Pando, laboratorio del “nuevo Estado”

En Pando se ponen a prueba y perfeccionan muchos de los pilares del “Nuevo Estado” que ya está en vías de construcción

los_tiempos_beta Por Redacción central | – Los Tiempos

Un amplio reportaje publicado el pasado domingo por un matutino colega de La Paz, da cuenta de la magnitud de un plan que está siendo ejecutado por el Movimiento al Socialismo para hacer del Departamento Pando un enclave bajo el control absoluto de esa organización política.



Para tal efecto, según el informe que comentamos, trabajan mancomunadamente diversas instancias gubernamentales, la Prefectura de cuyo control se hizo el MAS tras la defenestración del democráticamente Prefecto elegido, y la Alcaldía de Cobija así como las de otros municipios ya copados por el partido oficialista.

Muchas instituciones del Estado están involucradas en el proyecto, pero el rol principal está reservado para las Fuerzas Armadas que han desplazado a un gran número de sus efectivos a lo largo y ancho de ese departamento. Pero no son sólo las FFAA bolivianas. Junto a los militares bolivianos están decenas de oficiales de la Fuerza Armada Venezolana, quienes constituyen el Comando Binacional Amazónico.

Entre las muchas tareas a las que se dedican los integrantes del Comando Binacional está la intensa labor de adoctrinamiento. Los fundamentos doctrinales del “socialismo del Siglo XXI” son asiduamente impartidos entre todos los habitantes de la región, pero especialmente entre los jóvenes a quienes se prepara intensamente para futuras batallas ideológicas.
Simultáneamente, se promueven masivos flujos migratorios, principalmente desde comunidades altiplánicas y del trópico cochabambino; de zonas en las que la hegemonía masista es absoluta desde hace ya mucho tiempo. Son miles de parejas  y familias jóvenes, a las que se les otorgan tierras y medios de producción bajo la estricta tutela de diversas instancias del aparato estatal.

Como se sabe, hace ya varios años que muchos de los esfuerzos del Gobierno central están dirigidos a ampliar su influencia en esa región del país que por sus características geográficas y demográficas resulta un punto estratégico cuyo control tiene enorme importancia no sólo desde el punto de vista electoral sino económico, político y militar. Pero tales afanes adquirieron especial ímpetu después del 11 de septiembre de 2008, cuando el Gobierno se anotó uno de sus más importantes triunfos en su intensa lucha contra la oposición cívico regional.

A partir de entonces, Pando ha pasado a ser una especie de laboratorio de ensayo donde se ponen a prueba los más diversos procedimientos para “colonizar” una región originalmente hostil al masismo y su proyecto político. Es fácil suponer que a medida que tales métodos vayan siendo perfeccionados por la práctica, serán luego reproducidos en otras zonas que por ahora no son tan fácilmente sometidas a las reglas del “Nuevo Estado”, el que no se conforma con el Gobierno, el que aspira al “Poder Total”.