Índice de los Editoriales de Periódicos
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Los Tiempos: SOSPECHOSOS INTERESES EN EL VALLE DE SAJTA
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El Deber: Las elecciones en Perú
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Cambio: Es la hora de los pueblos
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La Prensa: Sospechosos intereses en el Valle de Sajta
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El Diario: Dudas y desesperanzas para las inversiones
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El Mundo: Sembradores
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El Día: Declarar libre a la docencia es la amenaza a maestros
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El Día: La llegada del Ministro de Defensa iraní a Bolivia
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El Día: Una cuestión de seguridad
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El Día: Bolítica
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El Día: La capacidad de Humala
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El Día: Peligros de la improvisación
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El Día: Cliometría como actitud
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El Día: Dime con quién andas…
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El Día: Creerle a un borracho
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El Día: Bolítica
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El Día: Bolítica
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El Día: Se enojó la señora
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El Día: El cáncer de la corrupción
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El Día: Estado surrealista plurinacional
Los Tiempos: SOSPECHOSOS INTERESES EN EL VALLE DE SAJTA
Son tan confusas las noticias que llegan de los predios universitarios del trópico, que las autoridades involucradas deben actuar con máxima claridad
Desde la mañana del pasado jueves, y hasta que las principales autoridades de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS) se comprometieran a construir una "Unidad Académica Interfacultativa" con aulas, albergues para estudiantes y docentes, además de otras dependencias, en Valle de Sajta, la carretera que une a Cochabamba con Santa Cruz fue sometida a un drástico bloqueo que perjudicó a varios cientos de transportistas, turistas, comerciantes y a todos quienes que por un motivo u otro se ven obligados a transitar por la principal carretera que tiene nuestro país. Era tan grande el perjuicio que el bloqueo estaba ocasionando, que el Gobierno llegó a considerar la posibilidad de recurrir a fuerzas militares si las policiales no hubiesen sido suficientes para restablecer la normalidad.
El motivo de tan drástica medida de presión, según la versión de los estudiantes y los padres de familia de la región del trópico que organizaron el bloqueo apoyados por cocaleros de las federaciones del Mamoré, Trópico y Carrasco, por alcalde de Puerto Villarroel y los concejales de ese municipio, era su deseo de que la UMSS instale en los predios que posee en el Valle de Sajta una "Facultad Intercultural del Trópico". Nadie pudo explicar con precisión en qué consistiría la tal facultad, pero según algunos dirigentes se trataría simplemente de abrir facultades de derecho, administración de empresas y medicina pues no están conformes con que las tres carreras con que la universidad cuenta en esa zona: Ingeniería Tropical, Ingeniería Ambiental y Pedagogía Productiva.
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La desproporción entre la exigencia y los medios que emplearon para imponerla es por demás evidente. Pero no debiera sorprender, pues durante las últimas semanas han abundado los indicios de que algo muy sospechoso ocurre en esa región y las 7.000 hectáreas de la UMSS son objeto de atención por motivos que muy poco tienen que ver con inquietudes académicas.
Cabe recordar al respecto que hace sólo unos días atrás una serie de informes de la Fiscalía del Distrito, de la Unidad Móvil para el Patrullaje del Área Rural (Umopar) y de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) coincidieron al indicar que los predios universitarios se habían convertido en una especie de territorio libre, fuera del alcance de la ley y de las instituciones del Estado, donde grupos delictivos dedicados a la fabricación de cocaína habían sentado su pleno dominio. Una imagen muy precisa de lo que eso significa la dio un experto en investigaciones sobre temas vinculados con la droga quien definió a los terrenos universitarios del Valle de Sajta como un "parque industrial del narcotráfico".
Para afrontar tan gravísima situación, las autoridades de la UMSS han ofrecido ceder parte de los terrenos para que se construyan ahí instalaciones militares, propuesta que, lejos de ser aceptada por los lugareños fue respondida con un pedido de expropiación.
Como es fácil constatar, son muchos, muy complejos y muy confusos los intereses que se esconden tras cada una de las noticias que durante los últimos días han hecho del Valle de Sajta objeto de tanta atención. Razón más que suficiente para que las autoridades departamentales, en vez de minimizar el problema, lo afronten sin dejar lugar a las dudas y las suspicacias.
El Deber: Las elecciones en Perú
Casi 20 millones de peruanos acudieron ayer a las urnas en el vecino país. Estas elecciones presidenciales, en su segunda y definitiva vuelta, han sido y serán clave para proseguir con un modelo exitoso y, al mismo tiempo, acrecentar la fe ciudadana en las ventajas de la democracia representativa. Perú creció sorprendentemente en los últimos años, pero su deuda social aún es grande: más del 35% de los peruanos siguen viviendo en situaciones de pobreza casi extrema. Esta falla ha sido uno de los ejes candentes de la reciente campaña.
Como se apuntó previamente, la victoria electoral se decidió en una reñida contienda entre Keiko Fujimori, la hija del discutido expresidente Alberto Fujimori –preso por varios delitos- y Ollanta Humala, un ex militar populista que dio un giro desde sus simpatías abiertas hacia el venezolano Hugo Chávez hasta posturas moderadas al estilo del ex mandatario brasileño Lula Da Silva. Esta última transición resultó exitosa y ha permitido a Humala conquistar ayer la mayoría del voto popular.
Resta ver cómo se distribuirán los escaños congresales para dilucidar la mayor o menor capacidad de gobernabilidad del nuevo presidente, que iniciará funciones el 28 de julio. En los importantes centros urbanos de Lima y Callao triunfó la Fujimori, mientras que Humala ganó en muchos distritos rurales. Esta es otra prueba más de la extrema polarización que caracterizó estos comicios.
Luego de los resultados llega la hora del interés nacional, el momento en que victoriosos y vencidos deben pensar en lo que resulte mejor para el pueblo peruano en su conjunto. Es por eso que -desde nuestra modesta perspectiva- creemos que será importante limar asperezas, estimular consensos y lograr puntos constructivos de entendimiento. Por otro lado, hay que continuar con un modelo económico que a todas luces ha funcionado, pero al mismo tiempo urge insertarle en su dinámica elementos sociales que mitiguen niveles de pobreza y generen mayor igualdad de oportunidades. La tarea es compleja, no será fácil la labor del nuevo mandatario.
Con Bolivia la agenda bilateral es amplia y ella se inscribe en el ámbito fraterno de unas relaciones sólidas a lo largo del tiempo. Del mismo modo, surge una agenda latinoamericana y mundial para el nuevo ocupante del Palacio de Pizarro. Las primeras expresiones de Humala tras el triunfo electoral indican mesura, voluntad de compromiso y de continuidad, con el sello sí de un compromiso de cambio moderado. Veremos más adelante cómo en verdad caminarán las cosas. Ojalá sea para mejor.
El verdadero vencedor de los comicios en el hermano país ha sido el pueblo, como siempre ocurre en todo desenlace democrático. Saludamos al hermano Perú y le deseamos lo mejor en esta nueva etapa de su vida institucional, que pronto se iniciará bajo la flamante conducción de Ollanta Humala.
Cambio: Es la hora de los pueblos
Bolivia, contrariamente a lo que se cree, no es un país altiplánico, es esencialmente amazónico. El 65% del territorio nacional —de norte a sur— está influenciado por la cuenca del Amazonas y pertenece a la zona de tierras bajas. Es una región donde se afinca una vasta biodiversidad que habita su floresta, sus ríos y sus lagos, que la convierte en patrimonio natural del mundo.
Gran parte del ciclo del carbono, que es crucial para la ecología del planeta y el clima, se produce, precisamente, en la Amazonia, que involucra a nueve países de Sudamérica, por lo que se la conoce también como "los pulmones de la Tierra".
La Amazonia boliviana está bien reputada por su contribución decisiva para mejorar el precario equilibrio ambiental del planeta que, por el desorden meteorológico provocado por el calentamiento global, puede colapsar. En la última década, el país se ha convertido en un líder mundial en la promoción del manejo sustentable de la selva, certificando la madera que ha sido obtenida de bosques bien gestionados.
Sin embargo, Bolivia, como otras naciones del mundo, es víctima del cambio climático. Se habla del calentamiento global, del deshielo, de inundaciones y sequías, pero se evita establecer de dónde vienen todos esos fenómenos.
Pero el presidente Evo Morales lo denunció en su momento, en distintos foros internacionales, que todo aquello nace de la mal llamada globalización —o globalización selectiva que no respeta la pluralidad o las diferencias entre los pueblos— y el capitalismo. Es el capitalismo el que lleva en sí mismo una exagerada e ilimitada sed de industrialización. La deforestación, por ejemplo, es una consecuencia de la industrialización y es una amenaza para el futuro del Amazonas boliviano, donde ya hay gran cantidad de árboles y plantas en peligro de extinción.
Y cuando los gobiernos latinoamericanos se organizan, junto a los movimientos sociales para protestar, para condenar políticas de desarrollo que no resuelven los problemas de pobreza y marginación, se los sataniza, se los acusa y se los amenaza con intervenciones militares, como si los pueblos tuvieran la voz embargada para reclamar por sus justas necesidades que son, en definitiva, cómo salvar la vida, cómo salvar a la humanidad.
Los presidentes del mundo, ya lo dijo Evo Morales en la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas de 2010, tienen la responsabilidad de pensar en el valor de la vida, en la humanidad, en cómo salvar al planeta Tierra.
La propia ONU destacó el esfuerzo del Estado boliviano de darle prioridad política, de darle protagonismo a la necesidad de proteger la Madre Tierra, de combatir el cambio climático en instrumentos tan importantes como su Constitución Política. Morales ha censurado los acuerdos de las cumbres sobre cambio climático de Copenhague y Cancún, porque considera que son insuficientes para proteger el medio ambiente. En la cumbre de Cancún la posición boliviana, que considera a la Madre Tierra sujeta de derechos, se quedó sola frente a otros 193 países.
Hoy, organizaciones ecologistas, instituciones, grupos políticos, asociaciones y sindicatos se han sumado a multitud de acciones para celebrar el Día Mundial del Medio Ambiente bajo el lema "Bosques: la naturaleza a tu servicio".
El Día Mundial del Medio Ambiente, establecido por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1972, se conmemora anualmente el 5 de junio para concienciar sobre el medioambiente a nivel mundial y en esta ocasión las acciones han ido dirigidas a la conservación, protección y gestión de forma sostenible de los bosques.
Es importante la fecha para recordar lo que sucede con la Madre Tierra, pero lo es aún más cambiar modelos económicos de explotación del hombre, de destrucción de nuestros recursos naturales y erradicar el capitalismo. Y es que en muchas naciones del mundo soplan vientos de cambio que van y vienen clamando justicia y nuevas oportunidades de supervivencia y desarrollo.
Organizaciones ecologistas, instituciones, grupos políticos, asociaciones y sindicatos se han sumado a multitud de acciones para celebrar el Día Mundial del Medio Ambiente, bajo el lema "Bosques: la naturaleza a tu servicio".
La Prensa: Sospechosos intereses en el Valle de Sajta
Son tan confusas las noticias que llegan de los predios universitarios del trópico, que las autoridades involucradas deben actuar con máxima claridad.
Desde la mañana del pasado jueves, y hasta que las principales autoridades de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS) se comprometieran a construir una ?Unidad Académica Interfacultativa? con aulas, albergues para estudiantes y docentes, además de otras dependencias, en Valle de Sajta, la carretera que une a Cochabamba con Santa Cruz fue sometida a un drástico bloqueo que perjudicó a varios cientos de transportistas, turistas, comerciantes y a todos quienes por un motivo u otro se ven obligados a transitar por la principal carretera que tiene nuestro país. Era tan grande el perjuicio que el bloqueo estaba ocasionando, que el Gobierno llegó a considerar la posibilidad de recurrir a fuerzas militares si las policiales no hubiesen sido suficientes para restablecer la normalidad.
El motivo de tan drástica medida de presión, según la versión de los estudiantes y los padres de familia de la región del trópico que organizaron el bloqueo apoyados por cocaleros de las federaciones del Mamoré, Trópico y Carrasco, por el Alcalde de Puerto Villarroel y los concejales de ese municipio, era su deseo de que la UMSS instale en los predios que posee en el Valle de Sajta una ?Facultad Intercultural del Trópico?. Nadie pudo explicar con precisión en qué consistiría la tal facultad, pero según algunos dirigentes, se trataría simplemente de abrir facultades de derecho, administración de empresas y medicina, pues no están conformes con las tres carreras con que la universidad cuenta en esa zona: ingeniería tropical, ingeniería ambiental y pedagogía productiva.
La desproporción entre la exigencia y los medios que emplearon para imponerla es por demás evidente. Pero no debiera sorprender, pues durante las últimas semanas, han abundado los indicios de que algo muy sospechoso ocurre en esa región y las 7.000 hectáreas de la UMSS son objeto de atención por motivos que muy poco tienen que ver con inquietudes académicas.
Cabe recordar al respecto que hace sólo unos días atrás, una serie de informes de la Fiscalía del Distrito, de la Unidad Móvil para el Patrullaje del Área Rural (Umopar) y de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) coincidieron al indicar que los predios universitarios se habían convertido en una especie de territorio libre, fuera del alcance de la ley y de las instituciones del Estado, donde grupos delictivos dedicados a la fabricación de cocaína habían sentado su pleno dominio. Una imagen muy precisa de lo que eso significa la dio un experto en investigaciones sobre temas vinculados con la droga, quien definió a los terrenos universitarios del Valle de Sajta como un ?parque industrial del narcotráfico?.
Para afrontar tan gravísima situación, las autoridades de la UMSS han ofrecido ceder parte de los terrenos para que se construyan ahí instalaciones militares, propuesta que, lejos de ser aceptada por los lugareños, fue respondida con un pedido de expropiación.
Como es fácil constatar, son muchos, muy complejos y muy confusos los intereses que se esconden tras cada una de las noticias que durante los últimos días han hecho del Valle de Sajta objeto de tanta atención. Razón más que suficiente para que las autoridades departamentales, en vez de minimizar el problema, lo afronten sin dejar lugar a las dudas y las suspicacias.
El Diario: Dudas y desesperanzas para las inversiones
En el mes de enero pasado, fecha de inicio de un nuevo año de gobierno del presidente Morales, se pensó que, finalmente, habrían cambios en las políticas gubernamentales. Hoy, a sesenta y siete meses del régimen, se llega a la conclusión de lo poco o nada avanzado en el campo de las inversiones, del incremento de la producción y de las perspectivas futuras para la economía nacional.
Ante lo que ocurre, cabe la pregunta: ¿por qué la pertinaz oposición a administrar el Estado como es debido? En el día a día se dice y promete todo en los viajes internos del Primer Mandatario; parecería que hay la intención de ilustrar sólo con palabras lo que podría ser y los pueblos – especialmente campesinos – creen obnubilados lo que se les dice, cuando la verdad es diferente.
Hay un manto de dudas que se ha cernido sobre la comunidad nacional sobre cambios efectivos que podrían suceder, y no son esos que impliquen adoptar doctrinas obsoletas – como la comunista y las socialistas de extrema izquierda – que tanto daño han causado a la humanidad, sino una renovación total de conductas y propósitos, un actuar que esté acorde con las urgencias y necesidades nacionales, un propósito para encarar decidida y decisivamente un desarrollo armónico del país, pero dando los pasos que corresponda.
Hay desesperanza en el rubro de las posibles inversiones tanto nacionales como extranjeras. Quienes poseen dinero en el país se mantienen a la expectativa y, en casos, se apodera de ellos la manía consumista porque el mercado nacional – el legal y el del contrabando – son proveedores seguros de todo y a todo precio. Los posibles capitalistas extranjeros siguen creyendo que, aún con ciertas limitaciones, podrían entrar a Bolivia e invertir, pero esperan – como es lógico – las garantías jurídicas para hacerlo porque, arriesgarse al azar sólo puede ser acción de orates.
La actividad agropecuaria en sus rubros de producción e industrialización, las industrias instaladas, los empresarios que producen calculando lo mínimo negociable y poco exportable; la empresa pequeña y todo elemento productor esperan pasos efectivos para hacer todo lo que deben y no aceptan riesgos que, en extremos, impliquen pérdidas de lo invertido y, lo más grave, anular las esperanzas de socios y familiares que mantienen latente la posibilidad de mejorar su producción, sus ventas y hasta exportaciones.
El Gobierno en diversas formas expresa la existencia de garantías y la intención de ayudar; pero sin la adopción de medidas pertinentes a lo que significan sólo las declaraciones; sin mostrar la mínima intención para el reinado de las garantías jurídicas. Se intuye la aprobación de una nueva Ley General del Trabajo, pero sólo vista por el régimen y algún sector social, sin tomar en cuenta a ningún empresario, sin mostrar la posibilidad de acuerdos donde se contemplen las obligaciones y los derechos de las partes para que la Ley – como debe ser – contenga los elementos mínimos de equidad y ecuanimidad que, luego, sean factor decisivo de justicia. El Gobierno debe tomar en cuenta que las fantasías no obran milagros y que las simples promesas son juego de palabras que nadie cree como ciertas y que sólo los hechos cuentan.
El Mundo: Sembradores
El 6 de junio ha sido establecido en nuestro país como el Día del Maestro, en memoria del nacimiento en 1840 de don Modesto Omiste; un hombre multifacético que destinó una buena parte de su vida a la educación, desde su Potosí natal, inició una tarea que luego fuera difundida por todo el territorio nacional, brindando a la juventud y en especial a la niñez la oportunidad de ampliar sus conocimientos y superarse en el desarrollo de su vida.
Miles de personas, a partir de esta inspiradora labor, dedicaron sus esfuerzos a la tarea de crear en los niños, no solo la capacidad de aprender y mejorar sus conocimientos, sino también el civismo que consiste en el amor a la patria, a Dios, a sus mayores y a todas las personas en general. Desde los pueblos originarios, donde se entregaba a los amautas la tarea de de enseñar a los menores los sistemas de producción como la caza, la pesca y las labores agrícolas, hasta los conocimientos religiosos, para honrar a la Madre Tierra que con sus frutos, permitía el desarrollo de la vida.
Fue la inspiración de la obra de Modesto Omiste que alentó a los gobiernos liberales de los primeros años del siglo XX, a la creación de un sistema de educación nacional con el nacimiento de la Escuela Normal Superior de Maestros que hoy continúa su trabajo en la formación de las personas que luego dedicarían sus esfuerzos la sembrar conocimientos en la mente de nuestros niños.
Fue en 1924 que evocando esa tarea ejemplar, el gobierno de Bautista Saavedra instituyó la celebración del Día del Maestro, precisamente para poner en relieve la tarea de esas personas que en forma abnegada, tomaron la decisión de volcar sus esfuerzos a la tarea de la educación.
Ese sistema de educación que favorecía en particular a los niños de las ciudades, fue luego extendida hacia las áreas rurales por otros visionarios como Elizardo Pérez y Avelino Siñani que a partir del ayllu de Warizata, lograron extender las labores educativas para reivindicar los derechos de los indígenas. La creación de la escuela de Warizata el 2 de agosto de l931 dio lugar a que esa fecha fuera luego proclamada como la del Día del Indio, por el gobierno del Tcnl. Germán Busch.
Como afirma Álvaro Puente en una entrevista que publicamos en la víspera, el magisterio es una vocación, el maestro nace con ese sentimiento de servicio y consagra su vida a la educación, es precisamente a ese maestro al que rendimos nuestro homenaje.
En los últimos tiempos, en nuestra patria se ha vinculado al magisterio con los movimientos sociales con la presión y la oposición permanente contra los gobernantes, siguiendo consignas políticas, esa forma de actuar a ha frustrado la función naturales del maestro, para convertirlo en un instrumento político que resta a la niñez y la juventud el beneficio de su formación, porque sus maestros están dedicados a la tarea de realizar huelgas, manifestaciones y otros movimientos sociales que si bien reivindican los derechos de las personas, aplazan los posibilidades de que ellas puedan prepararse para enfrentar con solvencia el futuro.
Nuestro homenaje esta pues destinado a esos maestros cuya entrega hace posible el nacimiento de una sociedad más solvente, capaz de forjar su destino sin influencias nocivas que son producto del manejo abusivo que algunas personas hacen de sus semejantes, para satisfacer sus intereses egoístas.
Si bien los gobiernos se han propuesto en varios momentos mejorar el sistema de la educación en nuestro país, con el Código de la Educación Boliviana, la ley de Reforma Educativa y actualmente el proyecto Pérez Siñani, ningún proyecto podría dar los frutos esperados, si no fuera realizado con dedicación por la labor de los educadores en cuyas espaldas pesa la responsabilidad de sembrar conocimientos, despertar capacidades y enseñar a convivir, para quienes hoy llega nuestro ferviente homenaje.
El Día: Declarar libre a la docencia es la amenaza a maestros
Los maestros celebran hoy su día enfrentados con el gobierno del presidente Evo Morales que ha amenazado con declarar libre la docencia y todo porque éstos reclaman mejores salarios y no los privilegios, de aumentos mayores al 10% como ocurre con los trabajadores de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos.
Sin embargo, lejos de desanimarnos el hecho debe plantear nuevos desafíos sobre los cuales deben ser los derroteros de lucha para apuntar a que la docencia sea considerada una profesión estratégica del Estado, pues la educación debe seguir siendo la más alta función de un país que se precie de apuntar a emerger del subdesarrollo.
Declarar libre la docencia significará atentar contra principios constitucionales consagrados en el artículo 46 de la Constitución Política del Estado que habla que “toda persona tiene derecho: al trabajo digno, con seguridad industrial, higiene y salud ocupacional, sin discriminación, y con remuneración o salario justo, equitativo y satisfactorio, que le asegure para sí y su familia una existencia digna".
Y es eso lo que los profesores han reclamado en las calles, tener un sueldo que les permita vivir dignamente, pero en contrapartida sectores sociales afines al Gobierno de turno han pedido que se declare libre a la docencia.
Por eso es que el Gobierno “escuchando a esos sectores sociales” han anunciado que estudiarían la posibilidad de llevar a un referéndum ese pedido.
Pero es solamente para amenazar y amedrentar, como lo han hecho también con el descuento por los días no trabajados durante las movilizaciones, como si la protesta no estuviera también consagrada en la Carta Magna, y como si este Gobierno no hubiera hecho de esa arma un abuso cuando en una oportunidad casi paralizó el país durante 22 días en un bloqueo carretero en la zona del Chapare.
Por eso es que en este día se deben renovar votos, el primero de compromiso, en homenaje a aquel maestro, Modesto Omiste que consagró su vida a la docencia y fundó la primera Escuela Normal en Sucre, que a su vez fue un homenaje a los 100 años de la gesta libertaria de 1809, bajo los principios de ser siempre libres y de pelear contra cualquier tipo de dominación.
Lo segundo, por renovar nuestros votos frente a la vocación que no es otra cosa que la enseñanza de valores universales, sueños y estrategias para que puedan mejorar la calidad de vida de nuestros alumnos .
Porque como decía el filósofo griego Pitágoras: educar no es dar carrera para vivir, sino templar el alma para las dificultades de la vida, que combine una estrategia para ganarse la vida y a la vez que enseñe a vivir.
Y el tercero, a renovarnos en forma permanente y usar todos los adelantos tecnológicos a nuestro favor para favorecer del proceso de enseñanza y aprendizaje, teniendo en cuenta la globalización, la enseñanza por competencias y la acreditación bajo estándares internacionales de las universidades.
El autor es docente.
El Día: La llegada del Ministro de Defensa iraní a Bolivia
Claramente la visita del ministro de defensa iraní a nuestro país, ha tenido mayor repercusión en el contexto internacional que en el interno. En nuestro medio – el hecho – no ha pasado de ser uno de los tantos "errores" a los que nos tienen acostumbrados esa cartera de estado y el gobierno en general; sin embargo, en el contexto internacional, las repercusiones son una profunda preocupación.
Como es estilo del Gobierno central, luego del escándalo que suscitó la llegada del jerarca iraní a nuestro país, se intentó minimizar el hecho, arguyendo que se trataba de un "error" debido al desconocimiento del ministerio de defensa y de la propia cancillería, del mandamiento de captura internacional que pese sobre el general Ahmad Vahidi. Es probable que la opinión publica nacional haya acabado aceptando esas explicaciones; sin embargo, en las esperas internacionales, la misma (las explicaciones) fueron tomadas como un intento de evadir responsabilidades de orden diplomático, jurídico y policial, comprometiéndose la imagen del país, justo en un momento que las tensiones referidas a la reivindicación marítima del país, ingresa en una etapa bastante crítica.
Por supuesto que los intentos de minimizar y desviar la atención al tema por parte del Gobierno, no impiden que el suceso en cuestión, "destape" elementos centrales de las relaciones de Bolivia con el país musulmán. Ahora y luego de esta visita del general Vahidi, la preocupación se centra en la peligrosa relación que se viene gestando entre Irán, Venezuela, Cuba y Bolivia; sobre todo, como ha quedado evidente, después de que uno de los principales jerarcas del régimen iraní, haya llegado a nuestro país, para inaugurar un centro de formación militar, anticolonial, antiimperialista y anticapitalista, como señaló el propio presidente Morales; es decir, poco menos que un centro de formación de "talibanes" latinoamericanos.
Se conoce que debido al escándalo, el jerarca iraní, no pudo participar del acto; sin embargo, en el mismo estuvieron presentes representantes de los gobiernos de Cuba, Venezuela, Irán y Panamá. Pero debemos preguntarnos: ¿quién es Ahmad Vahidi? Se trata del Ministro de Defensa del régimen Iraní, encabezado por Mahmud Ahmadineyad; no es un funcionario de segundo o tercer nivel, no es un agregado o diplomático. Diríamos que por todo esto, estamos hablando del hombre más fuerte de poder bélico y militar del régimen islamista de Irán. Un personaje que, con seguridad, no asiste "así nomás" a actos a los que se le invita en otro continente y sobre todo, que toma todos los recaudos necesarios para evitar que pueda ser capturado por la Interpol, como bien el mismo debe saber que puede suceder.
Ahmad Vahidi no sólo es uno de los más importantes jerarcas del régimen musulmán de Irán; sino y sobre todo – como lo ha reflejado la prensa nacional e internacional – es buscado por la policía internacional debido a su participación en el atentado terrorista de 1994 en la AMIA (Argentina), hecho luctuoso que provoco la muerte de 85 personas (entre ellas 6 bolivianos) y mas de 200 heridos. Es por ese hecho terrorista que – luego de varios años de investigaciones – el 2007, la interpol ordenó su captura y la de otros cinco iraníes y un libanés; sin embargo, debido a la inmunidad diplomática de la que goza, no pudo ser efectivizada hasta la fecha.
La situación es aún más preocupante cuando se conoce – como lo han denunciado miembros de la bandada de Unidad Nacional en el parlamento plurinacional – que días antes del arribo del jerarca militar iraní, se hubiera aprobado una disposición para permitir que ciudadanos iraníes y bolivianos puedan ingresar y salir de ambos países, sin la necesidad de portar visa.
¿Qué dijeron las autoridades bolivianas ante lo sucedido? Por una parte, el propio canciller Choquehuanca, hizo conocer que se había pedido a la delegación iraní, que el indicado general Vahidi abandone el país; la que fue contradecida por la ministra de justicia, Nilda Capa, quien señalo que fue su propio estado (el Iraní) el que ordenó su repliegue. Por otra parte, autoridades como el vicepresidente de la república y el presidente de la cámara baja del congreso, manifestaron que el caso no pasaba de ser un incidente diplomático que debiera cerrarse, en vista de las explicaciones que fueron emitidas por el país ante la Argentina.
¿Qué dijo el propio general Ahmad Vahidi a su arribo a Terán (Irán)? El señalo que "la diplomacia activa de Irán, una vez más, fabricó enemigos pasivos", que su visita a Bolivia se realizó por invitación de su homologa boliviana, María Cecilia Chacón y calificó su estadía en Bolivia como positiva.
Como se darán cuenta, se trata de algo más que de un incidente diplomático que compromete seriamente la imagen de Bolivia en el contexto internacional. No es posible que mientras se movilice a toda la ciudadanía boliviana para emprender acciones por la reivindicación marítima en el contexto internacional; a la vez y de la manera más irresponsable y cínica, se quiera minimizar las consecuencias de tan peligrosa relación.
Bolivia en estos momentos, requiere del apoyo de todas las naciones del concierto internacional, a fin de garantizar que la demanda marítima sea finalmente escuchada y resuelta; sin embargo, lo que hace el Gobierno, es precisamente lo contrario, cuando solivianta los intereses de regímenes totalitarios como los de Irán, Cuba y Venezuela.
El Día: Una cuestión de seguridad
Quienes han emprendido desde hace mucho tiempo negocios de tierras en torno al aeropuerto internacional de Viru Viru, y han dado lugar a la ocupación reiterada e ilegal de estos espacios geográficos por loteadores, no se han detenido a pensar en el grave perjuicio que pueden ocasionar a la actual categoría internacional de aeronavegación del principal aeropuerto cruceño. Resulta lamentable también, que las autoridades pertinentes no hayan actuado desde un principio con el mayor rigor posible ante la invasión de tierras, que por razones obvias ponen en entredicho no sólo la seguridad aeroportuaria, sino el propio desarrollo y expansión de la mayor terminal aérea cruceña.
Conviene insistir en el hecho que, para la aeronavegación internacional, la seguridad es uno de los aspectos en los que no cabe hacer excepciones ni concesiones gratuitas. Por el contrario, las exigencias para acceder a cada una de las categorías de aeropuerto son rigurosas y las mismas sometidas a evaluaciones periódicas y rigurosas. Dadas las circunstancias actuales, resulta una auténtica preocupación regional la posibilidad cierta de que el aeropuerto de Viru Viru pierda su certificación de categoría uno en aeronavegación. Ello implicaría no sólo una pérdida de prestigio sino también un descenso de la utilización del aeropuerto cruceño para los vuelos internacionales.
De este modo, resulta comprensible y sensato que se actúe de inmediato para poner fin a la invasión de tierras en torno al aeropuerto. Todavía más, se hace preciso desalojar cuanto antes a quienes ocuparon los terrenos adyacentes porque su presencia constituye la prueba fehaciente de la inseguridad del espacio aéreo de Santa Cruz. Si se considera que la evaluación por parte de la Administración Federal de Aviación (FAA), máxima autoridad de aeronáutica civil de Estados Unidos, tendrá lugar a fines de julio próximo, existen razones de más para apresurar la solución del conflicto de tierras en Viru Viru.
Para ello, hará falta no sólo la participación de la Gobernación y de los municipios de Warnes y Santa Cruz, a manera de aunar esfuerzos, sino también necesidad de recurrir a la fuerza pública si el caso amerita. Si bien se trata de una responsabilidad puntual de Aasana y de la propia Sabsa, la toma de decisiones legales se presenta como ineludible. Siendo Viru Viru un patrimonio cruceño, nada mejor que el conjunto de la institucionalidad en defensa de su más importante terminal aérea. La defensa es contra quienes han trasgredido las condiciones que acreditan la seguridad de un espacio aéreo conforme las normativas internacionales a las que se acogen los aeropuertos del mundo.
Por tanto, no se trata tan sólo de un importante asunto técnico de la aeronáutica en materia de seguridad que conviene resolver cuanto antes, sino también de la capacidad de las autoridades de un país o región para mantener las condiciones de operabilidad segura en una terminal aérea bajo los términos de una cooperación corresponsable. En el caso de Viru Viru, se hace perentoria una auténtica demostración del poder de persuasión en aras del interés colectivo, sumada al buen uso del principio de autoridad para poner las cosas en su lugar. Porque de lo que se haga o deje de hacer en torno a este conflicto dependerá el prestigio y la conservación de una categoría internacional.
Para la aeronavegación internacional, la seguridad es uno de los aspectos en los que no cabe hacer excepciones ni concesiones gratuitas.
El Día: Bolítica
Creo que la Policía debería dejarse de rasgar las vestiduras y admitir que estamos en una Bolivia autonómica y que la creación de otros organismos de seguridad son permitidos y que la gente clama por un cambio de timón en ese tema’.
Tomás Monasterio
DIPUTADO DE CONVERGENCIA NACIONAL
Se dice que: La Policía Nacional es la institución que en forma exclusiva se debe ocupar de la seguridad ciudadana en el país y que cualquier otro organismo que aparezca en forma paralela debe ser rechazado
Yo creo que la solución para el tema de la inseguridad es que todas las gobernaciones destinen el 10% de las regalías para potenciar a la Policía con efectivos, vehículos y otros medios científicos en vez de crear organismos paralelos’.
Freddy Soruco
EX COMANDANTE DE LA POLICÍA DE SANTA CRUZ
El Día: La capacidad de Humala
Mucho antes de la primera vuelta electoral en Perú, este Penoco se preguntaba si Humala podría con Perú. Obviamente, la pregunta no estaba dirigida a la posibilidad de su triunfo, hecho que estaba cantado desde hace tiempo, sino a la capacidad destructiva que pueda tener el líder populista, en un país que ha alcanzado niveles de crecimiento históricos en los últimos diez años, conducido por presidentes que apenas han tenido la virtud de dejar la economía peruana en “piloto automático”, mientras la capacidad emprendedora de la gente, el mercado y la apertura a las inversiones extranjeras hicieron su trabajo, algo que pudo haber sucedido en Bolivia, si es que no hubiera intervenido la mano estatista de los aventureros estalinistas. Nuestros populistas destruyeron toda la industria gasífera, han derrumbado la soberanía alimentaria, han eliminado mercados y han corrido inversionistas a granel. En un contexto algo más reducido, aquello fue relativamente fácil, aunque nunca hay que subestimar la capacidad demoledora de nuestros “pluris”. Veremos hasta dónde es capaz de llegar el nuevo ahijado de Hugo Chávez en el Cono Sur. Él dice ser más bien apegado a Lula. Eso se sabrá ni bien asuma la presidencia de Perú.
El Día: Peligros de la improvisación
En este Gobierno todo es improvisado, desde la cabeza a los pies. Por lo tanto todo se hace al andar y si sale bien se lanzan fuegos de artificio y flamean wiphalas y si sale mal, mala suerte, no se habla más del tema, se da por concluido. Con sólo echarle una mirada a la sala del Gabinete, cualquiera puede darse cuenta que casi nadie está en su lugar. Se ocupan los ministerios por etnias, regiones, movimientos sociales, compadrazgos o lo que sea. De 20 ministros –por citar un ejemplo– no hay un cruceño, suponiendo que, de acuerdo con la importancia de Santa Cruz, debería haber por lo menos seis o siete. Pero eso no interesa, los cambas no importan, lo importante es que S.E. esté cómodo, a sus anchas, entre los suyos nomás.
La improvisación ha traído, desde el primer instante, la más penosa desgracia en un área muy sensible: el Servicio Exterior. Si en anteriores administraciones es evidente que se relevaba a los viceministros y a la mayoría de los jefes de misión cuando cambiaba el Gobierno, ahora, con el MAS, se barrió con toda la Cancillería de buenas a primeras. No quedó "nadies". "Ya no más los diplomáticos de coctel" fue el lema para arrasar con quienes se habían formado en la Academia Diplomática o que tuvieran algún apellido con tufillo a presunta oligarquía. Se los reemplazó por militantes del MAS o por empleados públicos que tuvieron que declararse filomasistas. Se fueron los diplomáticos de los cocteles y aparecieron los del acullico.
¿Se puede entender un Estado que no tenga un cuerpo diplomático profesional? Sólo se lo entiende si, como ahora, el Presidente se hace cargo de la conducción internacional, improvisando la política exterior con sonadas arengas que pueden darse indistintamente en el Palacio de Gobierno o en los mercados chapareños. Por esas razones sólo la catástrofe diplomática puede pegarnos un tirón de orejas y alertarnos de que vamos por mal camino. Lo malo es que los tirones de orejas ya están a la orden del día y que sin una línea diplomática vamos de tumbo en tumbo.
No sólo se ha fracasado en las negociaciones con Chile, porque de la búsqueda enamoradiza de la "confianza recíproca", pasamos súbitamente a la demanda despechada en tribunales internacionales contra La Moneda, luego a la amenaza de retornar a armar líos en la OEA, y de ahí al anuncio solapado de una virtual denuncia del Tratado de 1904. Todo improvisado, desgraciadamente. Todo producto o de una rabieta por la captura del general Sanabria en Chile sin conocimiento de S.E. o por tratar de recuperar popularidad. La respuesta chilena fue contundente y torpe aunque nos hiciéramos los desentendidos: tenemos un Ejército disciplinado y poderoso para hacer respetar lo pactado. Amén.
La diplomacia improvisada y sometida al capricho político de S.E. nos ha conducido a formar parte del "Club de los Pobretones", el ALBA, donde sólo uno de los socios tiene dinero. Eso ya es una enorme desventaja para el resto de los cofrades. Pero lo peor del ALBA son las influencias del ricachón en la mesa de póquer, que nos ha distanciado del mundo desarrollado, nos hace pelear con los gringos, con los europeos, y nos ha presentado a amistades peligrosas como Gaddafi, Ahmadineyad y otros tahúres. Al mismo tiempo nos alejamos de Perú y deterioramos nuestra amistad con la Comunidad Andina de Naciones (CAN) por nuestro absurdo empecinamiento en que la CAN no pacte tratados de libre comercio (TLC) con EEUU ni con la UE. Eso, con una diplomacia profesional, no sucedería.
Pero el cherry de la torta, ha sido el escándalo desatado por la desfachatada visita que hizo a Bolivia el ministro de Defensa de Irán, Ahmad Vahidi. El general Vahidi tiene orden de arresto internacional por su posible participación en el atentado contra la AMIA judía en Buenos Aires, que causó más de 80 muertos, entre ellos seis bolivianos. El audaz Vahidi, llegó, se fotografió con S.E., participó de honores militares, fue a la inauguración de la Escuela de Defensa del ALBA en Warnes, y fugó. Cólera justificada en Argentina porque en Bolivia se reciba con bombos y platillos a tan siniestro personaje, y cólera también en Israel. La explicación boliviana fue que no sabía quién era Vahidi. ¿Será posible semejante cosa? Si, es posible. Es posible si no existe una Cancillería que tenga, por lo menos, una idea de a quién se invita a Bolivia. Luego vinieron las aguadas explicaciones del Canciller que fueron tan lamentables como el acto mismo.
¿Por qué estando Vahidi en Bolivia no lo arrestó la Interpol boliviana? Nadie se explica esa negligencia. Sobre todo cuando la misma Interpol tiene el brazo tan largo como para capturar en Perú a ciudadanos bolivianos como Guillermo Fortún y Luís Alberto "Chito" Valle. Interpol arresta y encarcela a personas por presunciones de delitos, persigue políticamente a otros nacionales en países vecinos, y sin embargo se encoge de miedo de aprehender a un genocida iraní que está en el propio territorio nacional, en sus manos. La Cancillería tendrá que explicar esto y algo más que la notita cagueta a la Argentina.
El Día: Cliometría como actitud
Robert W. Fogel, profesor de la Universidad de Chicago es el creador de la cliometría. Debo confesar que la primera vez que leí este término pensé que se trataba de alguna escala métrica para medir el climaterio, lo que se conocía como la menopausia del hombre antes de la invención del Viagra ¡por supuesto! Hace algunos años, en una clase de historia, me enteré que la cliometría es el cruce feliz entre Clío, musa de la historia y poesía heroica, con el sufijo “metria”, que proviene de la palabra econometría. Es decir, que la cliometría es la rama de la economía que se encarga de la interpretación o/y reinterpretación econométrica de la historia. Es decir, que es la medición estadística de hechos económicos que ocurrieron en el pasado. Es la simulación de acontecimientos que ya pasaron. En un domingo de socialismo chuto, ya sé que esto le parecerá una exquisitez académica que no condice con el letargo del día de descanso, pero por favor no abandone la columna, esto tiene una explicación razonable. Además, muchos de los bolivianos somos militantes, la mayoría de ellos sin saberlo, de la Cliometric Society, como lo veremos mas adelante.
Veamos cómo operan los devotos de la cliometría. La técnica consiste en crear un modelo de predicción matemático que supone que algún evento histórico no ocurrió, a esto se llama el contrafactual en la jerga de los economistas. Más precisamente se denomina “contrafactual o contrafáctico a todo evento o toda situación que no ha acontecido en el universo actualmente observable por la investigación humana pero que pudiera haber ocurrido”. Un contrafáctico forma parte de un universo posible, mientras que el evento o situación actuales forman parte universo actual.
Por ejemplo, Fogel supuso que los ferrocarriles no fueron inventados en el siglo XIX y a partir de esta hipótesis corrió una regresión con cuyos resultados pudo afirmar que el Producto Interno Bruto (PIB) de los Estados Unidos, en 1890, hubiera crecido en menos 3 por ciento de no haber existido los trenes.
En un divertido artículo, Donald McAfee (El crecimiento económico y los viajes de Colón” American Economic Review, septiembre 1983), critica el uso de los contrafactuales para explicar eventos históricos. Para ello especula qué hubiera ocurrido en el año 2000 en el continente americano, si la Tierra fuese plana y Colón hubiese caído del borde del mundo.
En un mundo sin Cristóforo Colombo y sus muchachos, España no hubiese sido un imperio, y, por lo tanto, hubiera sido recapturada por los moros. Norteamérica sería una potencia indígena y por estas tierras de Dios los pueblos originarios reinarían desde siempre. No existiría ni colonialismo ni neocolonialismo. Ciertamente, tendríamos dos imperios en el continente: el de los Pieles Rojas y el Incaico. Obviamente, los capos por estos parajes serían todos los originarios. Sin comercio, los economistas nos dedicaríamos a leer en coca y seríamos los meteorólogos del Inca.
En fin, las cosas y la historia terminan de esta manera cuando se decide juntar economistas y matemáticos para explica la historia. Pero en el país, la cliometría tiene muchos adeptos aunque no utilizamos la estadística para sustentar nuestra afición a vivir en el mundo virtual de los contrafácticos. Se trata de cliometría, de actitud que se desarrolla en nuestro cotidiano, en especial en el campo de la política. Veamos algunos ejemplos. Con frecuencia usamos el contrafactual de la falta de salida al mar para explicar el fracaso económico. Si Bolivia hubiese tenido acceso soberano al Pacífico, el país sería mucho más desarrollado. Inclusive se hacen cálculos que el crecimiento del PIB sería entre 1 y 2 por ciento mayor si hubiésemos tenido puertos. Y la pregunta obvia es: ¿será? En la práctica, el contrafáctico acceso al mar, nos libera de trabajar en otras áreas del desarrollo como nivel de productividad, consensos políticos básicos, capital humano, un Estado eficiente, entre muchos otros. Además, brinda a nuestros políticos de una gran coartada para su fracaso tanto del modelo neoliberal como estatista.
Otros ejemplos que podemos mencionar son: que si en Bolivia no hubiesen existido gobiernos neoliberales ya estaríamos en el primer mundo hace mucho tiempo. Si no hubiese contrabando seriamos un país industrializado. Otros casos que provienen de nuestra historia conservadora, si no se hubiese implementado la Reforma Agraria la agricultura boliviana sería muy productiva. Que si no existiese el Gobierno del MAS aprovecharíamos mejor la excelente coyuntura de precios internacional. En fin, en el país se ha desarrollado una actitud cliométrica frente a nuestra historia, una especie de terapia colectiva que nos hace vivir en el mundo virtual del “si hubiese”, del contrafactual, que muchas veces, nos impide encarar el mundo real.
El Día: Dime con quién andas…
El desastre nuclear ocasionado por el reciente terremoto de Japón ha cambiado radicalmente el interés que algunas naciones tenían por esta fuente de energía. Varios países, entre ellos Alemania y Suiza han abandonado algunos planes que habían previsto y en el vecindario, Venezuela ya hizo saber que lo suyo era nada más que una bravuconada y en Brasil, ya no quieren ni saber de la idea de venderle uranio enriquecido a Irán, propuesta que surgió de los efusivos abrazos que se dieron el ex presidente Lula y el autócrata iraní Mahmud Ahmadineyad, una estrategia que trató de usar el líder brasileño para hacerle ver al mundo que él y su país ya habían alcanzado talla planetaria.
El único país que insiste en mantener su programa nuclear es precisamente Irán y lo hace obviamente, porque su interés pasa por buscar el expansionismo en el mundo árabe y extenderlo hacia América Latina, donde ha encontrado buena recepción en líderes aventureros que andan inflando el pecho, tratando de impresionar al barrio con poses pendencieras. Como decíamos, el Brasil de Dilma Rousseff ha asumido una postura totalmente distinta frente a Irán y sólo se mantienen Bolivia, Venezuela y Nicaragua en el afán de introducir a sus naciones a un bloque siniestro que involucra armas nucleares, terrorismo y fundamentalismo religioso.
La osadía del ministro de defensa iraní, Ahmad Vahidi, que vino a pavonearse a Bolivia con su pinta de jerarca nazi, mientras es buscado por cargos de terrorismo en Argentina, no terminó con esa provocación. En contactos con la prensa nacional dijo que su país estaría dispuesto a ayudar a los bolivianos en caso de una confrontación bélica con Chile. Esa afirmación grosera y altamente dañina, es de mucho peor calaña que lo dicho recientemente por el ministro de Defensa chileno, Andrés Allamand, a quien muchos hoy le estarán dando la razón, sobre todo después de constatar qué tipo de amistades son las que está cultivando el régimen de Evo Morales y hacia qué tipo de aventura podrían conducirlo. Hace mucho que los paraguayos percibieron que en Bolivia algunos están buscando cómo encender la chispa y eso se puede verificar de manera muy clara en recientes revelaciones que confirman que Hugo Chávez, ha metido gran cantidad de armas al territorio nacional, vía el Chapare, por si fuera poco.
El incidente del ministro-terrorista podría tener repercusiones que van mucho más allá de la molestia del gobierno argentino. Tal vez pueda servir para terminar de dividir las aguas en la región, entre los países que en verdad buscan la convivencia pacífica, el diálogo y la buena vecindad y otros que están cultivando relaciones peligrosas y transitando por senderos pedregosos. Lo de Chile ya pasó de castaño a oscuro y en el caso de Argentina, las disculpas no fueron suficientes, pues la presidenta Cristina Fernández decidió cancelar una visita de Evo Morales a Buenos Aires y paso seguido, corrió a entrevistarse con el presidente de Israel, Shimon Peres, a quien le dijo que su país no quiere ningún trato con terroristas.
Bolivia tiene derecho a asumir posturas radicales en su política exterior y de hecho lo ha estado haciendo todos estos años a través de un furioso antiimperialismo que no ha pasado a mayores, ni siquiera en Estados Unidos, donde ningún político y menos el jefe de la Casa Blanca, tiene a Bolivia entre sus primeras cien o tal vez mil prioridades. Sin embargo, incurrir en vínculos que rompen totalmente la orientación de nuestros vecinos, no sólo nos va a llevar al aislamiento total sino a consecuencias que podrían ser ruinosas para todos.
El incidente del ministro terrorista podría tener repercusiones que van mucho más allá de la molestia del gobierno argentino. Tal vez pueda servir para terminar de dividir las aguas en la región, entre los países que en verdad buscan la convivencia pacífica, el diálogo y la buena vecindad y otros que están cultivando relaciones peligrosas y transitando por senderos pedregosos.
El Día: Creerle a un borracho
El vicepresidente García Linera hablaba el otro día como esos borrachos que no quieren irse a dormir. “Voy a tomar la úuuuultima y me voy”, suele decir y al día siguiente, cuando la cabeza les estalla de dolor dicen “no vuelvo a tomar nuuuuunca más”. Precisamente cuando estaba de resaca, allá por diciembre del año pasado (“Qué lejos estoy”, diría don Nilo), el mismo vice trataba de convencernos a todos que el gasolinazo era mucha cosa, que era la quimio para salvar al paciente con cáncer, el bisturí bien filudo para extirpar el tumor. Resultó que los medicuchos no habían dado con la receta correcta y el paciente resultó más pataleador de lo que ellos esperaban. Aunque el diagnóstico estaba bien, ya no habrá quién le crea, no después de que el mismo vicepresidente justifica la internación de más de 120 mil autos chutos al país, lo que significará agrandar el tumor que constituye la subvención de los combustibles. Pero eso sí, García Linera mueve la cabecita, cierra los ojos y dice que es la úuuuuuultima vez y que nunnnnca más habrá amnistía para los contrabandistas. Los “chuteros”, que son los que saben más que nadie de política en este país y que además ya tienen su propia bancada en el Senado, fueron los primeros en decir que a los borrachos no hay cómo creerles.
El Día: Bolítica
Son cuentos chinos decir que la ley de autos chutos no va a beneficiar a los autos que ya están aquí, claro que va a ser así y también es para los robados, son promesas de campaña y para que el gobierno reúna plata porque está quebrado".
Norma Piérola
Diputada de convergencia nacional
Se dice que: La Ley de regularización y saneamiento vehicular para los denominados autos indocumentados, conocidos como "chutos", no favorecerá a vehículos ingresados recientemente porque no es para ellos.
Qué terrible, hicimos el esfuerzo máximo para controlar (el ingreso de vehículos ilegales) e igual llegaron por todas partes. Reconocemos que no hemos tenido la suficiente capacidad para controlar el
contrabando".
Álvaro García Linera
Vicepresidente del Estado
El Día: Bolítica
Lamento que el Primer Mandatario se preocupe de formar una Escuela de la Alba con recursos venezolanos, debería hacerlo buscando alternativas de solución a la inseguridad que golpea no sólo a los cruceños sino también a Bolivia en general".
Rubén Costas
Gobernador de Santa Cruz
Se dice que: Ante el fracaso de la Cumbre sobre Seguridad Ciudadana, la Gobernación cruceña convocó para este martes al Concejo de Seguridad Ciudadana, para poder reducir la delincuencia y el narcotráfico en la región.
Nos cansamos de esperar la voluntad estatal, puesto que el gobierno se había comprometido a realizar una Cumbre en mayo. Durante dos años convocamos al Ministerio Público a la Policía(…) pero gracias al gobierno nunca se logró el quórum".
Vladimir Peña
Secretario de Justicia del Gobierno Departamental
El Día: Se enojó la señora
La visita del ministro-terrorista iraní Ahmad Vahidi a Bolivia ha sido un insulto difícil de digerir para el Gobierno argentino. El atentado que nuestro “ilustre” visitante ayudó a perpetrar en el vecino país ha sido el peor de su historia y obviamente constituye una herida difícil de cerrar porque todavía permanece impune. En Buenos Aires radica la segunda mayor comunidad judía fuera de Israel y su gravitación en la política y economía argentinas son importantísimas. De hecho, el actual canciller Héctor Timmerman pertenece a dicha colectividad, al igual que el fiscal que investiga el bombazo que se produjo a la AMIA en 1994. La presidenta Cristina Fernández no ha dudado en exteriorizar su molestia por la presencia de Vahidi en el país y ha decidido cancelar una visita que Evo Morales debía realizar a mediados de este mes a la capital argentina. En contrapartida, la mandataria mantuvo en Italia un encuentro con el presidente de Israel, Shimon Peres, quien agradeció el gesto y la felicitó por "la férrea posición que viene manteniendo su gobierno contra cualquier tipo de terrorismo". Si la señora Fernández está enojada porque en Bolivia le pusieron alfombra roja al ministro iraní, qué va a pesar cuando se entere que no hubo tal expulsión, como mencionó el canciller David Choquehuanca.
El Día: El cáncer de la corrupción
Las recientes noticias de prensa han dado cuenta de la remoción intempestiva del titular de la cartera de Trabajo, a la sazón uno de los dignatarios incorporados hace poco al gabinete del presidente Morales. Sin embargo, no ha sorprendido que la obligada renuncia haya obedecido a un factor que se está convirtiendo en el común denominador de las salidas de ministros: la corrupción. Hasta donde se sabe, las graves denuncias sobre reiterados hechos irregulares cometidos por los funcionarios públicos de esa repartición estatal, los que sumados a las solicitudes abusivas de montos de dinero a otros trabajadores y acoso sexual, han dado lugar a la salida poco digna del titular.
En los hechos, se está constatando que la lucha contra la corrupción en las reparticiones públicas dista de ser eficaz, por hablar de una de las metas, sino que se muestra falta de perspectivas alentadoras. Una vez más, se está demostrando que la gestión pública viene a ser un asunto demasiado serio como para colocarlo en manos de personal improvisado, como son los funcionarios que llegan al cargo bajo la influencia del calor político y amparados en la sombra del clientelismo y la prebenda. Quiérase o no, el gobierno del MAS no ha podido escapar a la vorágine destructora que significa la satisfacción de apetitos personales y de grupo que tanto se ha criticado a otros partidos.
De alguna manera, las destituciones de los administradores públicos coloca en la palestra la importancia de una gestión pública que responda a las necesidades e intereses del colectivo nacional. No está por demás recordar que la gestión pública debería ser apartidista, con autoridades y funcionarios públicos que accedan a sus funciones en virtud de méritos y competencia. La institucionalización de la administración pública viene a ser, de este modo, una de las tareas a emprender con todo el vigor que da el poder político. Persistir en errores largamente criticados y cometidos por anteriores partidos en función de gobierno, dice mucho de la solidez programática del Gobierno.
Los dignatarios de Estado a cargo de las carteras ministeriales deben asumir con total responsabilidad por los hechos que acaecen en las reparticiones a su cargo. Si existe corrupción institucionalizada en su interior, el deber de los ministros pasa, de manera insoslayable, por extirpar de raíz los grupos y personas que incurren en hechos irregulares y que tienden a la corrupción en desmedro del Estado, la colectividad ciudadana y el propio Gobierno. Quizás ha llegado el momento para que el Gobierno del Estado Plurinacional reformule sus métodos de lucha contra la corrupción, a sabiendas que con ello pone a prueba el apoyo interno que le ha llevado al poder.
Sin duda, las enseñanzas que se extraen de esta lamentable situación en el Ministerio de Trabajo, es que no se puede hacer una gestión pública decente si no se toman las medidas más drásticas y necesarias para combatir la corrupción institucional, especialmente si se ha comprobado que su expansión se asemeja a un cáncer maligno en el cuerpo del Estado. Conviene advertir que el Gobierno todavía está en condiciones de reencauzar sus métodos y asumir que está rodeado de gente que no es la más adecuada para el cambio. Es posible que sus conmilitones sean partidarios del proceso de cambio de dientes para afuera, y ello significa que harán lo imposible para que nada cambie.
Quizás ha llegado el momento para que el Gobierno reformule sus métodos de lucha contra la corrupción, a sabiendas que con ello pone a prueba el apoyo interno que le ha llevado al poder.
El Día: Estado surrealista plurinacional
La revolución democrática y cultural cada vez más ajena a la realidad nacional. Como si existieran dos realidades, una, la de verdad, en las calles, en el campo, en los bosques y montañas de Bolivia, y la otra, en la cabeza de los proyectistas del Estado Plurinacional. Sin embargo, después de cinco años el actual gobierno defrauda al 70% de los bolivianos. Esta desilusión sorprende, habiendo tanto a su favor: un país caracterizado socialmente por la pobreza urbana y la miseria rural, reflejando alto grado de marginalidad, exclusión e inequidad; con analfabetismo, falta de cultura democrática, inclinación por las soluciones prácticas violentas, que hacen de la violencia un fenómeno casi estacionario (viene con la misma rigidez del calendario de invierno y verano); escasa cobertura e infraestructura sanitaria que hacen de la vida una mercancía barata; donde la vivienda es un lujo, casi tanto como conseguir trabajo estable y bien remunerado. Cualquier propuesta “revolucionaria” (que promete bajar la luna y las estrellas en menos tiempo que canta un gallo), debería recibir y mantener una entusiasta acogida. Pero, la realidad es otra: el descontento es casi general; críticas a la falta de gestión y a la mala gestión del equipo que acompaña a Evo Morales, que alcanzan al Primer Mandatario y también al vice. Más llamativo es que este fenómeno se da hasta en los bastiones de mayor porcentaje indígena campesino, los aliados tradicionales: La Paz, El Alto, Oruro y Potosí, donde; además, está apareciendo la resistencia política mejor organizada.
Mientras, Evo tiempla la lira para la audiencia doméstica y Álvaro hace de trovador en el extranjero. Pero lo real es que hay oposición, tanto pragmática como ideológica. La primera, porque empieza la población a exigir resultados tangibles; algo que ver y tocar. Millones de dólares se escurren en propaganda oficial, pero esos no bajan de la tele al llano. Al contrario, todo el mundo ha descubierto el truco: se anuncia cualquier “intento” (en vez de proyectos) o deseo de intenciones y de inmediato se calculan cuantiosas inversiones, ingresos deslumbrantes en equis años (generalmente muchos) y, ya nomás se los reparte. Se comen hasta el queso antes de tener la vaca ni la leche.
Evo en un duro discurso de apertura amenaza a los inversores cuando en realidad se llora para que inviertan en el sector hidrocarburos. Es tan dura la realidad que buscando agua, encuentran gas, pero lo que se necesita es inversión de riesgo, exploración, para cambiar la escasez de los trillones de pies cúbicos (TCF) en reservas probadas o al menos probables, y mercados, para empezar a imaginar y proyectar en serio. Después del évico “se acabó el cálculo político”, que sonó a bofetada, vendría el Vice con cataplasmas, pero ya era tarde: se requiere una nueva ley que defina con precisión las reglas para el sector (menuda tarea), y seguridad jurídica que, evidente, no está en el país. Esto se le escapa a la ilusión oficialista, como el de concluir un gasoducto en la parte boliviana sin estar la porción argentina y, pequeño detalle, no hay gas. El Mutún sigue esperando y las industrias en La Paz y El Alto paran. La próxima elección “inédita” de magistrados, no genera más tranquilidad.
El país de las maravillas tienen audiencias y auditorios bien seleccionados, predispuestos a soñar, a someterse a una sesión catártica o de sanación. La oratoria de García Linera facilita el fenómeno, al punto de desafiar a los de UNASUR reunidos en Buenos Aires “a tener el coraje” de declarar Latinoamérica un estado plurinacional. Somos el ejemplo a seguir: se resuelven los problemas estructurales internos y se proyecta con voz fuerte en los asuntos internacionales. Hay algo muy profundo en algunas personas, experiencias precoces negativas, traumáticas, auténticas carencias emocionales que marcan de por vida. Para soportarlo hay que evadirse fabulando, creando ficciones, dejando atrás la “atroz realidad”. El riesgo es el perder el sentido de la realidad, a transitar de las ilusiones a las alucinaciones sin darse cuenta y el desatender los problemas reales.
La segunda opción de oposición es de mayor impacto. Se denuncia traición, nada menos, que a los postulados fundacionales del instrumento político de los pueblos que los llevó al gobierno el 2005. Nace en los “movimientos sociales”, grupos o gremios no numerosos pero bien disciplinados, que tenían “su agenda” legal. Sienten, para recurrir a una expresión frecuente del presidente, que no se les está cumpliendo: nacionalización de empresas que explotan recursos naturales, industrialización, empoderamiento del indígena campesino y lucha frontal contra la corrupción y la pobreza. El tiempo pasa y ahora, sin ser oposición política en su mayoría, encuentran justificación a su protesta: toman las calles, bloquean caminos, marchan los desencantados, y el cachorro de dinamita omnipresente en el mundo andino minero. El Gobierno, represivo, con fuerza policial, militar y paramilitar (los infiltrados de siempre), como único recurso para resolver conflictos. No protestan y están felices los con agenda “de lo ilegal”: traficantes de influencias, promotores de la corrupción en la administración pública, dueños y aliados de la economía informal (evasores y contrabandistas de todo tipo), así como los cómplices en la cadena productiva de la coca y el narcotráfico. El proyecto de la revolución democrática y cultural es un discurso vacío, al que le falta alma, carece de sentimientos y hasta de razón. Ha desaparecido la democracia y la cultura fue transformada en folclore. No hay calidad humana porque no hay respeto al ser humano. El que sufre, el que necesita trabajo, salud, tranquilidad, esperanza, no cuenta. Hoy sólo arranca una sonrisa nerviosa de la ciudadanía, fiel testigo de hasta dónde se pueden atropellar las libertades cuando el surrealismo ordena e impera en el Estado Plurinacional.