Colonización. Los pandinos quieren evitar a toda costa el asentamiento.
Proyecto. El Gobierno invertirá en la capacitación de las 2.500 familias para que trabajen en el manejo de castaña
El Deber
Carla Paz Vargas
Las autoridades de Gobierno se contradicen en cuanto al origen de las 2.500 familias que serán trasladadas a Pando desde el próximo mes. Algunos aseguran que serán de Cochabamba y Potosí, otros que también de La Paz y están los que dicen que provendrán de todo el país.
Así, mientras el director nacional para la Distribución de Tierras y Asentamientos Humanos, Franz Chávez, aseguró que los colonos provendrán de Cochabamba y Potosí; el viceministro de Tierras, Alejandro Almaraz, señaló que serán paceños y cochabambinos, pero el director de Tierras, Cliver Rocha, indicó que serán ‘ciudadanos bolivianos’ de todo el país.
Consultados sobre la vocación productiva de las personas que ocuparán 250.000 hectáreas de territorio pandino, en las provincias Federico Román, Abuná y en la localidad de Filadelfia, Chávez sostuvo que son jornaleros que carecen de tierra y se dedicarán a la producción de castaña.
Asimismo, la autoridad explicó que el plan de asentamiento se realiza desde hace más de dos años y que también se ejecuta en Santa Cruz, Beni y La Paz.
Para Rocha el asentamiento humano en Pando va a garantizar el uso sostenible del bosque, mayor desarrollo social y resguardo de la soberanía territorial, lo que tendrá efectos positivos para toda la región. “Los campesinos serán los protectores del bosque evitando la producción de droga y la tala indiscriminada de madera”, destacó.
Las autoridades adelantaron que se invertirán millones de dólares en el proyecto que comprende capacitación en programas agroforestales, construcción de caminos, dotación de postas sanitarias y otros servicios. Sin embargo, no quisieron dar una cifra exacta.
Almaraz afirmó a la ANF que los campesinos tendrán derecho a la dotación de 75 hectáreas por familia.
Pandinos organizan comités de autodefensa
Varias organizaciones de base en la amazonia boliviana, reunidas de forma permanente, determinaron la organización de comités de autodefensa para rechazar asentamientos de colonos dentro del plan anunciado por el Gobierno.
Los comités tendrán la misión de ingresar a las provincias Federico Román y Manuripi y coordinar con los campesinos e indígenas un plan de resistencia.
El ejecutivo de la Federación de Fabriles del Beni, Guillermo Vira, indicó que a los comités se están sumando campesinos de la región.
Por otra parte, los dirigentes de los zafreros, Saúl Fernández y Alfredo Rodríguez, descartaron que se esté cultivando coca en la zona, como denunció la Asociación de Productores de Coca de La Paz. /David Bernal