En 6 años, Bolivia expuso 20 denuncias contra EEUU; conspiración: principal queja de Evo

La mayoría de las acusaciones se realizó en actos públicos por parte del Presidente y otros funcionarios. Un diputado dice que se debe esperar las investigaciones.

En seis años, Bolivia expuso 20 denuncias contra EEUU

image La conspiración fue el eje de las quejas presentadas por el Gobierno.

Página Siete / La Paz – 07/04/2012



El Gobierno presentó desde 2006 hasta el mes pasado al menos 20 denuncias contra Estados Unidos por conspiración en contra del presidente Evo Morales, financiamiento de protestas opositoras e indígenas y terrorismo.

Página Siete hizo un relevamiento hemerográfico de las acusaciones expuestas –generalmente– en actos públicos por parte del presidente Morales o autoridades de Gobierno; no obstante, ninguna de éstas fue aclarada o por lo menos, según asambleístas del MAS, está en proceso de investigación.

En 2006, el Jefe de Estado denunció que cuando era dirigente de las seis federaciones de cocaleros del trópico de Cochabamba, personeros de la DEA buscaban asesinarle cuando se llevaban a cabo operativos de erradicación de cocales.

En esa misma gestión y después de que se produjeron atentados con dinamita en dos hoteles de La Paz, el Mandatario declaró que Estados Unidos estaba detrás del atentado terrorista porque el principal sospechoso del acto era el estadounidense conocido como Lestat Claudius de Orleans y Montevideo.

En varias ocasiones y recientemente en noviembre de 2010 acusó al Gobierno de ese país de “golpista” y “antidemocrático” por gestar presuntamente golpes de Estado en América Latina como el de Honduras y Ecuador y recientemente ratificó estas declaraciones porque no se invitó a Cuba a la Cumbre de las Américas que será en Colombia.

En mayo de 2010 en un acto público con las Fuerzas Armadas, el Jefe de Estado afirmó que los distintos gobiernos que ha tenido Estados Unidos han protegido, encubierto y fomentado al narcotráfico en otras naciones para supuestamente aplicarles un control político y chantajearlas.

En febrero de este año, Morales también acusó a algunas ONG de ser una “quinta instancia” de espionaje de EEUU a su Gobierno. Durante su segundo mandato fue frecuente el ataque a organizaciones no gubernamentales como Cejis y Fobomade, acusadas de trabajar con financiamiento de Usaid.

En 2008, cuando la llamada “media luna” inició movilizaciones en contra del descuento del IDH y contra la nueva Constitución, se impidió que Morales pudiera aterrizar en aeropuertos de cinco departamentos y fue el momento más crítico para su administración porque se generó una polarización que amenazaba con enfrentamientos civiles.

De hecho, en septiembre de ese año en Pando, se produjo la masacre de Porvenir que dejó más de 13 muertos entre indígenas y seguidores de la “autonomía”.

Entonces acusó a la embajada de EEUU de apoyar esa “conspiración” y echó al embajador de entonces, Philip Goldberg. Posteriormente expulsó a la DEA.

Esto complicó las relaciones bilaterales, se retiraron los embajadores y hasta ahora no se reponen a éstos aunque recientemente se firmó un acuerdo marco de “respeto mutuo”.

Durante la realización de la VIII Marcha en defensa del TIPNIS, autoridades gubernamentales también lanzaron acusaciones contra EEUU, Usaid, varias ONG y la “derecha” por financiar la movilización.

Se dijo que EEUU tiene un programa geopolítico para proteger la amazonia a cualquier costo y nuevamente se acusó a los líderes indígenas de recibir financiamiento de ese Gobierno.

Página Siete buscó hablar de este tema con el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, pero no fue posible. El parlamentario masista Lucio Marca, consultado sobre este tema, dijo que las denuncias planteadas “están en investigación”.

Una relación marcada por idas y venidas

2008. En este año se enfriaron las relaciones entre Estados Unidos y Bolivia. Con la expulsión de Philip Goldberg, el Gobierno norteamericano tomó una decisión similar y echó al embajador boliviano en EEUU. También se suspendieron las operaciones de la DEA.

2011. Desde 2010, ambos gobiernos buscan reencauzar las relaciones bilaterales y para ello se realizaron reuniones de autoridades entre ambos países y finalmente en noviembre de 2011 se firmó un acuerdo marco, pero aún existen ataques verbales de Bolivia.