Gobernador de La Paz confirma tres muertos en Arcopongo y dice que la violencia se extendió por cuatro días

El gobernador de La Paz, César Cocarico, viajó hasta el lugar del conflicto por un yacimiento de oro. Informó que al menos 100 personas, presumiblemente de la cooperativa Ullakaya Condorini ,desalojaron a comunarios de tres poblaciones.

imageLa Razón Digital / La Paz

Tras retornar de la zona de conflicto, el gobernador de La Paz, César Cocarico, confirmó hoy que tres personas murieron durante los enfrentamientos por la explotación de oro en Arcopongo, provincia Inquisivi de La Paz. Dijo además que la batalla entre las partes enfrentadas se prolongó por cuatro días.



De acuerdo a la autoridad, al menos 100 personas, presumiblemente de la cooperativa minera Ullakaya Condorini, provocaron los enfrentamientos que se prolongaron entre el jueves 15 y el domingo 18. El motivo habría sido una disputa por la extracción de oro con los mineros de la cooperativa Palma Flor.

Cocarico viajó hasta el lugar de los hechos junto a un contingente policial y un equipo de fiscales, para verificar las denuncias de comunarios sobre avasallamiento de tierras por parte de cooperativistas mineros. La mañana de hoy ofreció una conferencia de prensa para informar sobre los resultados preliminares de su visita.

Dijo que por cuatro días consecutivos los habitantes de varias comunidades fueron víctimas de violencia. “El día jueves un grupo de 100 personas, presumiblemente de la cooperativa Ullakaya, han avanzado desde la comunidad de la Plaza y han hecho actos de violencia hasta el domingo”.

Explicó que los avasalladores expulsaron a los habitantes de la Plaza, Palma Flor y la Plaza B y que en los hechos murieron tres personas. “Han sido autores del primer muerto, llamado Antonio Flores Calle, que tiene una herida de bala en la rodilla”, relató.

Además de Flores, cuyo deceso ya había sido confirmado por el viceministro de Gobierno, Jorge Pérez, habitantes de la zona denunciaron la muerte de Mario Venegas, de 28 años, y de Gonzalo Cabrera, cuyos familiares llegaron a La Paz el miércoles.