No se descarta nexos con el narcosecuestro y asesinatos ocurridos en San Ramón. 11 personas fueron detenidas en relación al secuestro de un capo del narco, William Rosales, quien sigue desaparecido.
Inspección: policías y autoridades analizan la escena de las ejecuciones, ayer
Investigación: William Rosales Suárez, supuesto “capo” boliviano del narcotráfico, sigue secuestrado. Los uniformados que hacen las pesquisas desconfían de uno de los dos sobrevivientes del hecho que dejó seis muertos.
La Prensa. Santa Cruz / El Deber.- Un ex policía fue detenido ayer por la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) y, junto con dos colombianos sobrevivientes, es investigado por la matanza de seis hombres el viernes pasado, a la altura del kilómetro 12 de la ruta entre San Ramón y Guarayos, donde también fue secuestrado William Rosales Suárez, con antecedentes por delito de narcotráfico.
El ex policía y uno de los colombianos fueron llevados bajo estrictas medidas de seguridad la mañana de ayer a una inspección realizada en el lugar de los asesinatos, la que estuvo dirigida por el comandante departamental de la Policía, Humberto Echalar; la fiscal distrital Arminda Méndez, y otros tres fiscales de materia.
El jefe de la Policía se limitó a afirmar que se trató de una inspección para acumular evidencias que conduzcan al esclarecimiento del violento suceso. Aunque en sus declaraciones calificó como “testigos clave” al colombiano, sobreviviente de la matanza, y al ex policía.
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Se conoció que están a disposición de la comisión de fiscales Carlos Ruddy Parada, Juan Ribera Álvarez y Basilio Villca, que elaboran las diligencias.
El sábado se confirmó el asesinato de seis personas, tres serbios y tres bolivianos, supuestos guardaespaldas del “capo” boliviano de la droga William Rosales Suárez, al cual los sicarios se habrían llevado con vida para pedir un rescate de un millón de dólares.
Según uno de los sobrevivientes, los delincuentes interceptaron las tres vagonetas en las que iban Rosales y sus hombres, simulando una inspección antidrogas. Los enmanillaron, llevaron a un paraje en el kilómetro 12 y tras golpearlos los ejecutaron con disparos en la cabeza y pecho principalmente.
Para la inspección, la Policía cerró el tráfico vehicular en el kilómetro 12. Los dos detenidos fueron vistos con el rostro cubierto con sus prendas de vestir. La Policía sospecha que el colombiano forme parte de la banda de matones a sueldo que el viernes, en un vehículo, interceptó a dos motorizados para después maniatar y torturar a los seis ocupantes y finalmente matarlos.
El colombiano, de quien la Policía no difundió su identidad, declaró que viajaba en una vagoneta junto a Rosales y los seis victimados, pero que por fortuna se salvó de ser ejecutado a balazos y que salió ileso. Sobrevivió junto a su compatriota Juan Carlos Gutiérrez Maraz, quien sufrió tres heridas de bala y que se recupera en el hospital Japonés, donde es custodiado en calidad de detenido. Los investigadores consideran que la versión del extranjero que resultó ileso no es coherente, ya que no habría sufrido heridas ni tortura.
El jefe de la Policía cruceña, Humberto Echalar, dijo que hay serias sospechas de que sea parte de la banda de sicarios que ejecutó a las seis víctimas. Su casa de la avenida Centenario fue allanada, pero sólo se secuestró un CPU y documentos. La Policía brindará este lunes un informe más pormenorizado del avance de las investigaciones en torno a la matanza.
Mientras tanto, los cadáveres de los serbios Pedrag Sertfko, Sasa Turcinovic y Bojan Bakula siguen en la morgue del hospital San Juan de Dios, pues nadie los reclamó hasta ayer. Los restos de los bolivianos fallecidos, Mauricio Méndez Santistevan, Rafael Douglas Cuéllar Loras y el policía Diego Guardia Vía fueron retirados por sus familiares.
El ex capitán Orlando Araujo, reconocido como uno de los que perpetraron los secuestros y ejecuciones, se convirtió en el hombre más buscado de la región.
En lo que va del año, dos hechos violentos atribuidos al narcotráfico sorprendieron a Santa Cruz de la Sierra y, según especialistas que opinaron sobre el tema, esto es sólo el principio de lo que el narcotráfico prepara para la sociedad.
En criterio del sociólogo José Mirtenbaum, la maraña del narcotráfico se viene tejiendo desde hace diez años en Bolivia, y ahora conforma la economía política de la cocaína, que demuestra que no existe presencia del Estado en la lucha contra la droga. Agregó que la falta de control a la cadena de producción de la cocaína dio libre albedrío a los carteles que aparecieron en el país y que hoy operan a sus anchas.
El ex viceministro de Defensa Social Ernesto Justiniano indicó que desde 2008 se denunció la presencia de estos grupos irregulares en el país y que hoy se están viendo los resultados. “Santa Cruz está desprotegida y es el paraíso para los narcos. El Presidente defiende los sembradíos de la hoja de coca e incluso que se incrementen. Muy pronto los crímenes subirán a otro nivel e involucrarán a autoridades, jueces, abogados y familias”.
Sicarios se habrían llevado a Rosales para pedir un millón de dólares.
El secuestro de un narco deriva en 11 detenciones
Investigación. Habrían sido parte del laboratorio de droga hallado en San Ignacio
La Razón. Daniela Romero – La Paz
Al menos 10 colombianos y una mujer peruana que están involucrados en el megalaboratorio de droga hallado en San Ignacio de Velasco el jueves, fueron detenidos. No se descarta nexos con el narcosecuestro y asesinatos ocurridos en San Ramón.
El director departamental de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN), coronel Rubén Suárez, informó ayer que fueron aprehendidas las personas que habrían escapado del laboratorio de cristalización de cocaína y se habrían quedado en el monte hasta el sábado.
Una fuente policial indicó que se presume que los detenidos tienen algún tipo de relación con el secuestro de William Rosales Suárez, presunto cabecilla de una banda de narcotraficantes, y el asesinato de seis de sus compañeros, hechos ocurridos en San Ramón (Santa Cruz).
Un grupo de narcotraficantes paraguayos que mantenía relación con Rosales habría denunciado a la Policía la existencia del megalaboratorio de droga en San Ignacio de Velasco, cuyos propietarios y administradores eran colombianos, en su mayoría.
Se presume que luego de esta información, unos narcotraficantes colombianos en Paraguay habrían pedido la cabeza de Rosales y ofrecido 1 millón de dólares, según la fuente entrevistada.
Sin embargo, el coronel Suárez negó que por el momento haya nexos entre los dos casos. “Hasta ahora los interrogamos, pero no encontramos ninguna información sobre lo sucedido en San Ramón”, manifestó el jefe policial.
El jueves, efectivos de la FELCN descubrieron un megalaboratorio de clorhidrato de cocaína en San Ignacio de Velasco. Cinco personas fueron detenidas y al menos 20 se dieron a la fuga con armas. La Policía sostuvo que se trataba de colombianos.
Un día después, sujetos con el uniforme de agentes antidroga interceptaron dos vagonetas de lujo en cuyo interior estaba Rosales y al menos siete amigos.
Los condujeron hasta el monte y a seis de ellos, tres bolivianos y tres serbios, los victimaron con disparos de bala en la cabeza.
Mientras que Rosales fue secuestrado y, según datos de fuentes policiales, fue llevado a Paraguay donde pedían su cabeza. Hasta ayer no se tenía ningún dato oficial sobre su paradero.
Rosales sigue desaparecido y temen lo peor
La esposa de William Rosales recibió una llamada telefónica la noche del sábado de desconocidos que le dijeron que deje de buscarlo porque ya está muerto. Ayer se realizó un rastrillaje en la zona de ‘Cuatro Cañadas” pero con resultados negativos.
Agentes antidroga miran la camioneta en la que aparecieron cuatro muertos el pasado viernes.
El Día. Eran las 22.40 de la noche del sábado cuando sonó el teléfono celular de Denise, y lo que le comunicaron la dejó fría: ‘Ya matamos a tu marido y dejá de estar saliendo en la televisión porque seguís vos y tus dos hijos”. Esa fue la llamada que a esa hora dio inicio a un intenso rastrillaje en la zona de Cuatro Cañadas, a unos 80 kilómetros al Este de Santa Cruz sobre la ruta al Beni, pero al cabo de la jornada, no hallaron ningún rastro del presunto narcotraficante secuestrado William Rosales Suárez y tampoco de los autores de la muerte de seis personas en este sangriento fin de semana.
El abogado de la familia, un ex jefe de Bienes Incautados durante el actual gobierno, Denver Pedraza, explicó que los secuestradores y asesinos a la vez tienen acento brasileño y durante los 30 segundos que mantuvieron contacto le dijeron a la mujer que vayan a buscar su cadáver a la colonia “Chihuahua”.
“Buscamos hasta suchas que estén revoloteando por la zona pero no encontramos nada”, dijo Pedraza. Rosales registra antecedentes por narcotráfico tras haber caído primero en la llamada operación ‘Trébol’ en la que incautaron 12 vehículos,10 inmuebles,ocho armas$us 31.272,y dos avionetas Cessna, todos valuados en 8 millones de dólares. junto a Robin, Ruan y Johnny Rosales Ágreda.
Posteriormente fue detenido el 24 de agosto del 2008 en poder de una lujosa vagoneta y una ametralladora, pero según su abogado y sus familiares ahora ya no se dedicaba al narcotráfico y vivía de la ganadería y la explotación de madera.
Mientras eso ocurría en la morgue del hospital San Juan de Dios permanecían los cadáveres de los tres ciudadanos europeos de Serbia de apellido Srtsko que presuntamente llegaron como guardaespaldas de Rosales, continuaban en ese pabellón sin ser reclamados.
Las otras tres víctimas: el policía del Batallón de Seguridad Física Diego Guardia Vía, y dos trabajadores de Rosales, Mauricio Méndez Santistevan y Rafael Cuéllar Douglas fueron llevadas a su velatorio a sus domicilios. Todos fueron victimados en las cercanías del rio Quiser, en San Ramón, a unos 200 kilómetros de Santa Cruz, sobre la ruta al Beni.
El abogado Denver Pedraza informó que no han podido dar con el paradero de los policías implicados en la matanza: el capitán Orlando Araujo, otro capitán de apellido Rioja, el teniente Danner Paz y un tal “Masaco” que también es policía y quienes, asociados con colombianos y brasileños se llevaron a Rosales y dieron muerte a las seis personas.
Pedraza convocó a los policías a comunicarse con él y les ofreció todas las garantías.
Al ser consultado sobre la matanza, el gobernador electo de Santa Cruz, Rubén Costas, dijo que ese tipo de acciones parecen ligadas al narcotráfico y criticó al gobierno del presidente Evo Morales por permitir que los sembradíos de coca crezcan cada vez más.
"Este gobierno permite que se siembre mucha coca que sabemos que va directo al narcotráfico y se están exportando muertes y la comunidad internacional tendrá que reaccionar", declaró.
En lo que va del año la policía ha descubierto 12 laboratorios y se ha incautado de 13 toneladas de cocaína.El ministro del Interior, Sacha Llorentty, por el contrario, dijo que la gente no está acostumbrada a estos hechos y prometió aplicar todo el rigor de la ley para los culpables.
Los serbios controlan el negocio
Las mafias balcánicas compran cocaína refinada al mayoreo en Latinoamérica y la reexportan a la Unión Europea. Especialmente, a ciudades como Venecia, Milán, París, Londres, Copenhague, Amsterdam, señala un informe del portal de Internet Mercado.
Señala que antiguas rutas para opiáceos orientales –Afganistán, triángulo de oro indochino- se pasan a la cocaína. Un caso típico es Turquía, otrora relevante por sus campos de amapolas y hoy escala en un camino que, partiendo de Colombia, cruza el mar hasta África occidental. Más tarde, las cargas alcanzan Montenegro y otros países balcánicos y otra rama atraviesa Ecuador, Perú, Bolivia, Uruguay y Argentina, desde donde se embarca a Europa occidental, según la investigación de expertos.
Punto de vista
‘Es economía de la cocaína’
JOSÉ MIRTENBAUM
Sociólogo
Hay que entender que esto es una economía que yo la llamo economía política de la cocaína, que quiere decir que la actividad ilícita del tráfico de la cocaína, que tiene mucho valor monetario y no es que se diera esta situación de la producción de la coca transformada en cocaína con mucha dificultad, eso involucra un tendido de redes que están dispuestos a tomar riesgos en una economía que evidentemente tiene mucho valor monetario en el mercado porque hay elementos sustanciales en el mundo, en usuarios recreacionales como también hay un alto mercado en personas que utiliza la cocaína como liquidez de intercambio por armamento por ejemplo, es una economía gigantesca que en la cual hemos caído como país ya hemos estado involucrados en esa economía política de trafico de cocaína desde la época de la presidencia del general Banzer en 1975, o sea tiene ya una larga data, pero desde ahí se ha ido generando todo una política de control interdictivo sobre las actividades que en cierta manera se controlan hasta cierto momento pero ahora en la ausencia de una política clara sobre el control, tampoco no hay control pero sobre una política interdictiva directa, a pesar de que se está capturando laboratorios cada día con una cantidad promedio enorme de producción que a veces sube hasta 20 kilos diarios, entonces tenemos una situación donde no hay una presencia activa del Estado a efectos de controlar esta situación de manera más efectiva, como debiera ser.