De voz suave, atildado y amanerado, cuando habla dispara las peores acusaciones sin prueba alguna, todo por probar al «gran jefe» presidente, su lealtad incondicional con el «proceso de cambio», a cualquier precio, sea atropellando los derechos humanos que antes defendía, mintiendo y condenando a cualquier opositor, sin darle el beneficio de la duda ni el debido proceso.
Del llamado proceso de cambio del Mas, lo evidente es el cambio operado en estos personajes que llegaron a ultima hora y están probando las mieles del poder. Para desgracia del país son varios y los iremos presentando de a poco.
Volvamos al personaje de lengua afilada y voz suave. El transformado «Sacha», viceministro de Coordinacion Gubernamental.
Para nadie es un secreto que don Sacha Llorenti, aspira desde hace tiempo al cargo de Ministro de Gobierno, que actualmente ocupa Alfredo Rada, yerno del senador Antonio Peredo y de gran influencia en el MAS.
Se comenta que el pan se quemó en la puerta del horno y Sacha debió resignarse a continuar en un puesto segundón, el que de acuerdo a su altísima autoestima, no corresponde en modo alguno a las grandes capacidades que dice tener. Sin embargo, no se ha quedado tranquilo y desde el mismo momento de la ratificación de Rada como ministro de Gobierno, ha comenzado una más visible labor de satinaje cuchicheando de manera permanente al oido del presidente Evo Morales haciéndole ver los errores que está cometiendo el ministro en el tratamiento de los conflictos en el país.
Sacha tiene la ventaja de tener su oficina en el Palacio de Gobierno, en tanto Rada, que ciertamente no se ha destacado por su inteligencia, esta ubicado a 20 cuadras de distancia, si bien habla constantemente por teléfono con el » jefazo», no es lo mismo «estar cerquita y a mano»
La oportunidad la pintan calva y los violentos sucesos en la localidad pandina de Porvenir está siendo muy bien aprovechada por el inescrupuloso Llorenti quien está proclamando entre el oficialismo que Rada no brindó una seguridad adecuada a la concentración de masistas que tenía como objetivo la toma de la prefectura pandina.
Los amigos de Sacha le dicen que tiene perfil para ser Ministro de Gobierno o de la Presidencia, pero claro, contra el nefasto e implacable Quintana que, además es imprescindible para Evo en la labor de trabajo sucio, nadie se atreve, saldría trasquilado.