REPENTINAMENTE | Enfermó en España junto con su esposa; sufrió una pesadilla para regresar al país: murió tres días después de haberlo logrado.Los Tiempos, 14 de agosto de 2008
David Zapata Garnica, el viernes pasado. | Dico SolizRedacción CentralDavid Zapata Garnica (42) el compatriota boliviano que enfermó de un cáncer terminal en España junto con su esposa y que atravesó toda una odisea para retornar al país, falleció el domingo pasado, apenas tres días después de llegar al país, informó la viuda, Maruja Arias Quiroga, quien también sufre de una fuerte enfermedad.Con lágrimas en los ojos, la voz entrecortada y la enfermedad de aneurisma bastante notable, la esposa agradeció a todas las personas que en este poco tiempo, anoticiadas del caso, llamaron a su casa de Quillacollo para informarse y tratar de brindar alguna ayuda a la familia, mientras había tiempo.Sin embargo, la enfermedad no le permitió un día más y el hombre que apenas iba por los 42 años dejó de respirar el domingo pasado, mientras el país se hallaba ocupado con la realización del Referéndum Revocatorio. Fue sepultado el martes en el cementerio Hágase tu Voluntad de Quillacollo.Zapata Garnica tres hijos, de 20, 18 y ocho años a quienes logró ver aunque sólo sea por un par de días, según era su último deseo, mientras luchaba contra el cáncer de huesos con metástasis, que lo tenía aquejado desde hace un año.La esposa había viajado a España en septiembre de 2006 y él, en marzo del año siguiente, pero en mayo de este año, ella enfermó de aneurisma y poco tiempo después fue el esposo a quien se le diagnosticó el cáncer. Durante todo este tiempo vivieron de la solidaridad de los amigos y compatriotas y buscando la forma de retornar al país.La vuelta fue otro Calvario, pues necesitaba dinero y las aerolíneas ponían sus objeciones para trasladar a un enfermo terminal. Una de las aerolíneas incluso quiso obligarlo a firmar un documento en el que se comprometía a no morirse durante el viaje.Tampoco le permitían viajar con los tanques de oxígeno que necesitaba para su supervivencia, ya que en España estos productos son considerados material explosivo. La pareja tuvo que peregrinar en oficinas y delegaciones diplomáticas tratando de que autoricen su traslado.AYUDAUna vez en casa de Quillacollo, camino a Pandoja, después de algo más de dos años de su viaje que se volvió una pesadilla, la pareja de esposos no sabía qué hacer, pues ambos se encontraban tan postrados con sus respectivas enfermedades que ninguno podría trabajar. Además tenían en casa a tres hijos y a los padres ancianos.»No tenemos ni para comprar un kilo de carne», se lamentaba la madre de David Zapata, el pasado viernes durante la entrevista con este medio. El lamento se incrementó aún más, pues la muerte no tuvo paciencia y dos días después se llevó al joven viajero.Maruja Arias se recuperó de su cirugía, pero los médicos afirman que puede sufrir un ataque cardíaco si no recibe control y medicación adecuada y permanente. Por eso es que ahora más que nunca necesita de las personas de buena voluntad que puedan ayudarla.Cualquier ayuda que se le pueda dar, por favor llame al 4364985.