilas que nos acompañaba”, confirma  Gerardo García, vicepresidente del Movimiento Al Socialismo (MAS), quien dice que entonces en su mente estaba sumar la mayor cantidad de votos para que Morales sea el nuevo primer mandatario de Bolivia. En aquella elección, el hoy Jefe de Estado   obtuvo la segunda mayor votación (20,9%) del país, pero no le alcanzó para llegar a  la silla presidencial.Loayza señala que Morales, antes de saltar a la arena política, trabajaba sus cocales en compañía de su radio  para seguir los diferentes partidos de fútbol.En 1983, por su pasión por el fútbol, lo  nombraron  en su sindicato secretario de Deportes, se lee en el libro Mi vida, de Orinoca al Palacio Quemado.Luego -relata Loayza-, Morales, como dirigente sindical, “viajaba bastante a Europa por la defensa de la coca. Él no participaba de los encuentros  mundiales, nos dedicamos a la gente, luchábamos por la independencia sindical”.Mundial 2006En enero de 2006, el líder cocalero, a sus 46 años,  juró como presidente de Bolivia. Seis meses después, en junio, se disputó el Mundial Alemania 2006.El Primer Mandatario dejó atrás la radio y vio el espectáculo deportivo  en Palacio de Gobierno, junto a dos centenares de niños de escasos recursos.Acompañado de lustrabotas, vendedores de periódicos, lavadores de autos y estudiantes de escuelas públicas, el Jefe de Estado festejó a gritos los seis goles del partido inaugural, en el que Alemania derrotó 4-2 a la selección de Costa Rica.Jorge Silva, entonces diputado del MAS,  ahora concejal de La Paz, evoca que en 2006 el Presidente  no viajó a  Alemania, al partido inaugural,   porque recién se estaba consolidando la agenda internacional para la ejecución de proyectos y relaciones bilaterales.“En 2006 teníamos un proyecto, un plan, una agenda que recién la estábamos iniciando y lógicamente hubiera sido inapropiado que en 2006 el presidente Morales participe de ese evento (del Mundial) cuando recién se estaba consolidando y  se estaban diseñando los proyectos”, manifiesta el concejal Silva, en entrevista con Página Siete.En aquella oportunidad, en junio de 2006, el Jefe de Estado dijo a sus comensales que él también fue un niño pobre y que su invitación a ver el cotejo mundial en Palacio de Gobierno era un “mínimo acto de justicia”.“Siempre me gustó jugar de centrodelantero, de número 9. Me gusta hacer goles, festejar y tratar de que mi equipo gane”, dijo Morales a los dos centenares de niños que disfrutaron del evento deportivo.Entonces, el Primer Mandatario también recordó que en 1994 vio desde la región productora de coca de Chapare (departamento de Cochabamba) la participación de la Selección boliviana en  el Mundial de Estados Unidos.Mundial de 2010Cuatro años después, el presidente Morales “saltó” a las butacas del estadio Soccer City, en Johannesburgo, para presenciar “en directo” el partido inaugural del Mundial de Fútbol Sudáfrica 2010.La Selección  boliviana no se clasificó y terminó penúltima en la tabla de posiciones, pero  Morales viajó con el argumento de que tenía previsto encuentros bilaterales con su par anfitrión, Jacob Zuma, y con el entonces presidente de México Felipe Calderón.Pero  el Primer Mandatario, que viajó junto  con  quien era su canciller David Choquehuanca, se reunió sólo con ministros y el vicepresidente de Sudáfrica,  Kgalema Motlanthe. En ese encuentro  se ratificó “la necesidad de que ambos países (Sudáfrica y Bolivia) puedan tener relaciones bilaterales”, afirmó  entonces Iván Canelas, quien era portavoz de Palacio.La FIFA concedió a Morales un número reducido de entradas para el partido inaugural. Fue  así que se tuvo que comprar entradas para el resto de la delegación. “Se gastaron 2.500 dólares para las entradas de los dos primeros partidos”, dijo Canelas.El exsenador del MAS Adolfo Mendoza manifiesta que el viaje de Morales a Sudáfrica “fue parte del protocolo” y que “no se puede poner en duda el gusto (del Presidente) por el fútbol”.En ese sentido, afirma “que no es un pecado que el Presidente haya ido al Mundial”.Mundial 2014Morales repitió la  hazaña en 2014. Viajó a Brasil para   presenciar el partido inaugural del Mundial que se disputó el 12 de junio. El Primer Mandatario no fue a alentar a la Selección, pues la Verde quedó nuevamente fuera de la cita mundialista.El Jefe de Estado  se trasladó a Brasil en el avión presidencial por invitación de Dilma Rousseff. Su retorno a Bolivia fue inmediato. Llegó con el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, Ban Ki-Moon,   para ultimar detalles de la Cumbre del G77 más China, a la que asistieron   delegaciones de 94 países.El jefe de bancada del MAS, el diputado David Ramos, sostiene que la presencia de Morales en el cotejo inaugural en Sao Paulo  respondió a una invitación y que ese viaje fue autorizado por su gabinete ministerial.“Lamentablemente, la oposición hace una campaña maliciosa contra la imagen del presidente Morales”, manifiesta Ramos, quien asegura que no hay  prohibición legal que evite  que el Primer Mandatario viaje a los cotejos mundiales; por el contrario -señala-, “es una atribución constitucional”, porque en sus visitas, el Jefe de Estado  sostiene encuentros bilaterales   en beneficio del país.Mundial 2018La opositora Unidad Demócrata (UD) exteriorizó su preocupación por el viaje que realizó el presidente Morales junto a parte de su gabinete ministerial, para presenciar un partido de fútbol en Rusia.El jefe de bancada de UD, Arturo Murillo, manifestó que los viajes “son una aberración” porque mientras existen temas sin resolver en el país, el Primer Mandatario “se dedica a pasear con el dinero del Estado”.“Se da esos lujos” con recursos de los  bolivianos “poniendo cualquier excusa”, sostuvo el senador Murillo.Página Siete / Beatriz Layme  / La Paz