Según Quintana narcos utilizan la polarización

Admite que el crimen organizado y el narcotráfico están en su auge en Bolivia. Reacción: Ortiz ve problemas en los privilegios de los cocaleros.

image Interdicción. Efectivos de la Felcn inspeccionan una factoría de droga encontrada en el municipio de San Ignacio



EL DEBER y EFE

Juan Ramón Quintana, flamante director de la Agencia para el Desarrollo de las Macroregiones y Zonas Fronterizas, reconoció ayer en Canal 7 que el crimen organizado y el narcotráfico están en su auge en Bolivia; sin embargo, lo atribuyó a la polarización política que desde el 2006 tiene enfrentados al presidente Evo Morales con el ahora gobernador de Santa Cruz, Rubén Costas.

Sin especificar si el crimen organizado transnacional tiene influencia en el poder regional, aseguró que los delincuentes utilizan la confrontación como “cortina de humo” para intensificar sus actividades en la zona fronteriza con Brasil.

El hombre fuerte del Gobierno de Evo Morales, que ahora tiene a su cargo de-sarrollar las fronteras del país, reconoció que la inseguridad en Santa Cruz se origina en la frontera con Brasil y dijo que los miles de kilómetros que comparte Bolivia con el coloso de Sudamérica es la más vulnerable por falta de control territorial del Estado.

Para Óscar Ortiz, secretario de Coordinación Institucional de la Gobernación de Santa Cruz, lo esgrimido por Quintana es un argumento absurdo. En opinión del ex presidente del Senado, el narcotráfico ha crecido por la política de tolerancia a los sectores productores de la hoja de coca, que son los que sustentan la base política del actual Gobierno.

“Han desaparecido los controles que impedían la salida de coca ilegal de la zona de producción y que detectaban el tráfico de drogas. La producción de cocaína se asienta en los centros que controla el MAS, como Chapare, Yapacaní”, dijo Ortiz. 

Recordó, además, que la seguridad nacional y el control de los organismos de seguridad son responsabilidad del Gobierno central y no de la Gobernación.

Pero Quintana recuerda que en los últimos 18 meses se han encontrado 14 fábricas sofisticadas de droga en las áreas rurales de Santa Cruz, cerca de la frontera con Brasil.

Como uno de sus planes estrellas, el ex ministro de la Presidencia anunció que extenderá el plan de asentamientos humanos en zonas fronterizas, como el realizado, en Pando a todo el país. El mismo ya había sido anunciado y planificado por el viceministro de Tierra, Alejandro Almaraz, luego de llevar a 400 familias de campesinos a Pando.

Para Ortiz, Quintana no es la mejor persona para estar a cargo de las fronteras nacionales, donde el narcotráfico y el contrabando de mercancías se entrelazan y van de la mano.

Una agenda apretada hasta diciembre

El tema de la lucha contra las drogas y de la producción excesiva de hojas de coca estará en la agenda presidencial como uno de los puntos centrales hasta fin de año.

A finales del presente mes, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc, por sus siglas en inglés) presentará su informe sobre la cantidad de coca sembrada que hay en Bolivia. En 2009, con mediciones realizadas un año antes, Naciones Unidas certificó 30.500 hectáreas del arbusto, lo que suponía el quinto año consecutivo de aumento de superficie sembrada.

En septiembre habrá un nuevo informe, pero está vez será unilateral y estará a cargo del Departamento de Estado de EEUU, que evaluará el desempeño de Bolivia en términos de lucha contra el narcotráfico. En 2009 consideró que no estaba cumpliendo con sus obligaciones y cifró la coca en 35.000 hectáreas.

Este último repercute tanto como el de la ONU, ya que no sólo es utilizado por EEUU como un instrumento para ‘certificar’ países, sino que se vuelve clave al momento de definir la devolución de las preferencias arancelarias del Sistema de Preferencias Andinas (Atpdea), que se define en diciembre.

Narcotráfico

– Expansivo. Se han descubierto cinco megafábricas en la zona de la Chiquitania en los últimos 18 meses. Salvo en la última, nunca se detuvo a los peces gordos en estos operativos. Sin embargo, la zona altiplánica también se ha convertido en centro de tráfico, sobre todo Potosí y El Alto.

– ‘Valor agregado’. Según el jefe nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico, Bolivia es un país refinador y reexportador de cocaína peruana. 

– Vecinos. El candidato opositor a la presidencia brasileña, José Serra, consideró que el Gobierno de Bolivia debe ser cómplice del narcotráfico, ya que el 90% de la cocaína que llega a su país proviene del nuestro.

– Sin ayuda. En octubre de 2008, la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) fue expulsada por el Gobierno.