Bajan los precios de alimentos y las tarifas del transporte público

A las pocas horas de derogarse el Decreto 748, los productos empiezan a bajar de precio y la especulación va desapareciendo, aunque en La Paz, los vendedores cobraron como antes del Decreto 743, al igual que los transportistas.

image Expendio: una comerciante vende pan a Bs 0,50 la unidad, cerca del Cementerio

La Prensa



Abastecimiento: A las pocas horas de derogarse el Decreto 748, los productos empiezan a bajar de precio y la especulación desaparece.

La normalidad retorna poco a poco. Algunos precios de los artículos de primera necesidad empezaron a bajar. Ayer, los mercados de la ciudad permanecían semivacíos por el feriado y se notó la escasez de pan de batalla. En el caso del transporte público, sólo algunos vehículos cobraron las tarifas anteriores al “gasolinazo”; otros, especialmente los taxis, continuaban con pasajes elevados.

A las pocas horas de que el presidente Evo Morales derogara el Decreto Supremo 748 de 26 de diciembre de 2010, que incrementaba los precios de los carburantes hasta en 82 por ciento, se notó la reducción en el costo de algunos productos, como las carnes de res y de pollo, la leche, los huevos y las verduras.

En un recorrido, ayer, por los mercados Rodríguez, Sopocachi y Villa Fátima, La Prensa observó que, por ejemplo, el precio de la arroba de papa rebajó a 48 y 52 bolivianos. En días pasados, esta cifra había llegado a 60 bolivianos.

El kilo de carne de res especial se cotizaba ayer en 40 bolivianos, y de pollo, en 15 y 16 bolivianos. Macario Quispe, propietario del Frial Económico, manifestó su beneplácito por la derogación del Decreto 748. “El precio con el que nos estaba llegando la carne de los proveedores estaba igual, pero para nosotros lo que más costaba era el pasaje. Para subir a El Alto antes gastaba cuatro bolivianos y con la subida de precios, ocho. Además, para este viaje la carne tenía que llegar ya con otro precio”.

Rosario, una compradora del barrio de San Pedro, dijo que con la derogación del decreto los precios tienen que volver a la normalidad, de acuerdo con lo establecido por el presidente Morales. Varios ciudadanos consultados por este medio coincidieron con el critero de esta vecina.

La carne de cerdo, que llegó a costar 40 bolivianos el kilo en las tiendas Stege y 35 en algunos mercados, ayer bordeaba los 31 bolivianos.

Mirtha Herrera, propietaria de una de las agencias de Pollo Sofía, vendía ayer el kilo de pollo en 15 bolivianos. Sin embargo, dijo que la distribuidora les había advertido que desde este lunes el costo subiría a 16,50 bolivianos. “Esto suponía vender a 17 o 18 bolivianos, pero como ya se frenó el decreto, suponemos que el pollo nos llegará a un precio normal”.

El pan desapareció ayer en diferentes puntos de la ciudad. Por ejemplo, en tiendas del barrio de San Pedro sólo se observaban paquetes de panetones y de galletas. Una venderora ambulante que recorría la calle Rodríguez vendía cada pieza del alimento a 50 centavos.

María Luz Delgado, una compradora de pan, se quejó del precio y del peso que aún ayer mantenía este producto. “Acabo de comprar estas sarnitas a 50 centavos la unidad, pero con un peso miserable; parecen un suspiro”. Según esta consumidora, algunas comerciantes todavía están aprovechando el alza que generó el gasolinazo.

Por su parte, el dirigente de los panaderos de la ciudad de La Paz, Dandy Mallea, insistió ayer en que el precio del pan debe incrementarse de 40 a 50 centavos de boliviano debido al encarecimiento de los insumos para elaborar ese artículo de primera necesidad.

Entretanto, las tiendas de Emapa de la calle Rodríguez esquina Lara, de la Mariscal Santa Cruz y de las proximidades del Cementerio General permanecían cerradas. El gerente de Emapa, Gonzalo Sejas, justificó el cierre de los recintos por el feriado y anunció que éstos serán abiertos mañana, lunes.

En tanto, el azúcar escasea en los mercados. En los supermercados Fidalga se expende el kilogramo en seis bolivianos.

Los pasajes se regularizan

Debido al feriado de Año Nuevo, ayer se observó escasa presencia del transporte público en las calles de La Paz. Empero, de entre quienes salieron a trabajar, no todos respetaron la derogación del Decreto Supremo 748, que anula el alza de los carburantes. Si bien algunos minibuses volvieron a cobrar 1,50 bolivianos el pasaje, los vehículos del transporte libre, especialmente taxis, continuaron con tarifas elevadas, desde cuatro hasta diez bolivianos en tramos cortos de los barrios de San Pedro, Sopocachi y Miraflores.

Por su parte, los surtidores de la ciudad de La Paz volvieron a sus antiguas tarifas con sus equipos acondicionados desde las primeras horas de ayer. La gasolina volvió a costar 3,74 bolivianos el litro, la prémium, 4,79, y el diésel oil, 3,72 bolivianos.

Pascuala, una vendedora del mercado de Villa Fátima, dijo que la noche del viernes tuvo que pagar desde Ventilla hasta la Ceja de El Alto 2,50 bolivianos y, para bajar a la ciudad de La Paz, tres más. Ayer en la mañana, el pasaje ya había rebajado a uno y dos bolivianos, respectivamente.

Para Luisa Arce, la medida gubernamental fue una “burla” que hizo feliz a un grupo de comerciantes. “Tanto los choferes como los comerciantes han hecho su negocio, o mejor dicho, han sacado su aguinaldo a costa de la población. Ahora todo vuelve a bajar”.

Pero no todos aplauden la derogación del decreto, por ejemplo Carlos Balboa. En opinión de este ciudadano, la medida era necesaria y su anulación obedeció “a la presión de los movimientos sociales que ha podido más. El Presidente no debió ceder si era por el engrandecimiento del país”.

Los precios de los productos van rumbo a estabilizarse

Los vendedores cobraron como antes del Decreto 743, al igual que los transportistas

image COMERCIO Pocos compradores para mercados bien abastecidos de verduras, frutas y carne. El feriado, dijeron las vendedoras, explica la poca asistencia de gente.

La Razón

Los precios de los productos de la canasta familiar fueron ayer, en general, los mismos que había antes del “decretazo”. La Razón recorrió cuatro mercados de La Paz en las zonas de Villa Fátima, Villa Copacabana, Rodríguez y Cementerio. Estos centros de abastecimiento expendían casi todos los productos, excepto azúcar. Tampoco fue posible hallar pan, que en otras ocasiones se ofrece en abundancia.

Las vendedoras se quejaron, más bien, de la poca concurrencia de los compradores, aunque la atribuyeron al feriado del Año Nuevo. “Tomate, cebolla, papa, zanahoria, lechuga, brócoli mantienen los precios de antes de lanzarse el decreto. La única verdura que se incrementó hasta en dos bolivianos es la arveja, pero esto debido a las lluvias”, dijo Julia Loza, en Villa Fátima.

Las tiendas de abarrotes en el mercado de Villa Copacabana se mantuvieron cerradas y la venta de las verduras y frutas fue regular. “No puedo subir los precios de la fruta porque la gente no me compraría y el producto se echa a perder; debo vender”, dijo Gloria López.

Rosemary Fernández, vendedora de abarrotes en el mercado del Cementerio, señaló que sus proveedores subieron el precio de los productos y que ahora no sabe en cuánto va a vender. “Voy a perder porque he comprado a precio alto y ahora debo bajarlo”, comentó.

En cuanto a la carne, el kilo de res se vendía ayer entre 21 y 24 bolivianos, según el corte, debido a que las carnicerías compran un día antes este producto, explicó Rosa Tarqui, del mercado Rodríguez. Ella misma aseguró que a partir de mañana los precios volverán a ser los de hace una semana (de Bs 15 a 18 el kilo).

En Cochabamba, las vendedoras del mercado de La Cancha no atendieron sus puestos de venta por el feriado; los pocos productos que se encontraron mantenían sus precios sin incremento. En Santa Cruz se vivió similar situación.

En cuanto a los combustibles, los surtidores de La Paz volvieron a sus antiguas tarifas desde las primeras horas de ayer y el transporte público aplicó las tarifas anteriores, aunque hubo quienes mantuvieron uno o dos bolivianos de más, arguyendo que compraron gasolina “cara” el viernes. El dirigente de la Federación Departamental de Choferes de La Paz, Fortunato Sirpa, dijo que su sector no está renunciando a que se revisen los precios de los pasajes.

Desde ayer la gasolina bajó de Bs 6,47 a 3,74 el litro, la Premium pasó de Bs 7,51 a 4,79 y el diésel oil volvió a su precio de Bs 3,72.

Control en manos de ATT

El ministro de la Presidencia, Óscar Coca, dijo que la normalidad de los valores de las mercancías, en hidrocarburos y bienes de consumo, será controlada por ATT y alcaldías.

Panificadores de La Paz suben precio a 50 centavos

Pese a la derogación del DS 748, la Asociación de Panificadores Artesanales  anunció, a través de su máximo dirigente Dandy Mallea, que el precio del pan de batalla de 60 a 65 gr tendrá un costo de 50 centavos de boliviano.

En contacto con La Razón, Mallea señaló que esta determinación fue asumida debido al encarecimiento de los insumos para elaborar ese producto de primera necesidad. “La manteca y el azúcar están por las nubes, y este sector no tiene ganancia porque además debe comprar no sólo harina nacional, sino también importada que antes estaba en Bs 195 y hoy se la encuentra en Bs 230”.

Sin embargo, éste no es el precio final. “Este lunes a las 18.00 se reunirá el sector, que reúne a más de 380 panaderos de El Alto y La Paz, y se tomará una determinación; además pediremos una reunión con el presidente Evo Morales”, sostuvo.

Explicó que el quintal de harina hace 15 días costaba 150 bolivianos, pero hoy cuesta un 30 por ciento más.

"Si el  Gobierno quiere de alguna forma que el sector panificador entregue el pan a un precio razonable para la ciudadanía, debe garantizar insumos como la harina, manteca y azúcar a costos razonables".