Dilma Rousseff encabeza el recuento en las elecciones en Brasil


Boca de urna: segundo turno ainda é dúvida. Pesquisa do Ibope mostra Dilma com 51% e Serra com 30%. A margem de erro é de dois pontos.

imageFuente O Globo.

EFE:



Con 10% de los votos escrutados, la heredera de Lula lidera el escrutinio para la Presidencia con el 41,89% de los votos, insuficientes para ser elegida en primera vuelta

Río de Janeiro.  La candidata oficialista Dilma Rousseff, del Partido de los Trabajadores (PT), encabeza el escrutinio para la Presidencia de la República de Brasil con el 41,89% de los votos, insuficientes para ser elegida en primera vuelta, según los primeros datos del Tribunal Superior Electoral (TSE).

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Según el TSE, con el 15,83% de los votos escrutados, el opositor José Serra del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), va en segundo lugar, con el 36,86% que le garantizarían el paso a una segunda vuelta con Rousseff, el 31 de este mes.

En tercer lugar aparece la candidata del Partido verde (PV), Marina Silva, con el 20,01% de los votos, agrega el balance parcial del TSE. La máxima autoridad electoral del país comenzó a divulgar los resultados oficiales inmediatamente cerraron todos los centros de votación, incluidos los de los seis estados más occidentales del país, que fueron los últimos en terminar la jornada, a las 18.00 hora local (21.00 GMT).

De mantenerse esa tendencia, Rousseff, apadrinada por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, tendría que disputar una segunda vuelta con Serra, a quien los escrutinios oficiales le dan una votación más alta que la obtenida en cualquiera de las encuestas recientes, donde últimamente aparecía con alrededor del 28% de las intenciones de voto.

La votación parcial de Rousseff, en cambio, es inferior a las que habían pronosticado las últimas encuestas, en las que obtenía entre el 50 y el 51% de las intenciones de voto.

Los colegios electorales de Brasil abrieron sus puertas a las 08.00 hora local (11.00 GMT) para la celebración de elecciones presidenciales, legislativas y regionales del mayor país latinoamericano.

Además de al presidente de la República, los cerca de 135,8 millones de electores brasileños elegirán a los gobernadores de los 27 estados del país, dos tercios del Senado y los 513 diputados federales, y renovarán todos los legislativos regionales.

Los comicios son disputados por 22.570 candidatos, de los cuales 9 son a presidente, 171 a gobernador, 273 a senador, 6.036 a diputado federal y 15.280 a diputado regional o distrital.

La candidata oficialista a la Presidencia brasileña, Dilma Rousseff, dijo, poco antes de votar en la sureña ciudad de Porto Alegre, que espera el escrutinio con tranquilidad, independientemente de que sea elegida este domingo o tenga que disputar una segunda vuelta.

"Nuestra militancia es aguerrida, es guerrera y no desiste nunca. Ella es mejor ante los obstáculos que ante las facilidades. No le temo a nada", declaró tras emitir su voto.

Rousseff, candidata apoyada por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, puede obtener hoy entre el 50 y el 51% de los votos válidos según los últimos sondeos, lo que no permite decir si alcanzará la cantidad suficiente (la mitad más uno) para ser elegida sin necesidad de disputar una segunda ronda.

La ex ministra de la Presidencia, que puede convertirse en la primera mujer en gobernar el mayor país latinoamericano, votó en la escuela Santos Dumont de Porto Alegre, la capital del estado de Río Grande do Sul y donde inició su carrera política.

La apadrinada de Lula acudió al colegio electoral acompañada por el ex ministro de Justicia Tarso Genro, un importante dirigente del oficialista Partido de los Trabadajadores (PT) y que es candidato a la gobernación de Río Grande do Sul. Vestida con un traje del color rojo característico del PT, bastante sonriente y con paso lento por la bota ortopédica que usa desde hace días, Rousseff posó haciendo la señal de la victoria para decenas de fotógrafos y cámaras que testimoniaron su voto.

Poco antes de votar, en un desayuno con simpatizantes y al ser interrogada sobre si la posibilidad de tener que disputar una segunda vuelta puede desanimar a sus seguidores, la oficialista aseguró que los militantes del PT reaccionan mejor cuando enfrentan dificultades. "Nuestra militancia es aguerrida, es guerrera y no desiste nunca. Ella es mejor ante los obstáculos que ante las facilidades. No le temo a nada. Sea lo que sea lucharemos una buena lucha", aseguró la candidata que hasta dos semanas tenía una intención de voto que la señalaba como sucesora de Lula sin disputar una segunda vuelta. Rousseff dijo que está preparada para cualquier cosa y agradeció a Dios por haberle dado fuerzas en una larga trayectoria de superación de obstáculos.

En los últimos días la ex ministra de la Presidencia ha reiterado que es católica y que respetará todas las religiones y la vida, ante los rumores que la señalan como una defensora de la despenalización del aborto y que, según la prensa, contribuyeron a restarle apoyo en los sondeos. Rousseff también agradeció a Lula por su alianza, amistad y compañerismo.

Por su parte, el candidato presidencial José Serra, del opositor Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), manifestó su confianza en que la jefatura del Estado se defina el próximo 31 de octubre en una segunda vuelta en la que aspira a estar como una de las opciones. "Si Dios quiere, habrá una segunda vuelta", dijo después de votar.

Serra votó en un colegio cercano a su residencia en el barrio Alto de Pinheiros, a donde llegó en compañía de su esposa, Mónica Allende; de su compañero de candidatura, Antonio Indio da Costa; del candidato a gobernador del estado de Sao Paulo por el PSDB, Geraldo Alckmin, y del aspirante al Senado Aloysio Nunes Ferreira.

El político opositor, que disputa por segunda vez la presidencia, posó muy sonriente para los fotógrafos antes y después de votar, mostrando con los dedos de las manos el número 45, con el que su partido y su candidatura están registrados ante la justicia electoral. Serra fue derrotado en las presidenciales de 2002 por Luiz Inácio Lula da Silva y las encuestas para las elecciones lo sitúan en el segundo lugar en la preferencia del electorado, con el 31% de los votos válidos.

En sus declaraciones a los periodistas, Serra elogió el vigor de la democracia brasileña, de la que dijo que es una "conquista" del pueblo, pues, agregó, el país no tiene los colores de un partido sino que es "multicolor", con el "verde-amarelo" de la bandera nacional. "Brasil no tiene dueño, Brasil es de los brasileños", expresó el candidato del PSDB, en una crítica velada al PT, acusado por sus opositores de querer controlar todo en el país.