Termómetro político

El nuevo Día

La semana que comienza y la subsiguiente, serán las últimas dos del año en materia política. A partir de mediados de diciembre, la Navidad pondrá a la política en un segundo plano.



I. La semana pasada

La semana pasada trajo tres cosas en política: campañas, persecuciones y malas noticias económicas.

1. Campañas. La campaña del SÍ es potentísima. Como siempre, el MAS tira la casa por la ventana. Un despliegue de plata, propaganda y movilización, extraordinario. La campaña masista confirma su estrategia de inicio: ya está conquistada La Paz y la Bolivia andina, ahora hay que conquistar Santa Cruz y la medialuna; para eso, el MAS opta por convertirse al autonomismo. Esto puede fracasar porque es de verdad difícil que los cruceños crean -así de pronto- en la conversión del MAS. Pero el MAS seguirá intentándolo, ya que, con sus nuevo autonomismo, tiene poco que perder: al fin y al cabo en La Paz ya tiene el voto asegurado y si no le va bien en Santa Cruz con el discurso autonomista, igual tiene asegurada la victoria nacional con el voto paceño y andino. De cualquier modo, ayuda mucho a la estrategia masista de presentarse como militante de la autonomía, el que Percy Fernández y otros autonomistas salgan a decir que apoyan la constitución del MAS.

Por su parte la campaña por el NO a la constitución del MAS, sólo es sostenida por dos organizaciones: el Comité pro Santa Cruz y por la FUL. Desde luego hay mucha ciudadanía que de modo disperso se pronuncia por el NO, pero institucionalmente, los pocos eventos de la campaña por el NO, son eventos de los cívicos y de los estudiantes universitarios. Quizá eso explica el renovado esfuerzo gubernamental por perseguir a los cívicos en general y en Santa Cruz a Branko Marinkovic en particular.

2. Persecuciones políticas. Precisamente, esta semana el termómetro de las persecuciones se calentó. La estrategia gubernamental para las persecuciones se centra en Tarija. Pando ya está asegurado y ahora es el turno de Tarija. El ex presidente del comité cívico de Tarija fue detenido. Probablemente en un pacto con el propio gobierno. No sería raro que después de Tarija venga Santa Cruz. El Gobierno, definitivamente apuesta a aniquilar los movimientos cívicos por la vía de la represión. Es decir, el Gobierno quiere un referendo (por su constitución) y un 2009 (año de la reelección de Evo Morales) sin oposición alguna.

3. Malas noticias en la economía. Otra semana cargada de noticias muy duras y pesimistas sobre la economía de los bolivianos. Por un lado, está confirmado que la falta de diesel ha resultado fatal para la producción de alimentos en el país. Las políticas del Gobierno sobre abastecimiento de combustibles, no sólo no han funcionado, además, han contribuido a empeorar la situación. La primera víctima del desabastecimiento de diesel y de combustibles son los productores de alimentos, la segunda y más grave, serán todos los ciudadanos, porque este año, habrá menos alimentos y así, el precio de la canasta familiar seguirá subiendo.

La otra mala noticia es que se consolida la cancelación del ATPDEA. Los americanos creen que el gobierno del MAS no está luchando bien contra las drogas. Y en consecuencia, no quieren hacer negocios con los bolivianos. El resultado es que exportaremos menos, habrá menos producción y obviamente, menos empleos. Por ejemplo, en El Alto.

Finalmente está la mala noticia de la quiebra de muchas empresas mineras debido a la caída del precio de los minerales. Lamentablemente, hasta fin de año, veremos muchos mineros desempleados. La movilización de las esposas de los mineros en crisis, mostrándose semidesnudas frente a las oficinas del Gobierno en protesta por la quiebra de la minería, muestra la dimensión del asunto. Se vienen muy malos tiempos para el altiplano minero.

II. La semana

que comienza

La semana que comienza y la subsiguiente, serán las últimas dos del año en materia política. A partir de mediados de diciembre, la Navidad pondrá a la política en un segundo plano. Por eso, la semana que viene veremos un acelerón aún más fuerte de la campaña gubernamental por el SÍ. De igual modo, veremos cómo se profundiza la persecución contra los cívicos. Es probable que el MAS le regale a Santa Cruz una Navidad cargada de persecuciones políticas.

La temperatura política

En una escala del 1 al 10, donde 1 es mucha estabilidad política y 10 mucha inestabilidad, ¿cómo califica UD la situación actual? Ahora está en un 7. Sube la temperatura, no sólo por las confrontaciones propias de la campaña, sino también porque el Gobierno intensifica la persecución política contra sus adversarios.