Es fácil pensar que esta gente lo tiene todo. La fachada y el resplandor de la gran pantalla los encubre pero la realidad siempre termina por delatarlos.
Sean Penn, protagonista de uno de los próximos estrenos en Hollywood, ‘Gangster Squad’, no ha sido una excepción al confesar sus problemas personales más íntimos, como el fracaso sentimental que ha tenido que digerir, al menos, en dos ocasiones.
En una entrevista con la revista Esquire, el actor de origen lituano de 52 años asegura que nunca ha tenido el amor que buscaba y que aún no ha logrado recuperarse del golpe que supuso su divorcio de la actriz Robin Wright, con la que estuvo casada desde 1996 hasta 2010.
"No hay que tener vergüenza en admitir que todos queremos que nos quiera alguien", indicó el intérprete californiano. "Cuando miro atrás a mi vida sentimental, no siento haber tenido esa clase de amor. Fui el único que no se dio cuenta del fraude que viví en algunas de estas circunstancias".
Penn asegura que se dio cuenta de lo ciego que había estado durante los años de casado, algo que calificó de "fuerte humillación" pese a las apariencias de matrimonio feliz de cara a la galería y los dos hijos surgidos de la relación, Dylan de 21 años y Hopper de 19.
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También confiesa que no le ha ido bien con la separación a la hora de manejar la relación con sus hijos, además de referirse a la operación en el cerebro a la que tuvo que someterse Hopper tras un accidente con un monopatín. Se refugió en la bebida y pasó mucho tiempo tirado en la cama sin hacer nada.
Fuente: www.abc.es