Estados Unidos está preocupado por “el lavado de dinero del narcotráfico, la corrupción, el contrabando y la evasión fiscal en la Argentina” y alerta que “las vulnerabilidades generales del sistema financiero” exponen a nuestro país al riesgo del financiamiento al terrorismo. También advirtió sobre el avance del consumo de paco (pasta base) entre los sectores más humildes.
En su informe anual sobre “Lavado de dinero y delitos financieros” difundido anoche por el Departamento de Estado, EE.UU. señala que en la Argentina “la mayoría de las operaciones de lavado se hacen a través de transacciones en centros off shore”, o paraísos fiscales. Y advierte que “el extendido uso de cash (efectivo) en la economía facilita que la Argentina sea vulnerable al lavado de dinero”.
Además, el reporte destaca que “las restricciones del Gobierno al acceso a la moneda extranjera creó un mercado negro que asignaba al dólar hasta un 50% más que la tasa oficial”. Luego de aclarar que nuestro país tiene una economía con fuertes lazos con el dólar estadounidense, el informe señala que “los argentinos tienen miles de millones de dólares fuera del sistema financiero formal, en destinos off shore o en el país, muchos de ellos legítimamente ganados, pero no declarados al fisco.” La estimación del tamaño de la economía informal varia del 25 al 40%, dice el informe. Todo el panorama puede tener un horizonte complicado: “La vulnerabilidad general en el sistema expone a la Argentina al riesgo del financiamiento al terrorismo”, alerta el reporte.
El departamento de Estado también difundió su reporte anual sobre drogas en el mundo. En el capítulo argentino, EE.UU. advierte que el consumo de drogas y la producción de cocaína son problemas que crecen en nuestro país, a la vez que alerta que el consumo de paco es un drama que se expande entre los sectores más humildes.
El informe apunta que el Ministerio de Seguridad argentino ha reanudado la cooperación con Estados Unidos para el combate de las drogas, que había sido suspendida en 2011 tras la confiscación por parte del canciller Héctor Timerman de elementos “sensibles” de un avión estadounidense en un aeropuerto argentino, y ahora se comparte información, entrenamientos y seminarios. Sin embargo, “Estados Unidos no ha recibido autorización para cooperar con las fuerzas de seguridad provinciales”, destaca el informe.
La mayoría de la cocaína que proviene de los países del norte viaja para Europa, agrega el reporte, pero señala que “el tamaño de los establecimientos para producirla y la gran cantidad disponible de paco sugiere que el procesamiento doméstico está creciendo”, aunque aún en forma “pequeña”.
Clarín – Buenos Aires