Al más puro estilo neoliberal.
Mineros llegaron a plaza Murillo en apoyo a Evo, serían las primeras víctimas de la crisis económica.
El gobierno del MAS alista la “relocalización” de 2 mil trabajadores mineros sindicalizados del distrito de Huanuni como respuesta ante la dramática caída de los precios del estaño en el mercado internacional.
El precio del estaño llegó hace unos meses a superar los 11 dólares la libra fina, lo que aseguraba una producción rentable. Sin embargo, como consecuencia de la crisis económica mundial, se prevé que el precio seguirá bajando. Hoy ha caído a 5.10 dólares y la tendencia es al descenso.
Como era previsible, el centro minero que sufrirá mayor impacto es el de Huanuni, donde, por consideraciones de tipo político se incorporó a un gran número de supernumerarios, esto sin tomar en cuenta a los cooperativistas que también reclamaron su cuota parte del rico yacimiento de Posokoni.
Como consecuencia de los violentos enfrentamientos ocurridos a fines de octubre de 2006 y que dejaron como saldo trágico casi 20 muertos se acordó incorporar en planta a 4 mil trabajadores, número que de entrada hacía difícilmente rentable a Huanuni a pesar de los precios altos.
Como una primera medida, el ministro de Minería, Alberto Echazú ha dispuesto la elaboración de un plan que contemplaría la “relocalización” de por lo menos 2 mil trabajadores. Es evidente que la minería no ofrece otras alternativas y por tanto la fórmula sería la dotación de tierras en el oriente boliviano.
Sin embargo, en esta ocasión y contrariamente a lo dispuesto en el Decreto Supremo 21060, no habrá un beneficio extralegal, a despecho de las grandes cantidades de recursos que dice tener el gobierno como reserva internacional.
El gobierno ha despilfarrado los recursos, creando bonos demagógicos, aumentando el numero de funcionarios públicos, gastando en campañas comunicacionales de propaganda, promoviendo marchas y cercos,pagando sumas millonarias a empresas extranjeras a título de "nacionalizaciones" y más. Ahora ha llegado la época de las "vacas flacas" y los "jodidos" de siempre seremos los bolivianos.
Cómo este gobierno no tiene idea de lo que es Gestión Económica, empieza a aplicar medidas de coyuntura, un parche de 5 millones de dólares como fondo de ayuda, que ya ha sido rechazado por los mineros, pues no les soluciona nada y ahora el plan de relocalización que, claro, tendrá otro nombre para evitar connotaciones desagradables con el pasado.
Conflictos aparte, porque ahora los mineros le exigirán al gobierno el cumplimiento de promesas a cambio de apoyo, lo previsible es que se concrete tempranamente y por otros motivos, lo anunciado por el viceministro Cáceres en EEUU, "miles de obreros se volverán narcos".
La absoluta incapacidad del gobierno permite avizorar que en vez de diversificar la economía, el país se encamina al retroceso de la monoproducción ya no minera, sino narco – cocalera y lamentablemente como en el pasado, los primeros en migrar hacia esta actividad serán los trabajadores mineros, es decir, los "relocalizados" de la era masista. Zoe.