La víctima tenía un contrato con YPFB (2008). El inquilino sería pariente de Santos Ramírez. Un testigo del caso O’Connor fue torturado.
“Este caso es muy delicado y peligroso, involucra a personas de poder. No investiguen más”.
Jefe policial de la entidad del orden.
• EL IDENTIKIT • La FELCC sospecha que él es el victimador de O’Connor. Tendría 40 años y sería de estatura mediana.
La Razón
El fiscal asignado dijo que el dinero (450 mil dólares) era llevado a la casa de la avenida Tejada Sorzano, donde se iba a “recabar información”.
El atraco del martes, en el que el empresario Jorge O’Connor D’arlach perdió la vida tras recibir un impacto de bala, suelta pistas de una supuesta coima que salpicaría a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB).
El martes, al menos cinco delincuentes irrumpieron en una casa, sobre la avenida Tejada Sorzano, en la que la víctima llegó con 450 mil dólares, junto a otras tres personas. Un sujeto le disparó en el cuello y minutos después falleció en un hospital.
El monto de dinero que el empresario O’Connor llevaba en un maletín junto con una computadora portátil habrían servido para pagar una comisión por la adjudicación de una licitación con YPFB, según informaron fuentes de la investigación y otras judiciales conocedoras del caso.
Así lo confirmaron al menos cuatro fuentes policiales y otra relacionada con la Fiscalía, que pidieron el anonimato y que dijeron que el tema es muy delicado porque toca a círculos de poder.
El fiscal encargado del caso, Luis Mamani, informó de manera oficial que O’Connor llegó hasta ese lugar con el fin de “hacer una transferencia de información que debía obtenerla de una computadora de la persona que tiene su casa en la Tejada Sorzano”.
El representante del Ministerio Público no quiso admitir una compra de información, aseveró que llegó para recabar datos relativos a construcciones. “Del dinero no se tiene conocimiento”.
Anoche, Cadena A informó que el inmueble es del cuñado del presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Santos Ramírez. Dos fuentes policiales señalaron que había indicios en ese sentido, aunque oficialmente no se confirmó el mencionado dato.
La vivienda a la que arribó O’Connor resulta ser “el origen y el destino del problema”, según aseveró una fuente policial. Pues ahí, alguien recibiría de la víctima esa suma de dinero.
Otro jefe policial dijo a este medio que el caso es muy delicado y peligroso porque involucra a personas con poder. “Ya no investiguen más”, alertó.
O’Connor arribó el martes en la mañana de Santa Cruz, se alojó en el hotel Presidente y luego se encontró con tres personas más, entre ellas Fernando Córdova, quien sería el representante de su empresa petrolera. Horas más tarde sacaron $us 450 mil del Banco Unión, en la avenida Camacho, y en una vagoneta llegaron a la casa de Miraflores, sin ningún resguardo policial.
Otras fuentes, tanto policiales como civiles, a quienes este medio consultó sobre este hecho, revelaron que éste es complicado.
Sin embargo, la historia de este hecho no empezó el martes. Hace una semana, la víctima habría tenido una reunión con Córdova y con una tercera persona en un café de La Paz para concretar el pago por la adjudicación de la licitación con YPFB, según fuentes cercanas a la Fiscalía.
El martes, O’Connor habría llegado para sacar el dinero y llevarlo a una persona que lo esperaba en la casa de la Tejada Sorzano, admitió la fuente.
Dos personas que trabajan por el lugar del crimen indicaron que en esa casa había un inquilino que sólo llegaba por temporadas. Otro vecino contó que el tercer piso estaba ocupado por un varón, pero “desde ayer ya no está aquí”.
Este medio se comunicó con la oficina de prensa de YPFB para consultar si había un contrato nuevo con la empresa Catler Uniservice, de la que O’Connor era presidente. Desde allí informaron ayer a La Razón que desconocían cualquier vínculo.
Sin embargo, en julio del 2008, O’Connor firmó un contrato con el presidente de YPFB, Santos Ramírez, para la construcción de una planta de Gas Licuado de Petróleo (GLP). El costo es de 86,35 millones de dólares. Días atrás, la petrolera estatal hizo efectivo un pago de alrededor de 4,5 millones de dólares, según ANF.
Fernando Córdova, quien acompañaba a O’Connor el momento del atraco, salió ileso. Ayer denunció que fue secuestrado en la mañana cuando salía de su casa y que fue llevado a La Cumbre, donde lo golpearon brutalmente, supuestamente para que brinde datos sobre el hecho criminal.
Familiares de Córdova informaron a este medio que éste es gestor de una empresa petrolera, pero que no conocían otras actividades que realizaba.
El comandante departamental de la Policía, coronel Raúl Mantilla, afirmó que dentro de la pesquisa se debe indagar a todas las personas que hayan tenido contacto con O’Connor.
De acuerdo con fuentes de la investigación, las cámaras de seguridad del Banco Unión grabaron el momento en que sacaron el dinero. Según informaron, O’Connor no fue quien recibió el dinero.
Lo que tampoco nadie confirmó es el lugar de dónde salió el dinero, de bóvedas o de las cajas.
El gerente regional de la entidad financiera, Iver Vargas, sostuvo ayer que tiene restricción para brindar información a los medios de comunicación.
Por otra parte, ni la Policía ni la Fiscalía dieron datos sobre a quién pertenecía el dinero, si a la empresa Catler Uniservice o al empresario O’Connor.
El viceministro de Seguridad Ciudadana, general Alberto Castillo, detalló que la Policía está en plena indagación de este caso y que no se puede dar ningún dato por el momento.
Ayer hubo un inusual movimiento en las oficinas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC). Castillo se reunió en privado, tanto en la mañana como en la noche, con jefes policiales que llevan adelante el caso. Las autoridades del orden se mostraron herméticas en revelar oficialmente información a los medios de comunicación.
Córdova participó el martes por la tarde de la reconstrucción de los hechos. El fiscal Mamani no dio mayores detalles.
“O’Connor llegó al lugar para hacer una transferencia de información que obtendría de una computadora”.
LUIS MAMANI, fiscal a cargo del caso.
“Este caso es muy delicado y peligroso, involucra a personas de poder. No investiguen más”.
JEFE POLICIAL de la entidad del orden.
Denuncian que el colega del empresario fue secuestrado
Tres sujetos habrían encañonado ayer a Fernando Córdova en la puerta de su domicilio, lo habrían torturado y luego abandonado en La Cumbre. El herido tiene 25 días de impedimento.
• LAS PESQUISAS • El martes, horas después del asesinato, se realizó la reconstrucción. En la foto aparece Fernando Córdova (de terno), quien ayer fue supuestamente secuestrado y golpeado.
La Razón
Fernando Córdova, uno de los acompañantes de Jorge O’Connor D\’arlach durante el atraco del martes, denunció mediante su abogado que ayer en la mañana fue secuestrado y torturado por tres sujetos que luego lo abandonaron en La Cumbre. Córdova fue internado en el hospital Arco Iris de La Paz.
“Él salió de su casa (en la zona de Miraflores) a las 7.45, lo encañonaron tres personas y lo subieron a una vagoneta, le pusieron una gorra y encima una bolsa, y se lo llevaron sin rumbo. Le hacían preguntas en relación al dinero, lo golpearon y lo abandonaron en La Cumbre, y un vehículo de transporte público lo auxilió”, relató Jhonny Castelú, abogado de Córdova.
La mañana del martes, O’Connor perdió la vida al recibir un impacto de bala en el cuello. El hecho ocurrió cuando cinco sujetos lo encañonaron en la puerta de un domicilio de la calle Tejada Sorzano y se robaron un maletín con 450 mil dólares, que minutos antes fueron retirados de la oficina central del Banco Unión.
Dos de los delincuentes se subieron a una motocicleta roja y escaparon, mientras que los otros tres abordaron un vehículo y se fueron tras la motocicleta.
Según el defensor legal, Córdova, “quien trabajaba con O’Connor y era representante legal de la empresa Catler Uniservice SRL”, debía llegar a las oficinas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) para prestar su declaración, sin embargo, al salir de su casa lo habrían secuestrado.
“A las 12.30 me entero a través de una llamada de que estaba vivo y que lo habían secuestrado. Él llamó a Roberto —su asistente— y es él quien me avisa”, acotó Castelú. “Inmediatamente vamos a su casa y lo vemos maltrecho, y así como estaba lo hemos llevado a la FELCC para que el jefe de División lo vea”, explicó.
Castelú afirmó que en la primera valoración de un médico forense, su cliente presentaba golpes en el cuerpo, traumatismo encéfalo craneal, lesiones en el hombro y 25 días de impedimento. “Se lo lleva al hospital y el diagnóstico es que tiene rotos los tímpanos, varias lesiones y todavía lo evalúan”, añadió.
Ayer en la tarde, los investigadores llegaron hasta la sala donde se recuperaba Córdova y al salir, dijeron que tomarán sus declaraciones el viernes por el estado de salud en el que se encontraba. No obstante, en la FELCC indicaron que un equipo se trasladó hasta La Cumbre, donde Córdova habría sido abandonado, para constatarlo.
Según fuentes allegadas a la investigación, todavía no se conoce la procedencia del dinero y por qué fue extraído del banco, sin embargo, no se descarta que el crimen haya sido provocado por uno de los compañeros de trabajo de O’Connor. El dato no fue corroborado oficialmente por la Policía.
Los investigadores señalaron que no emitirán ninguna información sobre el caso por ser una investigación “de carácter especial”, hasta no obtener resultados concretos de la pesquisa.
Por su parte, el abogado de Córdova dijo que solicitará a la Policía garantías tanto para aquél como para su familia.
El retrato hablado del asesino
La Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) difundió ayer el identikit de la persona que disparó y mató al empresario Jorge O’Connor.
Según los datos, se trata de un hombre de 40 años aproximadamente, contextura robusta y estatura mediana.
Una de las características que se destacan es que tiene “bigotes espesos”.
En el momento del atraco vestía ropa color beige y tenía una bufanda en el cuello. Su rostro es redondo y tiene tez morena.
El martes, junto a otros cuatro individuos, interceptó al empresario tarijeño cuando ingresaba a un domicilio en la avenida Tejada Sorzano de La Paz, con 450 mil dólares que había retirado del Banco Unión.
Según los testigos, le quitó el maletín con el dinero a O’Connor, luego lo tumbó al piso y le disparó con una escopeta corta que estaba envuelta en una caja de color rosado, que fue encontrada en la escena del crimen. La Policía aseguró que otros cuatro cómplices también están prófugos.
Hallan la moto de delincuentes
La Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) encontró la motocicleta Honda 250R, que fue utilizada por los delincuentes que asesinaron el martes a un empresario y luego robaron 450 mil dólares.
La motocicleta es de color de rojo y tiene franjas y el asiento de color negro. La banda delincuencial la abandonó en la zona de Villa Fátima.
La Policía determinó que es la que se utilizó para cometer el crimen porque tenía manchas de sangre en el tanque de combustible.
Según la explicación de los investigadores del robo agravado, las pericias que se realizan en la motocicleta ayudarán a identificar a los presuntos autores.
De acuerdo a declaraciones que Erbol recogió, el comandante general de la Policía Nacional, general Miguel Gemio, señaló que los autores del crimen serían integrantes de una banda internacional que opera en el país y anunció que la FELCC extremará todos los esfuerzos para capturar a los atracadores.
Hasta ayer, total hermetismo rodeó a los indagadores.
DATOS
El velorio • El empresario de 37 años Jorge O’Connor D’arlach fue velado ayer en su ciudad natal, Tarija. Según reportes de los medios de comunicación locales, los familiares y amigos de la víctima no quisieron hablar del tema.
El traslado • El cuerpo sin vida del gerente general de la empresa Catler Uniservice SRL fue trasladado en un vuelo especial hasta Tarija. Sus familiares fueron quienes lo gestionaron.
La familia • Según la prensa local, O’Connor era el hijo del actual rector de la Universidad Privada Domingo Savio en Tarija y pertenecía a una familia conocida. El hecho habría conmovido a muchos habitantes de Tarija.
Los negocios • De acuerdo a reportes periodísticos, el empresario realizaba viajes constantes por temas laborales a ciudades del eje troncal del país, principalmente a Santa Cruz de la Sierra y La Paz.
Crimen. Fernando Córdova fue raptado y tiene varias costillas rotas.
Tres sujetos torturan a testigo de asesinato de Jorge O’Connor
La Fiscalía se pregunta por qué la víctima llevaba tanto dinero en efectivo
Identikit: retrato hablado del presunto asesino de Jorge O’Connor
La Prensa
Fernando Córdoba fue internado en un hospital. El informe forense le da un impedimento de 25 días. El Comandante General de la Policía cree que delincuentes extranjeros cometieron el delito.
Fernando Córdoba, quien guiaba el martes el vehículo en el que Jorge O’Connor llegó al lugar donde sería asesinado, fue secuestrado y torturado ayer por un grupo de desconocidos.
Después de producirse la ejecución del ingeniero O’Connor, el fiscal asignado al caso, Luis Mamani, dispuso que los acompañantes de la víctima pernoctasen en sus domicilios para presentarse a las 08.30 de ayer en la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), para continuar respondiendo el interrogatorio correspondiente.
Al acto asistieron Gonzalo A.; el hermano del occiso, Miguel O’Connor, y Javier N., quien es familiar del primero de los nombrados; pero no llegó Fernando Córdoba.
El abogado de la familia de la víctima, Johnny Castelú, recibió la noticia de que Córdoba no acudió a cumplir su deber cuando estaba a punto de emprender vuelo a Tarija junto con los restos del ingeniero petrolero.
Castelú se dirigió al centro de la ciudad, a donde llegó alrededor de las 10.00, cuando Mamani preguntó por el paradero del testigo en el domicilio de éste. Los familiares le explicaron que había salido con destino a la FELCC antes de las 08.30.
Alrededor de las 12.30 fue dado por perdido y, por la tarde, un llamado anónimo advirtió de que se encontraba en la Cumbre del camino a Yungas, “vivo, aunque lastimado”. Castelú y otras personas fueron a buscarlo y lo encontraron muy lesionado.
El jurista informó que “así como lo encontramos, lo llevamos a la FELCC, donde fue entrevistado por los investigadores, antes de ser derivado a un consultorio forense”.
La valoración determinó 25 días de impedimento. Fue trasladado al hospital Arco Iris.
El diagnóstico preliminar da cuenta de policontusiones, la rotura de un tímpano, golpes en la cabeza, los genitales y las costillas fracturadas.
“Apenas puede hablar y está en muy malas condiciones generales”. Castelú refirió que como consecuencia del hecho “abrimos el caso”, que consiste en la denuncia formal ante la Policía para que inicie investigaciones.
Córdoba, sin embargo, pudo relatar al abogado y a los detectives que tres personas lo secuestraron cerca de su domicilio, lo introdujeron por la fuerza en un vehículo, le cubrieron la cabeza con una capucha, lo enmanillaron y lo llevaron a la Cumbre, donde fue golpeado.
Sus captores pretendían saber dónde estaba el resto del dinero, aunque un reporte oficial de la FELCC da cuenta de que los malhechores arrebataron los 450.000 dólares que poco antes O’Connor había retirado de una entidad bancaria y que llevaba consigo en dos maletines.
Castelú informó el martes que poco antes la empresa del occiso había recibido un pago de Yacimientos por un servicio que presta a la estatal petrolera.
El fiscal Luis Mamani se preguntó públicamente por qué el fallecido llevaba tan importante cantidad de dinero en efectivo, si este tipo de transacciones se efectúa a través de transferencias bancarias entre cuentas.
El comandante nacional de la institución del orden, Miguel Gemio, atribuyó el atraco, que calificó como “el más importante” producido en el país, como obra de una banda de delincuentes extranjeros.
“Este tipo de acciones no se ha presentado en la ciudadanía con tanta fuerza. Vemos que de por medio hay algunas organizaciones internacionales que han incursionado como rebalse de otros países y nosotros estamos tomando contacto con Interpol e intercambiar información”.
Mientras tanto, alrededor de las 17.00 de ayer, los restos de O’Connor fueron sepultados en Tarija, mientras sus familiares, profundamente acongojados, se limitaron a pedir que el caso sea resuelto y se haga justicia.
La planta de Río Grande
El senador Carlos D’Arlach Lema confirmó ayer que, después de haber presentado una solicitud de informe escrito al Poder Ejecutivo, comprobó que Jorge O’Connor era ejecutivo de la sociedad accidental Catler Uniservice S.R.L., que es responsable de la construcción de la planta separadora de líquidos de Río Grande.
“Ése fue el único de los pedidos que el Gobierno me respondió oportunamente”.
En julio del año pasado, el presidente de Yacimientos, Santos Ramírez, firmó el contrato de concesión de obra con el argentino Agustín Melano, presidente de Catler Internacional, por un monto de 86.315.000 dólares.
La Agencia de Noticias Fides informó que días antes de producirse el asesinato de O’Connor, la estatal petrolera hizo un desembolso por 4,5 millones de dólares en favor del mencionado consorcio.
O’Connor llevaba en efectivo un monto equivalente al 10 por ciento de esa cantidad al domicilio privado de Gonzalo A., quien es primo de la esposa de la principal autoridad de Yacimientos, Santos Ramírez. La Fiscalía investiga las razones de esta situación.
Una moto y el piloto equivocados
El martes por la tarde, una patrulla del 110 detuvo a Johnny Q., quien conducía una motocicleta de color rojo cerca del Complejo Deportivo de Munaypata. El piloto recibió la orden de detenerse, pero ignoró la instrucción y se dio a la fuga. Los patrulleros pronto le dieron alcance y lo condujeron, como sospechoso, a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC).
Luego fue interrogado, pues en una moto parecida a la suya huyeron dos de los criminales que ejecutaron por la mañana a Jorge O’Connor. Sin embargo, sólo se pudo establecer que el joven había huido porque manejaba sin portar licencia para conducir.
Fue dejado en libertad la mañana ayer y poco después efectivos policiales hallaron una motocicleta similar en la zona de Pokeni, cerca de la avenida Periférica. El motorizado tiene manchas de sangre que son analizadas en el laboratorio de la FELCC.
Pistas
Fernando Córdoba fue llevado a la Cumbre cuando se dirigía a la FELCC.
Sus captores le preguntaban insistentemente dónde estaba el resto del dinero.
La Policía halló la motocicleta en la que al parecer huyeron los malhechores.