Ajuste de cuentas

penoco La dizque revolución socialista de Hugo Chávez empezó como la de Evo Morales, revirtiendo tierras de los dizque terratenientes para dizque entregarlas a los campesinos con el objetivo supuesto de incrementar la producción de alimentos. Pasan los años y “naranjas verdes”, los venezolanos siguen mamando de la jugosa renta petrolera. Para qué trabajar y si el “papá socialismo”, que vive de venderle el oro negro a los gringos, reparte bonos a diestra y siniestra a los súbditos de un régimen que de socialista sólo tiene el tufo atropellador estalinista. Pero la revolución tiene que continuar y su vigencia sólo puede mantenerse a través del mecanismo de la expropiación. A la reversión de tierras, en Venezuela le siguió la intervención de industrias, plantas agroindustriales, bancos pequeños y grandes y en estos días en Caracas circula un anuncio por televisión que hace presagiar que van a arrasar hasta con las panaderías y los micromercados. El diputado del MAS, Gustavo Torrico ha dicho ayer que el segundo mandato de Evo Morales servirá para hacer un “ajuste de cuentas”. El que quiera asustarse, que se asuste.

Bajo el Penoco – El Día