La presencia de ex integrantes del MRTA en la seguridad personal de Evo Morales es una nueva muestra de la incidencia de elementos procedentes del terrorismo en el MAS.
El documental Our Brand is Crisis confirmó lo aseverado por el emerretista Julio César Vásquez, a quien se ve en las imágenes formando parte del cordón de protección del caudillo cocalero.
Pero este no es el único indicio que liga a la escolta del mandatario con actividades terroristas. Baste recordar el caso del teniente George Peter Nava Zurita, integrante de la guardia presidencial que el 2008 fue hallado “con las manos en la masa” en la sureña Yacuiba, donde se lo acusó de un atentado con explosivos a un canal de televisión.
Por obra de la injerencia gubernamental en la justicia y de una posterior beca a Venezuela, Nava Zurita hizo mutis por el foro, no sin que antes se conociera el contenido del flash memory que le fue incautado al momento de su detención, con un plan de acción contra la oposición que incluía un punto titulado “Magnicidio” (¿el caso Rozsa?).
Todo parece indicar que el aparato de seguridad del presidente, así como la mentada “Comisión de Inteligencia Revolucionaria” que funcionaría bajo el ala de la Vicepresidencia, son parte de un entramado oscuro más parecido al que suele rodear a los dictadores que al apropiado para un gobernante democrático…