La Iglesia rechaza la ofensiva presidencial

Pelea. La Conferencia Episcopal advirtió al Presidente que la Iglesia Católica sigue siendo una institución importante en la vida espiritual de los bolivianos.

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La Iglesia Católica lamenta el nuevo ataque de Morales



Dice que su credibilidad está en la fe de sus feligreses

La Prensa

La confrontación entre el oficialismo y el clero católico se agudizó en la pasada gestión.

La Iglesia Católica de Bolivia lamentó este viernes el nuevo ataque del presidente Evo Morales y afirmó que esa comunidad religiosa tiene como base de “credibilidad” la fe que profesa la mayoría de los bolivianos.

El Jefe de Estado dijo el jueves, durante su participación en el Foro Social Mundial de Brasil, que “en Bolivia aparecieron nuevos enemigos, ya no sólo la prensa de la derecha, sino grupos de la Iglesia Católica, los jerarcas de la Iglesia Católica que son enemigos de las transformaciones pacíficas”.

Las palabras de Morales fueron dichas ante una multitud en la que se encontraban líderes de movimientos religiosos como la Pastoral de la Tierra y el ex obispo católico Fernando Lugo, actual presidente del Paraguay.

El secretario de la Comisión de Comunicación Social de la Conferencia Episcopal de Bolivia (CEB), José Rivera, dijo ayer que “se pueden realizar muchos discursos, muchas referencias y alusiones, pero lo que no se puede desconocer es que la Iglesia sigue siendo una institución importante en Bolivia y su base de credibilidad está precisamente en la fe que profesa un importante porcentaje de los bolivianos”.

Lamenta las acusaciones

Según el Sistema de Difusión Iglesia Viva, Rivera añadió que “lamenta que estas acusaciones” sean frecuentes y persistentes, más aún en un foro internacional; sin embargo, la Iglesia Católica toma esto con mucha serenidad y mucha objetividad.

Rivera recalcó que la Iglesia Católica en Bolivia “no es solamente una religión o una institución, sino que es parte integral de la cultura, de la historia, de la identidad del país y por eso mismo la Iglesia permanecerá y seguirá fiel a su misión cumpliendo esa función tan importante de valorar aquello que va adecuado y en función del Reino de Dios y también condenando y denunciando todo aquello que no va con relación al proyecto del Reino de Dios”.

Hay contradicciones

Rivera comentó que tanto la opinión pública como la ciudadanía tienen conocimiento de cómo van y vienen “las declaraciones muchas veces contradictorias en el mismo Gobierno y autoridades”.

“Muchos de ellos —prosiguió—, incluyendo el Presidente de la República, han reconocido el valor y la importancia que tiene la Iglesia Católica, por tanto es difícil pensar Bolivia sin la Iglesia Católica, no porque la Conferencia Episcopal, el Cardenal (Julio Terrazas) o los obispos lo digan, sino simplemente porque es parte constitutiva de nuestra identidad y es valor presente y vivo en la gran mayoría del pueblo boliviano”.

Otras controversias

Evo Morales se quejó del cardenal Julio Terrazas, el 14 de enero de este año, con el nuevo nuncio apostólico, monseñor Giambattista Diquattro, a quien dijo: “Ahora (que) me diga el Cardenal que Bolivia está gobernada por el narcotráfico… ¡Qué grave! No quiero pensar que el Cardenal pueda sustituir al Departamento de Estado de Estados Unidos”.

Terrazas dijo, en abril de 2008, al papa Benedicto XVI que “no podemos estar contentos con que nos engañen diciendo que hay esclavitud”.

También comentó: “Con qué felicidad se derrama la suciedad entre nosotros, se nos habla de que hay lugares llenos de esclavos; pues nadie está de acuerdo con eso, pero que nos muestren la verdad, que nos digan dónde los encontramos. No es posible que sigamos condenándonos sólo con slogans, sólo con palabras”.

El 30 de noviembre de 2008, Terrazas dijo además: “Sin Dios y sin ley hay que hacer un esfuerzo para que Bolivia no sea el centro donde se acumule la droga, y con la droga, el crimen y la maldad”.

Esta declaración desató una ola de críticas del oficialismo en contra de la jerarquía católica y avivó el conflictos entre ambos.

Políticos le dicen a Evo que la fe no se cambia por decreto

El embajador de Bolivia en el Vaticano anunció cambios en los tratados con la Iglesia Católica

La Razón

Ante la insinuación del presidente Evo Morales de sustituir a la Iglesia Católica, oficialistas y opositores señalaron que no se puede cambiar la fe por decreto.

La Iglesia Católica lamentó esos ataques y dijo no entender el porqué del enojo del Presidente.
“La Iglesia lamenta este nuevo ataque, esta nueva sindicación o alusión de nuestro Presidente en un foro internacional; quisiéramos entender a qué obedece, porque es frecuente, persistente (los ataques) Estará enojado por algo”, señaló José Rivera, representante de la Conferencia Episcopal de Bolivia.

El último miércoles, el Jefe de Estado, durante un foro en Brasil, afirmó que los líderes de la Iglesia Católica son “enemigos” de los cambios políticos.

En las esferas políticas también causaron repercusión las acusaciones presidenciales. El cívico cruceño Branko Marinkovic afirmó que “los que no tienen fe piensan que cambiar la fe se hace con un decreto o con ley, la fe no la pueden cambiar ni con decreto, ni con ley, ni con referéndum”.

En el propio oficialismo hubo coincidencia en eso. “La fe es una creencia que uno tiene hacia algo, yo creo en Dios, en Jesucristo, y por lo tanto nadie puede cambiar mi fe ni por decreto, ni por ley”, afirmó el delegado presidencial en Cochabamba, Marco Carrillo.

El senador Ricardo Díaz, del MAS, justificó las acusaciones de Morales. “El Presidente no está atacando a la Iglesia, está atacando a la jerarquía de la Iglesia, esa jerarquía de la Iglesia que reza por el No, pero no por el Sí”.

En el otro frente, el senador Luis Vásquez (Podemos) pidió “al Cardenal, a los obispos de nuestra Iglesia y a más del 80% del pueblo boliviano que es católico, que sepan entender estas palabras como de quien viene… y recordar las enseñanzas de cuando querían crucificar a Cristo, él respondía: ‘perdónalos porque no saben lo que hacen’”.

Entretanto, el embajador de Bolivia en el Vaticano, Carlos de la Riva, en una entrevista en radio Fides, anunció que “el cambio que está viviendo Bolivia exigirá un nuevo compromiso entre la Iglesia y el Estado”, al referirse a los acuerdos y concordatos que tiene la Santa Sede con el Estado boliviano y que deberán ser cambiados, tras aprobarse el nuevo texto constitucional.

La Constitución

Antigua • La Carta Magna vigente señala que el Estado reconoce y sostiene a la religión católica, apostólica y romana, lo que le obligaba a tener una relación directa con ella.

Nueva • La actual Constitución señala que el Estado respeta y garantiza la libertad de religión y de creencias espirituales de acuerdo a sus cosmovisiones, por lo que se tendrá que modificar la relación entre la Iglesia Católica y el Estado.