Cardenal dice que no callará pese a críticas del Gobierno

Evo arremete contra la Iglesia. Cáceres le desautorizó a opinar sobre narcotráfico y Llorenti criticó al Cardenal por tomar «posiciones políticas».

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Los Tiempos



La Prensa y Anf. El cardenal Julio Terrazas manifestó ayer que no cesará en sus mensajes «en procura de dar luces a la realidad nacional para alcanzar el bien común de todos los bolivianos, sin importar la clase social o la ideología política a la que pertenezcan». Con esas palabras, respondió la autoridad eclesiástica a las acusaciones y criticas que recibió del Gobierno por su mensaje del domingo pasado.

El viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Sacha Llorenti, acusó ayer al cardenal Terrazas de estar alineado con sectores «separatistas» de la oposición y le negó «competencias» para hablar de asuntos políticos después de que el domingo la autoridad católica dijo que Bolivia «se va convirtiendo en el espacio donde están dominando los narcotraficantes, sin Dios y sin ley».

A estas nuevas acusaciones, Terrazas dijo que este tipo de susceptibilidades sufrió la Iglesia en el pasado y ahora en el presente. «Donde algunos quizás no lo entienden y se repiten las mismas injusticias. Donde le piden a la Iglesia que se dedique a rezar a no preocuparse de esto, pero eso también le dijeron al Señor y han dicho siempre a todos y de todos lados», manifestó el Cardenal.

«Lo importante que nosotros sigamos avanzando y la claridad de nuestro mensaje, porque nuestro mensaje es el que tiene que dar luces también a nuestra realidad, una realidad que no puede estancarse en pequeñas cosas sino que tiene que avanzar para alcanzar el bien de todos, el bien común como repetimos constantemente. Así que estamos nomás con la perspectiva y el desafío de no repasar el mensaje, de decirlo porque es muy importante, de decirlo con la única intención de seguir elevando el espíritu de nuestro pueblo», sostuvo Terrazas

Llorenti, en conferencia de prensa realizada ayer en Palacio Quemado, manifestó que las acciones del clero demuestran que Terrazas está alineado con la oposición del país y que Bolivia cumplió con la promesa de lucha contra el narcotráfico con resultados satisfactorios respecto de las anteriores administraciones.

«No coincidimos con las posiciones políticas de este jerarca de la Iglesia Católica, su opción es defender a aquellos terratenientes y posiciones separatistas».

La autoridad aclaró que sus críticas no son contra la institucionalidad de la Iglesia Católica sino contra la jerarquía de esa entidad que, según Llorenti, expresó posiciones políticas.

En un comunicado divulgado anoche por la Oficina de Prensa de la Conferencia Episcopal de Bolivia, por su parte señala que cuando en una homilía, la Iglesia da ejemplos de hechos o situaciones concretas «no hace política» sino su misión consiste en «reflexionar sobre la palabra de Dios y sacar orientaciones prácticas para la misma realidad que vivimos».

En otro párrafo del documento también señala: «esperamos que estas declaraciones no sean un intento de sembrar división en la Iglesia que tiene como rasgo fundamental la unidad» y niega que esta entidad no se haya pronunciado por los hechos de violencia en el país.

Evo arremete contra la Iglesia

El presidente Evo Morales volvió a atacar la noche de este lunes a la Iglesia Católica y dijo que el rol de mediador que asumió en la solución de conflictos sociales nunca fue para favorecer al pueblo, sino a grupos de poder dominados por el imperio norteamericano.

El Jefe de Estado vertió anoche estas expresiones durante la presentación del libro titulado «La paz en Colombia», que fue escrito por el ex presidente de Cuba, Fidel Castro, evento que aprovechó la oportunidad para relacionar la mediación de la Iglesia Católica con los interese del denominado «imperio».

«El imperio se alimenta de los conflictos, no les importa resolverlos. Siento que algunos mediadores son herramientas del imperio. Cuando yo pertenecía a los sectores sociales y habían conflictos, la Iglesia Católica llegaba incluso en avión al sector del problema para ser mediador», manifestó en hall de Palacio Quemado.

«Los mediadores no son neutrales porque si lo fueran no estarían contribuyendo a la solución de conflictos. Los miembros de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) se llamaban mediadores cuando los sectores sociales arrinconaban al Estado, pero cuando el Estado arrinconaba al pueblo no hay mediador», expresó el mandatario.

Cáceres defiende lucha antidrogas

Para el viceministro de Defensa Social y ex dirigente cocalero del Chapare, Felipe Cáceres, «el Cardenal entra en un plano que no son sus competencias y entra al plano político indicando que en Bolivia manda el narcotráfico, (eso es) falso».

El funcionario gubernamental dijo que el Poder Ejecutivo «está redoblando sus esfuerzos» en la lucha contra el narcotráfico tras la suspensión de DEA (Drug Enforcement Administration, en inglés) y descalificó las apreciaciones del líder de los católicos.

Las operaciones de esta agencia del Departamento de Justicia de los Estados Unidos dedicada al la lucha contra el contrabando y el consumo de drogas fueron aplazadas por el presidente Evo Morales.

El viernes, presuntos narcotraficantes atacaron a una patrulla policial en el trópico de Santa Cruz y dieron muerte a un policía y otros cinco resultaron heridos.

Este hecho generó críticas por parte de la oposición parlamentaria y regional a la estrategia de lucha del gobierno de Morales contra narcotraficantes y las sustancias controladas.

El viceministro Llorenti explicó que en lo que va de este año, se incautaron 27 toneladas de drogas que es una cantidad superior a las decomisadas en 2006 y 2007. También dijo que se erradicó más de 5.300 hectáreas de coca excedentaria, sobre una meta de 5 mil comprometidas con la comunidad internacional.

Sacha Llorenti afirmó también que «cada vez que escuchamos al cardenal Julio Terrazas, extrañamos mucho más la voz de Luis Espinal, y la voz de sacerdotes como Mauricio Lefevre». Ambos curas se opusieron al régimen dictatorial.

Esta es la segunda ocasión que el Gobierno declara su malestar por declaraciones del Cardenal. Hace dos semanas, el Ejecutivo salió al paso para calificar el informe de Julio Terrazas ante el Papa Benedicto XVI de «posición política». La autoridad dijo que el proyecto de Constitución Política no expresa el sentir de todos los bolivianos.

El Cardenal divide a los del Gobierno

El Cardenal dijo en su homilía que Bolivia se había convertido en un espacio dominado por los narcotraficantes. Dos viceministros atacaron a la autoridad y Rada prefirió ver el lado positivo.

El Nuevo Día

Existen contradicciones entre autoridades de Gobierno por la homilía del cardenal Julio Terrazas. Mientras el viceministro de Movimientos Sociales, Sacha Llorenti y el de Defensa Social, Felipe Cáceres, atacaron duramente al purpurado por haber identificado un “dominio peligroso del narcotráfico en el país”. El ministro de Gobierno, Alfredo Rada, destacó el lado positivo y resaltó la intención de unir a todos en la lucha.

El pasado domingo el Cardenal pidió a los bolivianos «estar atentos y despiertos», al lamentar que «nuestro país se va convirtiendo en el espacio donde están dominando los narcotraficantes, sin Dios y sin ley». Además convocó a hacer los esfuerzos para que Bolivia no sea el centro donde se acumule la droga, el crimen y la maldad.

El primero en reaccionar fue el viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Sacha Llorenti, quien calificó al Cardenal nuevamente de “jerarca” y con una posición política, acusándolo de defender a los terratenientes y a los separatistas.

La autoridad gubernamental añadió que varias acciones del Cardenal han demostrado que está alineado con la oposición, recriminando que la Iglesia no se pronunció por las tomas de instituciones.

Es la segunda vez que Llorenti ataca a Terrazas, La primera fue cuando el prelado elevó un informe al Papa sobre las acciones inadecuadas para realizar el proceso de cambio en Bolivia.

Para el viceministro de Defensa Social, Felipe Cáceres, las observaciones del Cardenal sobre el crecimiento del narcotráfico son falsas.

«Lamento mucho que el Cardenal (…) entre en el plano que no es sus competencias, y entre al plano político indicando que en Bolivia manda el narcotráfico».

Por su parte el ministro de Gobierno, Alfredo Rada, quien es la principal autoridad en materia antidrogas y seguridad, destacó que las declaraciones de Terrazas es una “cristiana preocupación que todos compartimos”.

El Ministro negó que el Cardenal haya dicho que existe narcotráfico y aclaró que sólo señaló “el peligro que eso suceda”. Además destacó la intención de unir los esfuerzos para luchar contra el narcotráfico. “La recibo como una cristiana preocupación que comparto plenamente las palabras del Cardenal”, dijo Rada.

“Si le hace el guante que se lo chante”, respondió el vocero del Cardenal en Santa Cruz, Marcial Chupinagua sobre los cuestionamientos gubernamentales.

contradicciones

Sacha Llorenti • “No coincidimos con las posiciones políticas de este jerarca de la Iglesia Católica, su opción es defender aquellos terratenientes y posiciones separatistas”.

Felipe Cáceres • «Lamento mucho que el cardenal Julio Terrazas (…) entre en el plano que no es, yo diría, sus competencias, y entre al plano político indicando que en Bolivia manda el narcotráfico».

Alfredo Rada • “Lo que habría dicho que hay el peligro que aquello suceda, yo por supuesto creo que frente al narcotráfico debemos estar siempre en alerta y yo suscribo plenamente cuando el Cardenal dice que debemos aunar esfuerzos en la lucha”.

El Gobierno acusa al Cardenal y éste dice que no hace política

El viceministro Cáceres le desautorizó a emitir opiniones sobre narcotráfico.

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Posición: el viceministro Llorenti, ayer en la sala de prensa del Palacio

La Prensa

Ésta es la segunda ocasión que el Gobierno declara su malestar por declaraciones del Cardenal.

El Gobierno acusó ayer al cardenal Julio Terrazas de estar alineado con sectores “separatistas” de la oposición y le negó “competencias” para hablar de asuntos políticos después de que el domingo éste dijera que los narcotraficantes dominan el país. La Iglesia Católica respondió que con estos ejemplos no hace política.

El viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Sacha Llorenti, en conferencia de prensa realizada ayer en el Palacio Quemado, manifestó que las acciones del clero demuestran que Terrazas está alineado con la oposición del país y que Bolivia cumplió la promesa de luchar contra el narcotráfico con resultados satisfactorios respecto de las anteriores administraciones.

“No coincidimos con las posiciones políticas de este jerarca de la Iglesia Católica, su opción es defender a aquellos terratenientes y posiciones separatistas”.

La autoridad aclaró que sus críticas no están dirigidas contra la institucionalidad de la Iglesia Católica, sino contra la jerarquía de esa entidad que, según Llorenti, expresó posiciones políticas.

Un comunicado divulgado anoche por la Oficina de Prensa de la Conferencia Episcopal de Bolivia señala que cuando en una homilía la Iglesia da ejemplos de hechos o situaciones específicas, “no hace política”, sino que su misión consiste en “reflexionar sobre la palabra de Dios y sacar orientaciones prácticas para la misma realidad que vivimos”.

En otro párrafo del documento indica que “esperamos que estas declaraciones no sean un intento de sembrar división en la Iglesia que tiene como rasgo fundamental la unidad”, y niega que esta institución no se haya pronunciado sobre los hechos de violencia en el país.

El contraataque del Poder Ejecutivo surgió tras la declaración del purpurado, durante su homilía del domingo, en sentido de que Bolivia “se va convirtiendo en el espacio donde están dominando los narcotraficantes, sin Dios y sin ley”.

Para el viceministro de Defensa Social y ex dirigente cocalero del Chapare, Felipe Cáceres, “el Cardenal entra en un plano que no son sus competencias, y entra en plano político indicando que en Bolivia manda el narcotráfico, (eso es) falso”.

El funcionario gubernamental dijo que el Poder Ejecutivo “está redoblando sus esfuerzos” en la lucha contra el narcotráfico tras la suspensión de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) y descalificó las apreciaciones de la autoridad eclesial.

Las operaciones de esta agencia del Departamento de Justicia de los Estados Unidos dedicada a la lucha contra el tráfico y consumo de drogas fueron aplazadas por el presidente Evo Morales.

El viernes, presuntos narcotraficantes atacaron a una patrulla policial en el trópico de Santa Cruz y mataron a un agente e hirieron a otros cinco.

Este hecho generó críticas por parte de la oposición parlamentaria y regional a la estrategia de lucha del Gobierno de Morales contra los narcotraficantes y las sustancias controladas.

El viceministro Llorenti explicó que en lo que va de este año se decomisaron 27 toneladas de droga que es una cantidad superior a las incautadas en 2006 y 2007. También dijo que se erradicaron más de 5.300 hectáreas de coca excedentaria, sobre una meta de 5.000 comprometidas a la comunidad internacional.

Sacha Llorenti afirmó también que “cada vez que escuchamos al cardenal Julio Terrazas, extrañamos mucho más la voz de Luis Espinal, y la voz de sacerdotes como Mauricio Lefevre”. Ambos curas se opusieron al régimen dictatorial.

Ésta es la segunda ocasión que el Gobierno declara su malestar por declaraciones del purpurado. Hace dos semanas, el Ejecutivo salió al paso para calificar el informe de Julio Terrazas ante el papa Benedicto XVI de “posición política”. La autoridad eclesial dijo que el proyecto de nueva Constitución Política del Estado no expresa el sentir de todos los bolivianos.

Terrazas es elegido como personaje “influyente”

El cardenal Julio Terrazas fue elegido por el diario español El País entre las 100 personalidades iberoamericanas más influyentes del año 2008 porque, según explica el columnista y experto en política internacional de ese medio Miguel Ángel Bastenier, ”nadie mejor que el cardenal Terrazas (…) para mediar en el conflicto boliviano entre el poder central del presidente Evo Morales y los autonomistas de Santa Cruz”.

La nota titulada El presbítero diplomático, que fue publicada en la edición digital de El País, señala que Terrazas, “el presbítero, hoy arzobispo de la propia Santa Cruz y en varios periodos presidente de la Conferencia Episcopal, tiene impecables credenciales democráticas, ilustradas en su oposición a la dictadura del general Banzer en los setenta, y estos años ha sabido evitar el choque frontal con el Gobierno, pese a que la futura Constitución desestablece a la Iglesia Católica como religión oficial del país”.

Según la agencia ANF, la autoridad de la Iglesia Católica, a tiempo de expresar su satisfacción por haber sido elegido entre los 100 personajes iberoamericanos del año 2008, convocó a los bolivianos a convertirse en sembradores de paz, concordia y armonía para aportar al bienestar común.

“Hay que agradecer a quienes se han fijado en los actos y testimonios que estamos dando en estos momentos y que realmente todos debemos convertirnos en sembradores de la paz, concordia y armonía. Yo recibo con gratitud, pero también con la responsabilidad que hay que continuar haciéndola no sólo en nombre personal, sino en nombre de todos los hermanos de Bolivia”. Terrazas fue acusado ayer de tener vínculos con la oposición “separatista”.

Los hechos

El 4 de mayo, el Cardenal votó en el referéndum por el Estatuto Autonómico de Santa Cruz.

Esa consulta se realizó de forma ilegal sin el consentimiento del Congreso y la Corte Electoral.

Semanas antes, la autoridad eclesial dijo que no había servidumbre en el Chaco.

El Gobierno sostuvo, por su parte, que en Alto Parapetí había esclavos en las haciendas.

En el Vaticano, Terrazas dijo que el proyecto de Constitución no expresa el sentimiento del país.

El Ejecutivo salió al paso y señaló que ese informe es político y que fue elaborado por el clero.