Bolivia tiene hasta el 30 para apelar suspensión del ATPDEA. Ministro dice que no es prioridad. Los exportadores no encuentran mercados alternativos a las ventas que se hacían a EEUU.
• AFECTADA • Un obrero de Ametex en plena faena en El Alto. La empresa se perjudicó por el fin del ATPDEA.
La Razón
Este martes 30 de junio el Congreso de EEUU podría tratar el tema si es que el presidente Obama lo pide. Sin embargo, el Ejecutivo boliviano considera que no vale la pena realizar gestiones.
El Gobierno boliviano decidió sepultar las posibilidades de gestionar una ampliación de la Ley de Preferencias Arancelarias Andinas y Erradicación de Drogas (ATPDEA, en inglés), ya que la considera una “medida frágil con muchas vulnerabilidades”, dijo el ministro de Planificación del Desarrollo, Noel Aguirre.
Este martes 30 de junio el Congreso de Estados Unidos podría reconsiderar la ampliación del ATPDEA, suspendido desde el 15 de diciembre del 2008, siempre y cuando el presidente de Estados Unidos (EEUU), Barack Obama, así lo solicite.
Este pedido pasa porque el Mandatario estadounidense considere que Bolivia está realizando esfuerzos para combatir el narcotráfico y de las gestiones del gobierno del presidente Evo Morales. Ahora que el Ejecutivo desestimó cualquier gestión, el futuro es incierto. “No hay sentido de revivir el ATPDEA”, sentenció ayer Aguirre.
El senador republicano Charles Grassley (EEUU) opinó la semana pasada que no veía que Bolivia estuviese haciendo gestiones para convencer a su país de que realice algunas medidas.
“No estoy enterado de alguna acción tomada por el Gobierno de Bolivia que sugiera que ahora está cumpliendo sus obligaciones internacionales de lucha contra el narcotráfico. Si ése es el caso, entonces no veo cómo puede considerarse que Bolivia guarda conformidad con los criterios de elegibilidad del ATPDEA”.
En todo caso, Aguirre aseguró que Bolivia lo que busca es gestionar un nuevo acuerdo con EEUU y destacó que hay buena disposición para iniciar las negociaciones. “Precisamente la siguiente semana se va a hacer una discusión ya directa, entre otros, de este tema”.
El gerente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior, Gary Rodríguez, acotó que todo “depende de la voluntad de EEUU y de su Presidente”.
“Para que el Congreso de Estados Unidos decida la extensión del ATPDEA hasta el 31 de julio, está establecido que Obama dé un concepto favorable en relación a lo que está haciendo Bolivia en la lucha contra el narcotráfico”.
El ATPDEA permitía la exportación con aranceles bajos de algunos productos bolivianos, en especial de manufactura. Con la suspensión, las empresas se han perjudicado, sobre todo las textileras. Ante esto, el Gobierno ofreció mercados alternativos, entre ellos el venezolano; sin embargo, éste no ha dado resultado.
El IBCE informó que la suspensión contribuyó a la caída de las exportaciones a EEUU (23 millones de dólares hasta abril pasado), especialmente de textiles y manufacturas de cuero.
Las consecuencias más severas para el país se expresan en el cierre de pequeños talleres de confección y la caída del empleo.
El miércoles de la semana pasada, trabajadores de las fábricas de América Textil (Ametex) protestaron exigiendo mercados en el exterior. En tres de las cinco fábricas que componen a la empresa, la principal exportadora textilera a EEUU, quedaron sin trabajo al menos 1.430 obreros.
Exportador espera acuerdo
El presidente de América Textile (Ametex), Marcos Iberkleid, considera que no interesa cuál sea el acuerdo entre Bolivia y Estados Unidos, lo importante es contar con un convenio comercial que permita la exportación de los productos con las mismas condiciones que gozan otros países latinoamericanos.
“Lo que pedimos es tener las mismas condiciones de competitividad que los otros países. Si se llama ATPDEA o TPA o ABC no tiene importancia”.
“La idea es que podamos mirar al futuro, que no sea un plan de tres meses, que podamos ver a varios años un plan donde las empresas nos preocupemos de lo que tenemos que preocuparnos, de la producción y el empleo”.
Una comisión boliviana viajará en los próximos días a Estados Unidos. Según la agencia gubernamental ABI, se espera restablecer por completo las relaciones comerciales que beneficiarán a los exportadores.
MEDIDAS
Nuevo acuerdo • El Gobierno de Bolivia pretende gestionar con su par de Estados Unidos un nuevo acuerdo comercial que respete las diferencias de los mercados y que favorezca a ambos países.
Otras acciones • El ministro Noel Aguirre destacó además que ante el fin de la ley del ATPDEA, la administración del presidente Evo Morales ha buscado otros mercados, como el venezolano.
Bolivia tiene hasta el 30 para apelar suspensión del ATPDEA
Los exportadores no encuentran mercados alternativos a las ventas que se hacían a EEUU.
AGUIRRE DICE QUE NO ES LA PRIORIDAD
La Prensa
El 30 de junio vence el plazo para que Bolivia pueda renovar los beneficios de la Ley de Promoción Comercial Andina y de Erradicación de la Droga (ATPDEA) antes de su suspensión definitiva, sin embargo, el Ejecutivo restó importancia al hecho porque considera que existen alternativas de exportación.
Ese día será la última oportunidad que tenga el país para apelar la decisión del Gobierno estadounidense de suspender las preferencias para cueros y textiles, adoptada en diciembre de 2008 debido a la falta de colaboración en la lucha contra las drogas. La madera y joyería aún se benefician del Sistema Generalizado de Preferencias (SGP).
El ministro de Planificación del Desarrollo, Noel Aguirre, explicó que “el ATPDEA, si es posible, se va a seguir conversando, se va a seguir insistiendo, pero no es la única medida”, tampoco la prioridad.
Añadió que este tema será parte de la conversación en la reunión con el Gobierno de Estados Unidos que se desarrollará el lunes y martes próximos.
Para ese encuentro se prepara una comisión gubernamental. “Reconociendo las diferencias que existen entre el tamaño del mercado de Estados Unidos y nuestra producción, vamos a proponerles, y ya les hemos adelantado en la anterior reunión con (Thomas) Shannon, una relación mucho más equitativa y que sea favorable a ambos países”. Aseguró que se trabaja en medidas mucho más amplias, más sostenibles, porque el ATPDEA era muy frágil y vulnerable.
La suspensión del ATPDEA ya comenzó a tener efectos en América Textil (Ametex), donde unos 1.300 trabajadores quedaron desempleados y las ventas a Estados Unidos disminuyeron hasta en un 60 por ciento.
La Federación de Fabriles se declaró en emergencia y exigió al Gobierno la apertura de nuevos mercados para evitar más despidos.
Según datos que recoge el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) del U.S. Department of Commerce y la U.S. International Trade Commision, las exportaciones con ATPDEA alcanzaron en 2008 a 88,1 millones de dólares, un 44,9 por ciento más frente a los 60,8 millones de dólares logrados un año antes.
Desde el 15 de diciembre de 2008 Bolivia dejó de exportar a Estados Unidos en el marco de las preferencias andinas, a diferencia de Perú, Colombia y Ecuador.
Sin embargo, las exportaciones también gozan del SGP, bajo cuyo beneficio (arancel cero, menos para textiles) en el primer cuatrimestre de 2008 se logró vender 15,7 millones de dólares y este año, 38 millones de dólares.
El Gobierno abrió el mercado de Venezuela como alternativa a Estados Unidos, pero los exportadores se quejan de trabas y falta de pagos oportunos.
Ejecutivo apuesta por Ecuador
Entre el 8 y 9 de junio se reunió en Quito la Comisión Mixta Permanente de Coordinación Ecuador-Bolivia, en la que el Gobierno nacional formalizó su pedido de abrir ese mercado a toda la oferta exportable y suspender las salvaguardas que rigen desde enero.
El viceministro de Relaciones de Comercio Exterior, Pablo Guzmán, informó de la creación de una comisión binacional que analiza nuevas líneas de exportación nacionales para ampliar el comercio a los alimentos orgánicos y potenciar los textiles, la cerámica y la madera en muebles.
La autoridad señaló también que como parte de esta apertura se reiteró el pedido para que Ecuador suspenda la aplicación de salvaguardas a 627 productos de importación que, aunque no significan gran porcentaje de la exportación nacional, afectan a los textiles. Esta vez se lo hizo a través de la Asociación Latinoamericana de Integración (Aladi).
El comercio con Ecuador terminó deficitario en 2008 en cerca de 500.000 dólares, situación que se repitió este año, pues se exportaron 2,1 millones de dólares y se importaron cuatro millones. Así, la balanza comercial con la nación andina se mantuvo en una cifra negativa en el primer cuatrimestre.