Opinión. La gente consultada aseguró que el Gobierno es el principal responsable de solucionar este problema, pero no puede hacerlo porque carece de profesionales, según una encuesta realizada por Página Siete en cuatro ciudades
Página Siete / La Paz
La subida de los precios de la canasta familiar, la falta de empleo y los bajos sueldos, son los tres problemas económicos que más le preocupan a la población, según una encuesta que realizó Página Siete en cuatro ciudades del país.
De un universo de 800 personas consultadas en Santa Cruz, La Paz, El Alto y Cochabamba, el 31% aseguró que el incremento de los precios de los alimentos de la canasta familiar es el tema más preocupante, el 23% afirmó que es la falta de empleo y el 22% que son los bajos sueldos.
Mientras que un 11% dijo que el problema económico que le preocupa es el aumento de las tarifas del transporte público y, en el mismo porcentaje, otro grupo señaló como inquietante la escasez de alimentos.
Hay inquietud
Al respecto, el viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, César Navarro, señaló que opinará una vez publicados los resultados; “prefiero dar un criterio después de leer la encuesta”, dijo.
Según el economista Gonzalo Chávez, la encuesta refleja las inquietudes de la población, algunas como los precios de la canasta familiar, que son de corto plazo, y otras como el empleo, que apuntan al largo plazo.
El investigador de la Fundación Milenio, José Luis Evia, señaló que el tema de precios es central en la economía, porque obedece a la presión internacional, a los elevados ingresos del país alentados por los costos de las exportaciones y a la inflación importada.
En diciembre, el fallido gasolinazo que pretendió aplicar el Gobierno derivó en el encarecimiento de precios y, pese a que la medida fue derogada, éstos nunca disminuyeron, y por el contrario pusieron en alerta a los choferes, quienes piden el aumento de los pasajes, aún sin solución.
Bajo salario
De acuerdo con la investigadora del Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (Cedla), Silvia Escóbar, la tasa de desempleo cayó en 2% -entre 2009, al llegar a 11%, y 2010, cuando se ubicó en 8,9%-, pero no porque se haya generado un mayor número de fuentes laborales, sino debido a que, principalmente, los jóvenes y las mujeres se retiraron del mercado laboral y pasaron a la inactividad.
Según Escóbar, el salario en Bolivia, otro tema abordado en la encuesta, es el más bajo en comparación con los de la región. Por ejemplo, en 2010 en el país el salario mínimo nacional alcanzó los 90 dólares, frente a 194 dólares en Perú, 240 dólares en Ecuador y 270 dólares en Colombia.
¿Quién soluciona el problema?
La encuesta establece que el 57% de los consultados consideró que el Gobierno tiene la responsabilidad de resolver los problemas citados; los llamados a brindar soluciones, para un 24%, son el Gobierno y los empresarios, mientras que un 17% señaló que sólo la empresa privada debe dar las alternativas.
El investigador de Milenio manifestó que evidentemente el que elabora las políticas económicas es el Gobierno, a las cuales sólo responde la empresa privada.
Chávez indicó que el Gobierno es quien elabora políticas públicas que tienen que ver con la industrialización, diversificación productiva y otras.
31% de 800 consultados dice que le preocupa más el aumento de los precios de los alimentos
Un 64% de los encuestados afirmó que el Ejecutivo sí puede resolver el problema del incremento de los precios de los alimentos y un 31% dijo que no podía hacerlo. La causa, según el 30%, es la falta de profesionales.
Chávez consideró que el Gobierno descuidó la economía y que no formula una política que priorice la producción y el empleo.
En cuanto a las causas por las cuales el Ejecutivo no puede resolver el aumento de precios, un 30% sostiene que es por la falta de profesionales y economistas; un 23% lo atribuye a que no trabaja junto a los empresarios y agropecuarios, un 22% considera que se dedica sólo a hacer sólo política y no economía y para un 20% el motivo es el problema del aumento mundial de precios.
El trabajo de campo se realizó entre el 10 y el 12 de marzo por la empresa Mercados y Muestras SRL.
La población objetivo fueron personas mayores de 18 años de las ciudades de La Paz, El Alto, Cochabamba y Santa Cruz.
Este segmento constituye el 39% del total de población de esa edad en el país.
La muestra total fue de 800 casos, que tiene un margen de error de 3,46% y una confiabilidad de 95%.
El tamaño de muestra por ciudad es de 200 casos y tiene un margen de error esperado en cada ciudad de 6,9% y una confiabilidad de 95%.
El sistema de muestreo utilizado fue el aleatorio simple, probabilístico, polietápico, por conglomerados y por cuotas.
Punto de Vista – La gente preocupada por sus bolsillos
Alberto Bonadona – Analista económico
La gente en Bolivia está preocupada por los precios. Esto genera incertidumbre y hace que las expectativas del ascenso de los precios se torne en una profecía autocumplida. Lo que se espera que suceda con los precios, eso sucederá. Uno de cada tres encuestados expresan su temor ante una subida de precios de los alimentos. Si éstos son susceptibles de almacenar, es exactamente lo que la gente hará ante la idea que los precios subirán. Y como la subida de precios se contagia, tal actitud sin duda empujará al temido ascenso. También la gente quiere empleos y es natural que los quieran porque mucha gente si no está desocupada realiza tareas mal remuneradas dentro de lo que se conoce como la informalidad. En un país sin una sólida base industrial, donde los empleos son precarios, es de esperar que la gente busque formas de ganarse el pan de cada día aún con labores que no son productivas. Más que nunca se requieren definiciones precisas de lo que el Gobierno hará para impulsar el aparato productivo. La ciudadanía espera respuestas que se evidencien en sus vidas cotidianas y cada día que pasa es más difícil demostrarlo. La incertidumbre económica no tarda mucho en gestar conflictos políticos que no son los más propicios.
Preocupan conflictos y no hay dinero para comprar productos
No hay escasez en mercados pero faltan compradoras.Canasta. Amas de casa consultadas señalaron que ante la duración de los conflictos quisieran comprar más productos, pero no cuentan con el dinero suficiente.
El mercado Rodríguez durante la mañana de ayer.
Las amas de casa, que acudieron ayer a los mercados para comprar productos alimenticios, manifestaron su preocupación por la prolongación de los conflictos sociales y la imposibilidad de abastecerse con mayor cantidad de alimentos debido a la falta de dinero. Betty Valdez, ama de casa, dijo a Página Siete que desde que se iniciaron los conflictos sociales por el incremento salarial del 15%, hace 12 días, en el mercado de Sopocachi los precios han subido entre 50 centavos a dos bolivianos.
Este incremento se ha dado sobre todo en las verduras y las frutas, según su opinión. “Otro tema es el temor a que la COB y el Gobierno no resuelvan el conflicto y que suban los precios o no lleguen a La Paz, pero no se puede comprar más porque no contamos con dinero”, dijo Valdez.
Otras siete consultadas coincidieron con la primera opinión, como Marianela Suazo, Miriam Zapata y Martha Condarco, que manifestaron que tienen un monto semanal para hacer mercado y no tienen otro ingreso extra para abastecerse.
Alza de precios
De acuerdo a una comparación realizada por este medio, existe un alza de precios en varios productos, especialmente verduras y frutas, en un rango de 50 centavos a dos bolivianos, aunque la carne de res y pollo mantienen sus costos.
En el mercado Rodríguez, la vendedora Helen Calisaya manifestó que se ha incrementado el precio de algunas verduras como la cuarta de cebolla, que pasó de costar seis bolivianos a nueve y la libra de haba también subió de siete a nueve bolivianos.
Las vendedoras advierten que, de continuar los bloqueos carreteros hacia los accesos de las ciudades, como ocurrió la semana pasada, los precios de las verduras y frutas podrían subir incluso un poco más.
La situación es reconocida por las amas de casa, pero no por las vendedoras.
En el mercado Sopocachi las comerciantes señalaron que en lugar de subir los precios han bajado. “La libra de papa cuesta dos bolivianos, antes estaba a 2,50 y tres”, dijo la vendedora Teresa Flores.
Hay abastecimiento
Por otro lado, las vendedoras coincidieron en que todos los productos llegan con normalidad a sus puestos y no hay escasez de ninguno. El abastecimiento es absolutamente normal.
En los supermercados, las personas adquirieron los productos con normalidad, aunque los consultados reconocieron que vieron una afluencia mayor de personas que quieren comprar.
Norma Barrientos, ama de casa, manifestó que no se observa escasez ni un incremento en los precios en general, al menos en los productos de primera necesidad. Con ella coincidieron otros cinco clientes como Ana María Ramírez, Lucía Cárdenas y Pedro Salcedo. Página Siete / La Paz