«El Hobbit»: Todo concluye al fin

Exclusivo, en Londres.Clarín estuvo en la despedida que el director Peter Jackson y el elenco hicieron al presentar “La batalla de los cinco ejércitos”. ¿Habrá más? Las palabras de Ian McKellen y Martin Freeman.

Dos magos. Peter Jackson, el director, e Ian McKellen, que fue Gandalf, el Gris. Foto: Warner Bros.

LONDRES. Enviado especial.



Si todo concluye al fin, mucho de nostalgia y tristeza, pero también satisfacción se percibe, se siente en el Ballroom del Claridge’s Hotel, en el centro de Londres, donde Peter Jackson y una decena de actores da la despedida formal al universo de Tolkien.

Afuera hace un frío helado, pero en el salón el ambiente se va poniendo más cálido. Es la presentación de El Hobbit: La batalla de los cinco ejércitos, tercera parte en la que el realizador de la trilogía de El Señor de los anillos dividió el libro del autor sudafricano. Y trece años después de estrenar precisamente El Señor…, Jackson dice concluir “con orgullo” su trabajo, la travesía épica por el universo de J.R.R. Tolkien.

“Ha sido un viaje impredecible. Algo de lo que estoy muy orgulloso”, asegura Jackson, mientras se acaricia la barba y resume las seis películas, contando que La batalla de los cinco ejércitos transcurre unos 60 años antes de El Señor de los anillos.

“Cuando supimos que haríamos El Hobbit, ya sabíamos que años después la gente lo vería todo en el orden original, empezando por las últimas películas que filmamos. El público respetará el orden” es lo que cree el realizador neozelandés, mucho más delgado y con muchas canas con respecto al mismo hombre al que entrevistamos hace casi 14 años en la presentación de la primera El Señor de los anillos.

“Tengo la esperanza de que los niños puedan ver a partir de ahora la obra de Tolkien tal y cómo él la concibió -confía-. Durante todos estos años me repetía: es una serie de películas, una serie de películas…”.

“Todas las películas son una gran responsabilidad, porque hay mucho dinero invertido que no es tuyo, y te volvés responsable de él -750 millones de dólares costaron las tres partes de El Hobbit, ver Las increíbles cifras...-, pero también es una responsabilidad hacer una película que a la gente le interese y esté dispuesta a salir de su casa y gastar su dinero para ir a verla… El Hobbit ha sido una gran satisfacción para mí -dice, y luce convencido-, ya que he visto cómo el público la ha disfrutado desde el inicio, y eso ha hecho que ame todavía más a lo que me dedico.”

Y hasta parece emocionado cuando comenta que, este final, es su legado personal: “Quiero inspirar a una generación de jóvenes para que se conviertan en cineastas”.

A su lado lo acompañan algunos veteranos en la Tierra Media, que estuvieron en la trilogía de El Señor…, y otros que se sumaron ahora. Andy Serkis (Gollum, y director de la segunda unidad), Lee Pace, Orlando Bloom, Evangeline Lilly, Martin Freeman, Luke Evans, Ian McKellen, Billy Boyd, Ryan Gage y la guionista Philippa Boyens lo respaldan.

“Esto es el fin de la Tierra Media. No habrá nada más”, dispara ante la incredulidad, o el inocente deseo de los fans de que las aventuras no concluyan. “Yo he terminado mi trabajo, ahora me puedo ir a la playa”, dice el director de King Kong.

En esta tercera parte, Bilbo Bolsón (Martin Freeman) acaba la aventura que emprendió en su viaje inesperado junto a La Compañía de Thorin Escudo de Roble (Richard Armitage), para intentar recuperar la Montaña Solitaria, el reino perdido de los Enanos del que fueron expulsados por el dragón Smaug. Entonces, la película se centra en el muy esperado enfrentamiento final con Smaug y en la gran batalla en las Lindes de Erebor, la Montaña Solitaria.

Martin Freeman es el único que trata de no ponerse nostalgioso. “Estoy muy orgulloso de mi participación en las tres películas. Aún es muy pronto para ver si me han cambiado, pero he disfrutado mucho -explica-. Este papel me ha dado la oportunidad de crecer. Los héroes de hoy en día no son como los ‘hobbits’, ellos son altos y fuertes. Sin embargo, Bilbo lo es: es una persona atrevida y valiente”, apunta el británico.

Es cierto: el heroísmo es uno de los principales ingredientes del filme, que en la Argentina conoceremos el 1° de enero. Y remata: “Mi objetivo en estas películas es darle a los niños un consejo: no deben obsesionarse con ninguna joya”, por el anillo que lo vuelve invisible.

Un silencio sepulcral se apodera de la sala cuando habla McKellen. “Me despedí de Gandalf en el año 2000, cuando nos fuimos de Nueva Zelanda. Y ahora he vuelto a ponerme el sombrero de mago de Gandalf. Peter ha hecho una serie de clásicos, no una franquicia, y yo he tenido la suerte de estar allí y de vivirlo en primera persona”, explica McKellen, con su excéntrico acento.

“Todos los que hemos participado en estas películas hemos tenido un efecto importante en la vida de muchos jóvenes. Muchos de los que había en el preestreno no habían nacido cuando se presentó el primer filme”, subraya el actor. “Me siento muy afortunado de haber participado en esta serie. Algunos nacieron con ella, y le enseñarán las películas a sus hijos, será un clásico con mayúsculas. No es el fin, es el principio de algo”. Cerca, Orlando Bloom recuerda que “tenía 21 años cuando me metí por primera vez en la piel de Legolas”.

Durante los 40 minutos que duró el encuentro con la prensa también se habló del aspecto tecnológico. Mientras Andy Serkis opinaba que “todo el tema del performance y los efectos especiales tiene un futuro increíble en el cine, porque es un arte la manera en que transformás las personas en tecnología”, Jackson mostraba un costado más humano: “La tecnología no da el alma, el que se encarga de los sentimientos es el actor”.

Igual, tan visionario como su autor predilecto, Jackson aseguró que, de ahora en más, terminado su propio universo en la Tierra Media y sin poder adaptar más textos de Tolkien (“los herederos tienen los derechos, y si no los venden…”) se encerrará a pensar en nuevos proyectos y en innovar. ¿Para qué? “Para que en el próximo siglo el cine dé el mismo salto que nosotros hemos dado con respecto a los pioneros del siglo XX”.

 

Dónde ver lo que no se ve en los cines

Cuando termine con la promoción del filme, Jackson adelantó que se encerrará unos meses para preparar la versión extendida de La batalla de los cinco ejércitos, por lo que se podrá disfrutar en casa de las versiones extendidas de las seis películas. “Serán casi 24 horas de alegría”, soltó con una risa.

El neozelandés aseguró que la versión extendida “tendrá unos 30 minutos de escenas nuevas”, y la coguionista y coproductora Philippa Boyens confió que en ellas “se verá más de Beorn”.

Tolkien describe a Beorn en El Hobbit como un hombre de hombros anchos, de tamaño inmenso y extremadamente fuerte, que podía cambiar su piel y convertirse en un oso negro. Odiaba a muerte a los orcos, y de hecho tiene un rol importantísimo en la victoria sobre los Goblins en la batalla de los cinco ejércitos.

 

 

Las increíbles cifras de «El Hobbit»

 

745 millones de dólares

costaron las 3 películas de “El Hobbit”, convirtiéndola en la trilogía más cara de la historia.

 

1.980 millones de dólares

recaudaron las primeras dos, “Un viaje inesperado” y “La desolación de Smaug”.

 

383 millones de dólares

lleva recaudados “La batalla de los cinco ejércitos” en sus primeros 14 días en todo el mundo.

 

 

RELACIONADAS

Fuente: clarin.com