Cuatro hábitos propios de la gente delgada

delgadaLas personas delgadas pueden serlo por muy distintos aspectos. Desde la genética hasta el tipo de vida, pasando por el cuidado de la alimentación y la práctica de deporte. Sin embargo, existen una serie de hábitos comunes que, salvo alguna excepción, pueden observarse en muchas personas caracterizadas por su delgadez. ¡Hacemos un repaso!

1. Ser inquieto

Las investigaciones muestran que las personas que se mueven más consumen unas 350 calorías extra por día, el equivalente de una paseo diario de una hora. Si no eres de esas personas que están siempre moviéndose de un sitio a otro y que nunca se quedan sentadas mucho tiempo en un sitio, deberías intentarlo.



No es tan difícil. Por ejemplo, bastaría con levantarte de la silla y andar mientras hablas por teléfono, levantarte varias veces al día de tu mesa y estirar el cuerpo, o subir las escaleras en lugar de usar el ascensor. Estos cambios no solo te ayudarán a perder peso también mejorarán la circulación sanguínea y evitar enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2.

2. Comer sin distraerse

Somos la generación multitasking, lo cual incluye comer mientras vemos la tele, comer mientras miramos el teléfono, comer delante del ordenador mientras trabajamos, etc. Sin embargo, la gente que come sin hacer otra cosa al mismo tiempo es más consciente de cuánto come y de las señales de saciedad que les manda el cerebro, y según estudios recientes ingieren 300 calorías menos – lo suficiente para bajar un par de tallas en un año-, que los que comen distraídos por otras cosas.

3. Cuando comen fuera cambian los menús sin remordimientos

Lo habrás visto muchas veces, hay personas que si el segundo viene por defecto con patatas fritas piden que se lo sirvan con ensalada, que piden fruta en lugar del postre hipercalórico que les propone el restaurante, y están customizando constantemente los menús de los restaurantes para consumir exactamente el tipo de alimento que quieren. No es una manía por contar calorías sino por comer alimentos de calidad y no sobrealimentarse cuando comen fuera de casa.

4. Privarse de las cosas que no les gustan demasiado

La gente delgada no engorda con cosas que no valen la pena. Es decir, si te mueres por un helado de chocolate vale la pena que te comas uno de vez en cuando. Si te da un poco lo mismo, ¿para qué te lo vas a comer? Con esta filosofía solo ganarás peso con las comidas hipercalóricas que realmente te gusten mucho y evitarás aquellas que, bueno, tampoco te matan. Esto también es comer conscientemente.

Fuente: www.mujerhoy.com