Elecciones en Sucre: proyecciones para Bolivia

Las elecciones municipales en Sucre son relevantes para toda Bolivia, en primer lugar por tratarse de la capital de la república, pero también por ser los comicios inmediatamente siguientes a las elecciones judiciales realizadas en el pasado mes de octubre.Es decir, que la votación de diciembre puede convertirse en un nuevo test para corroborar el rumbo de las tendencias de opinión pública, que en las elecciones judiciales se manifestaron de una forma claramente crítica hacia la gestión del gobierno de Evo Morales, no sólo en lo tocante a la injerencia en el Poder Judicial, sino a los rasgos generales de autoritarismo del régimen.De acuerdo a los sondeos existentes hasta el momento, la intención de voto por el Movimiento Al Socialismo para las municipales de la Ciudad Blanca se situaría en torno a un 28%, dato que es consistente con los resultados del sufragio de octubre, donde los votos nulos y blancos de Sucre sumaron un 72%.Por lo tanto, es altamente probable que el 18 de diciembre nos encontremos con una votación opositora superior al 70%. Sin embargo, la disyuntiva abierta es si esa votación se mantendrá dispersa entre varias candidaturas, abriéndole el camino al oficialismo para retener el gobierno municipal, o si logrará concentrarse en torno a un postulante, convirtiendo estos comicios en un nuevo revés para la administración evista, luego de los golpes sufridos con el gasolinazo, la VIII Marcha Indígena y la mencionadas elecciones judiciales.Precisamente, uno de los candidatos a la alcaldía, Horacio Poppe, definió la situación cáusticamente tras conocerse los resultados de la votación del 16 de octubre: “le hemos dado la estocada final al MAS y en diciembre le pondremos la lápida”.Las posibilidades de concentración del voto opositor parecen estar creciendo, tras el anuncio de los ex dirigentes cívicos John Cava y Jaime Barrón de pedir la resignación de la postulación de Moisés Torrez, quien aparecía en tercer lugar en los diversos sondeos, convirtiéndose por lo tanto en un factor de dispersión.Por supuesto, aun cuando se logre esa unificación opositora, habrá que sortear las distintas maniobras de un Órgano Electoral completamente sesgado. Pero las elecciones de Sucre también son relevantes a nivel nacional en otro sentido: la capital es el escenario donde se construyó, sin concertación y con violencia, un texto constitucional que no ha logrado plasmar un nuevo pacto social que una a los bolivianos. Se trata, en definitiva, de una Constitución partidaria, que probablemente durará tanto como dure el MAS en el poder.Sucre es, por lo mismo, la llamada a reabrir el debate constitucional, algo que tarde o temprano tendrá que darse dado que tanto la implementación de las autonomías municipales como departamentales depende de una reforma parcial.Al mismo tiempo, los indígenas de tierras bajas también comienzan a analizar la posibilidad de cambios constitucionales, tras comprender que la transformación de los Territorios Comunitarios de Origen (TCOs) en Territorios Indígena-Originario-Campesinos (TIOCs) tenía el verdadero cometido de abrir sus tierras a la incursión cocalera, algo que ha quedado patente durante la reciente crisis del TIPNIS.En suma, Sucre tiene ante sí la posibilidad de proyectar un liderazgo nacional, opción que dependerá de la capacidad de los votantes de unirse en torno a una alternativa clara al evismo…[email protected]