Evo apoya programa nuclear de Irán

Los presidentes de Bolivia e Irán firmaron una Declaración. Reafirmaron su compromiso para luchar «contra cualquier forma de imperialismo» y reconocieron el derecho que tiene el Gobierno de Teherán para desarrollar un programa nuclear «con fines pacíficos»

Los Tiempos



Los presidentes de Bolivia e Irán reunidos en Teherán (foto ABI).

Teherán | Efe

Irán y Bolivia reafirmaron ayer su compromiso para luchar «contra cualquier forma de imperialismo» y reconocieron el derecho que tiene el Gobierno de Teherán para desarrollar un programa nuclear «con fines pacíficos».

Así figura en la declaración conjunta firmada por el presidente Evo Morales y el de Irán, Mahmud Ahmadineyad, como cierre de la visita oficial de dos días, de Morales a este país, la primera de un gobernante boliviano.

El texto del comunicado conjunto, difundido por la televisión iraní, insiste en el deseo mutuo de Irán y Bolivia de ampliar sus relaciones bilaterales a partir de esta visita oficial de Morales.

«Las dos partes insisten sobre sus compromisos en cuanto a la lucha contra cualquier forma de imperialismo para conseguir unas relaciones internacionales más democráticas, más equilibradas y más justas, basadas en el respeto a la autonomía y la libertad de los pueblos», dice el comunicado.

El gobierno de Evo Morales se ha convertido en una de las principales voces latinoamericanas en contra de la política de los Estados Unidos y otras potencias mundiales, una posición en la que también suele insistir Ahmadineyad en sus discursos oficiales.

«Nada ni ningún país pueden perjudicar nuestras relaciones con el país revolucionario de Irán», afirmó el presidente Morales en unas declaraciones tras la firma del comunicado conjunto.

Anoche, en una entrevista que ofreció a un canal de televisión iraní, Morales insistió en que «jamás Latinoamérica se convertirá en un patio trasero seguro para que EEUU pueda continuar con sus saqueos y expolios y donde pueda aparcar sus nefastas ideas».

Bolivia e Irán reanudaron sus relaciones diplomáticas a comienzos de septiembre del año pasado, dos semanas antes de que visitara oficialmente La Paz el presidente iraní. Los dos gobiernos tienen pendiente la instalación de embajadas permanentes.